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Lemon 🌚










ZOE

Luego de la fiesta de ALIVE, Ji Yong volvió a llevarme a mi casa. Tenía miedo de que siguiera molesto como la última vez, sin embargo me siguió hasta el interior del apartamento y le pidió a Shin que lo recogiera al día siguiente. Eso por supuesto promedia sexo. Y me encantaba pues no tuve que esperar demasiado.

— Tengo sed — dijo mientras se dirigía a la cocina, en el camino se quitó el saco, lo dejó en el mueble, aflojó su corbata y caminó esquivando los muebles que dejaban poco espacio para el transito debido al tamaño pequeño de la sala. De pronto me sentí encantada de que Ji Yong conociera el camino a la cocina, sobre todo la confianza que se atribuía. Lo seguí y desde la puerta vi como sacaba un vaso de la estantería correcta y se servía un poco de agua que había sacado del refrigerador. La escena podría significar nada pero me alegraba que Ji Yong se sintiera en casa o tal vez estaba demasiado enamorada.

Me miró fijamente mientras bebía de su vaso, con esa mirada oscura que pone cada vez que esta excitado. Sin tocarme y a la distancia tan solo con el poder de su mirada había logrado acelerar mi respiración porque sabía lo que iba a venir una vez que el agua se acabara, no podía imaginar otra cosa que no sea a Ji Yong besándome todo el cuerpo, de hecho anhelaba que sucediera.

Por fin terminó el agua pero no se acercó, siguió mirándome, provocando más tensión y que mis bragas se mojen. Odie que se quedara allí simplemente, como si se estuviera burlando de mi necesidad, pero no le iba a dar el gusto de lanzarme sobre él. ¿Por qué sencillamente no me tomaba como siempre?

Lucho para quedarme quieta y esperarlo, me muerdo el labio, mi corazón comienza a acelerarse y trato de no mirar su boca, gracias al cielo mi tortura dura poco, hasta que empieza a caminar demasiado lento hacia mí, cuando estuvo cerca siguió mirándome con algo más que deseo en su mirada, parecía que había descubierto algo fascinante, entonces dudé de que su mente estuviera conmigo. No podía ser yo ese algo fascinante ¿O sí? Traigo maquillaje en el rostro, podría ser eso. Y mientras me debato en esa posibilidad, Ji Yong me toma fuerte de la cintura y me besa con pasión, echo la cabeza hacia atrás hasta que me golpeo con la pared. La humedad de su boca me descontrola, arrasa con toda mi razón, enredo mis brazos en su cuello y él se hunde mucho más en las profundidades de mi boca gimiendo con necesidad, de pronto empiezo a amar sus sonidos y mi excitación se vuelve dolorosa.

Hunde sus manos en mi trasero y continúa hasta levantarme anclando mis piernas en su cintura. Apoyo la espalda en la pared y en el momento en que nos separamos hunde el rostro en mi cuello e inhala mi aroma, su nariz toca mi oreja y susurra:

— Eres mía — me lo dice con tal determinación que, sin pensar en lo que eso pueda significar, respondo afirmando... y gimiendo.

— Siempre...

Me besa el hombro, me sujeta de las piernas para soportar mi peso y me lleva hasta mi habitación que, por supuesto, conoce bien. Me sujeto a él fuertemente mientras le beso el cuello. Una vez allí me desliza lentamente hasta que mis pies tocan el suelo, rápidamente me gira para deshacerse de mi vestido, lo ayudo arrastrando mi cabello hacia un lado de mi hombro mientras él trabaja en el cierre.

— Esto me recuerda la primera vez... — dice e inmediatamente deja que mi vestido se deslice por mi cuerpo, exactamente como la primera vez.

Sonrío porque haya recordado un momento tan especial para mí.

Me giro para mirarlo con mucha confianza, eso es lo único diferente, ahora puedo mostrarle mi cuerpo semidesnudo sin timidez, es más, me gusta que me mire, me gusta ver la excitación en sus ojos y la desesperación de su cuerpo.

Stay with me ¤ Ji Yong [Finalizada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora