43.- La coronación

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Al día siguiente Tysam y Xanis se levantaron muy temprano como había indicado Astalris y se dirigieron al patio de entrenamiento.

Al cabo de unos minutos Emiliana apareció con vestimentas más cómodas, un pantalón y un polo.

Sin embargo, estos permitían ver su delgada y fina figura con mayor detalle, esto hizo que Xanis volviera a sonrojarse.

-"¿En serio hermano? Ni siquiera es apretada."- pensó Tysam mientras suspiraba.

-"El joven maestro aún continúa durmiendo, mientras tanto me encargo entrenar con ustedes. Soy una maga con afinidad al agua, mi misión es intentar mojarlos y la vuestra esquivarla usando las técnicas básicas de pies y movimientos. El joven maestro no recompensará o castigará dependiendo de nuestro resultado."-, dijo noblemente.

Los jóvenes hicieron un esfuerzo por no maldecir.

-"La sabandija sigue durmiendo y manda a una belleza a hacer su trabajo.¿En qué clase de mundo vivimos."-, pensaron ambos tristemente.

La práctica comenzó pero el resultado fue predecibles.

Tysam se mojó ligeramente, pero aparte de eso esquivo muy bien o ataques.

En cambio Xanis estaba totalmente empapado, en primer lugar aún tenía mucha vergüenza de interactuar con Emilia por lo que sus movimientos se volvían torpes y descordinados. Y lo peor era que Emilia no había dudado en llevar a cabo la misión que Astalris le había dado, al detectar que Xanis actuaba pobremente hoy, en vez de darle un descanso o apoyo, atacó sin piedad incluso ignorando a Tysam, quien solo pudo suspirar y sentir lastima por la situación de su colega.

Pero luego de la práctica mientras se secaban y arreglaban el patio el esperado momento por los dos jóvenes había llegado.

Tenían la oportunidad de hablar con Emilia y extraer la información que cada uno buscaba.

-"Y señorita Emilia, ¿Cómo ingresaste a servir a la casa de los Ith'laris?"-, preguntó Tysam curiosamente.

Emilia pensó por un momento y respondió sinceramente, -"Era la vecina de la antigua casa de los Ith'laris, antes de que Miss Aeris y el señor Krenalis ascendieran en sus respectivas vocaciones. Voy a una academia de magia pero actualmente me estoy tomando unos meses sabáticos, fui invitada a enseñarle magia al joven maestro, pero finalmente ya no hubo que enseñarle y nuestros papeles se han invertido. No tengo el talento para ser aprendiz del joven maestro pero ser su doncella es un honor que jamás creo ser capaz de recibir, ademas con él aprendo muchas cosas."-

La respuesta dejó un poco consternados a los jóvenes, quien en un primer momento sospecharon que podía ser una broma.

-"Uh-es-este, ¿En verdad c-crees que es un honor servir a un niño?"-, preguntó tímidamente Xanis quien finalmente se había armado de valor para hablar.

Sabía que al ser la primera conversación formal si no lograba expresarse la posibilidad de una futura relación quedaría desechada, se conocía muy bien y sabía que si no hablaba en este momento en un futuro la vergüenza se acumularía y no lograría decir nada.

Pero lamentablemente su pregunta al parecer fue tomada como sarcástica por Emilia y quien lo miró fríamente y dijo, -"Aunque no lo creas, ni siquiera las emperatrices de grandes imperios podrían soñar con la oportunidad de servir al joven maestro."-

A Xanis pareciese que lo hubiesen apuñalado, la pregunta la hizo con un tono preocupado, pero al parecer fue mal entendido y ahora Emilia le era hostil.

En un momento como este el honor carecía de valor y la dignidad era lo primero que tirar. Rápidamente miró a Tysam en socorro.

El Emperador del Relámpago: Un nuevo comienzo (HIATUS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora