Stay with me ¤ Ji Yong [Finalizada]

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ZOE

— ¡¿Qué?! — gritó Taeyang mientras me arrebataba la revista de las manos.

Apenas vi las imágenes corrí a la oficina de Ji Yong para quejarme como si fuera mi madre. Estaba tan desesperada e impotente que solo necesitaba su consuelo, sin embargo no fui concedida.
Ji Yong no movió ni un músculo de su rostro cuando le dije lo que me estaba pasando.

— Esto no puede ser... — Taeyang se levantó de su asiento y buscó su saco — Voy a averiguar qué rayos pasó...

— Seguramente Bonnie compró el diseño, esa es su forma de trabajar — comentó Ji Yong sin moverse de su asiento.

Los dos se miraron antes de que Taeyang saliera apresurado de la oficina.

— ¿Qué va a pasar ahora? — me acerqué al escritorio de Ji Yong, aún tenía la esperanza de recibir palabras de ánimo.

— ¿A qué te refieres? — me preguntó

— ¿Cómo que a qué te refieres? ¡Es mi diseño! ¿Cómo terminó la investigación?

— Zoe... pensé que te habías olvidado de eso.

— ¿Cómo crees? No puedo quedarme quieta cuando el trabajo de mis amigos y mío, pasa por mis narices bajo el nombre de una estafadora. ¿Puedo denunciarla?

— Por favor, Zoe. Ya deja el asunto de lado, puedes hacer muchos diseños, tienes a BLUEs para que trabajes en ella.

— ¡No! Tu no entiendes... Es como si ella me hubiera robado un pedazo de mi vida. Tiempo, talento, recuerdos y compañía... es algo que no voy a dejar pasar jamás. No puedo.

No pude dejar de sentirme decepcionada de Ji Yong. Yo ya no buscaba consuelo, solo quería que él por lo menos estuviera de mi lado, pero ni eso.
Después de mirarme fijamente, como cuando trabaja su mente, se levantó por fin de su asiento. No había cambiado su expresión, Taeyang por lo menos demostró sorpresa, pero él solo me miraba como si le costara hablarme.

Se acercó a mí y besó mi frente. — Tengo que salir un momento, te veo en la noche.

Tomó su saco del perchero y se fue sin mirarme. Suspiré fuertemente cuando cerró la puerta.
La oficina de Ji Yong era tan grande que estar sola allí era aún más desconsolador. Volví a mi oficina con la alegría de Daesung para tratar de calmarme hasta que regrese Ji Yong y tenga clara la forma de actuar de ahora en adelante, sin quitarme de la cabeza la idea de denunciar a la maldita.

Lo esperé en la empresa por muchas horas, incluso después de terminar de trabajar. Regresé a su oficina pero no estaba, todos los trabajadores ya se había ido y la zona ya comenzaba a tornarse aterradora.

Aún tengo la opción de esperarlo en su casa, pero no. Creo que por esta noche prefiero estar sola. Lo decidí mientras me dirigía al estacionamiento, cuando llegué me subí a mi auto y al momento de cerrar la puerta deje que mis hombros cayeran, no espere a llegar a casa para tomar un descanso, ese pequeño espacio en soledad era suficiente para liberarme de la entereza que me había esforzado en demostrar y para dejar de lado el pensamiento culpable por haber sido tan estúpida y dejar de interesarme por el diseño que a todas vistas era de nosotros.

Recosté mi cabeza sobre el respaldar del asiento y prácticamente me derrumbe. Dios… me sentía tan mal.
El tiempo había pasado demasiado rápido y no había hecho algo trascendente en mi carrera, más que perder el diseño, quizá, más importante de mi vida.

Cerré mis ojos combatiendo las terribles ganas de llorar. Las lágrimas nunca me sirvieron de desahogo y por eso procuraba evitarlo, excepto con cualquier asunto relacionado con Ji Yong porque los sentimientos que él me provoca superan ampliamente mi voluntad. Espera... Tal vez por eso me siento fatal... No es normal que Ji Yong reaccione con tanta calma. ¿Dónde estaba su temperamento aterrador? Ese que hace temblar el mundo. Él es el único que puede descubrir la verdad y hacer que deje de sentirme tan miserable... o no ser que... No me crea.