XII

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Blair

En estos momentos se me olvida la razón por la que hemos venido al bar, solo me enfoco en disfrutar de la encantadora voz del chico en el escenario. La canción es algo triste, pero eso no me impide sonreír cuando el chico se percata de mi presencia. Sonríe de vuelta y siento que mi corazón podría derretirse dentro de mi pecho en este preciso momento. Siento el calor subir a mis mejillas. Y aquí estoy, en un bar, sola, viendo a un chico guapísimo cantar.

Me paso los próximos veinte minutos así hasta que el chico termina de cantar. Yo suspiro y mi humor decae un poco al saber que no seguiré escuchando al muchacho.

Piensa Blair, piensa piensa piensa.

Me pongo de pié y camino lentamente hacia la parte de atrás del bar. Al llegar choco con alguien que sale rápidamente de un pasillo.

-Lo siento- dice el chico tomando mi hombro.

Sonrío cuando me doy cuenta de quién se trata.

-Buen show- le digo- lo he disfrutado muchísimo.

El chico que se encontraba anteriormente en el escenario se sonroja y eso provoca ternura en mi.

-Gracias, enserio- dice.

-Oye, por casualidad, ¿sabes porqué no ha venido Yungblud?- pregunto de manera casual.

El rasca su nuca.

-¿El chico que suele tocar aquí?- pregunta y yo asiento- oh, el dueño del local me ha dicho que ha tenido un accidente o algo y ha tenido que quedarse en casa, pero cuando se mejore volverá a tocar- dice y yo me preocupo después de escuchar la palabra "accidente".

-Okay, humm fue bueno escucharte..-

-Alec- dice.

-Alec- me encanta su nombre- un gusto, soy Blair.

Le extiendo mi mano y el la toma tímidamente.

-El gusto es mío Blair- dice.

-¿Estarás aquí mañana Alec?- pregunto.

-Si, ¿te veo aquí?.

-Claro- digo con una gran sonrisa.

Muevo mi mano en señal de despedida mientras me voy alejando y rio como tonta cuando salgo del lugar

***

Haley

Casi me tropiezo con mis propios pies cuando Yungblud me arrastra hacia el interior de su casa.

-Wow hum- se me quedan atrapadas las palabras en la boca.

-Te diré lo que me pasó- dice- ponte cómoda.

-Bien- digo a la vez que observo a mi alrededor.

Hay un sofá doble, una mesilla de centro y un par de muebles más. Decido sentarme junto a él en el sofá. Quedamos a una distancia cercana para poder conversar. Lo miro esperando a que comience a contarme y el suelta una risita luciendo adorable como siempre.

-Bueno- comienza- mis padres me han estado mintiendo gran parte de mi vida, esto puede parecer muy exagerado, no importa, mi madre está enferma de la cabeza y mi padre no tiene una familia paralela pero aún así nos ha abandonado, estoy enfadado, frustrado, y confuso, el día en que me enteré de todo salí de casa muy acelerado y me he estrellado con un poste.

El chico ríe cuando termina de contarme y yo lo observo con los ojos muy abiertos.

-Y eso te da risa porque...

-No lo se, las tragedias me causan risa.

Yo lo observo y después de unos segundos me río también.

-Mi madre actúa de forma extraña, como si fuese una desconocida y hace un par de semanas me he enterado de que mi padre ha...- me quedo callada al darme cuenta de que estoy hablando muy rápido- ha salido de la cárcel y yo... ni siquiera se porqué se fue todo a la mierda, pasó todo muy rápido en su momento.

ANARCHISTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora