Capitulo 3

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Tocaban a mi puerta, yo estaba recostada en el sofá de la sala, ¿quién podría ser si son las 10:00 pm?

—¿Quieeeen? -pregunté desde el sofá.

—Nataliaa -contestó mi amiga.

¿Qué seria tan importante o tan urgente para que viniera a mi casa a estas horas? Ni siquiera recordaba que ella supiera donde vivía, me levante y fui a abrir.

—¿Qué ocurre? -pregunté viéndola.

—¿En serio eres tan exagerada? ¿Por qué tienes que hacer de un problema mínimo a uno gigante? -habló casi en un grito, estaba cruzada de brazos.

—Ok... pásate, siéntate y platicamos -hice una señal para que entrara y me hice a un lado —Toma asiento -dije señalando el sofá, haciendo que ella también se sentara.

—Katherine estaba muy molesta, realmente molesta -dijo tranquilizando un poco su tono de voz.

—Y... ¿eso a mi que? -pregunté con indiferencia, y en el momento recordé lo que le había dicho a Daniela.

—¿Neta te burlas? -se exalto nuevamente.

—En ningún momento me estoy burlando -me lamentaba haberle dicho a Daniela las cosas, sobre todo exagerándolas.

—A ver Yoselin,  la calificación te la ganas TÚ, no te puedes pasar la vida "ganándote" a los maestros, a veces eres tan irritante y tan cagante sintiéndote la gran cosa solo porque "te sabes ganar a los maestros" -dijo Natalia sonrojada por el coraje que tenia.

—¿Ella te lo dijo? -pregunté guardando la compostura, al final era mi amiga y no podría ponerme a discutir con ella.

—KATHERINE ME LO DIJO ¡MALDITA SEA! ¿SABES A LO QUE ESTO PUEDE LLEGAR? ¿LO SABES? NO MIERDA, NO LO SABES, PORQUE SIEMPRE ERES TAN EGOÍSTA Y EN ESTE PUTO MUNDO SOLO EXISTES TÚ, Y TU MALDITO DIPLOMA ¿YA TE DIJE QUE ERES CAGANTE? - pego en la mesa que tenia entre la sala, su voz sonaba irreconocible por el enfado que cargaba en cada palabra.

—A ver Natalia, en primera, no sé porque Katherine te dijo eso -y verdaderamente no lo entendia, ni siquiera sabia que Natalia y Katherine se hablaban —Y realmente no me interesa, si, ya me dijiste que soy cagante, no sé a donde quieres llegar, y tienes razon, tampoco sé a donde va a parar esta situación y ¿sabes qué? Tú eres una maldita hipócrita, y tu puta amiga de alguna forma tiene que aumentar mi calificación -dije con voz tranquila, aunque realmente quería pegarle

—Espero que vayas mañana, no sabes en que te metiste -dijo amenazante 

—Ahí estaré -abrí la puerta para que se fuera 

Se fue bufando y yo solo podía pensar en mis consecuencias... ¿Me mandaran a hablar mañana?Si, es bastante obvio que lo harán. ¿Cómo estará Katherine?¿Por qué lo sabe Natalia? Cabe mencionar que no pude dormir ni un poco... 

Estaba en la primer clase de Lectura casi durmiéndome 

—Maestro, ¿me permite a Yoselin Colin? -dijo la chica de servicios sociales, con la que me llevaba relativamente bien.

—Claro ¿Yoselin? -me habló la maestra indicando con la mano que podía salir.

Durante el camino hacia la dirección se me hizo eterno, me lamentaba el haberle dicho a Daniela lo que le dije ¿Por qué no hable con Katerin primero? ¡Joder! En serio lo lamentaba mucho.

—Pasa -dijo la chica abriendo la puerta de la dirección 

Entre y todo me temblaba, me encontré con Daniela y Katherine sentadas 

—Bue...Buenos días -dije tragando saliva

—Siéntate -dijo Daniela con tono muy fuerte y serio, yo me senté frente a ellas —le comenté a la profesora lo que me dijiste y quiso que hablaras con ella, frente a mi -se cruzo de brazos e hizo una señal para que la maestra hablara.

—¿Alguna vez me pediste hablar sobre tu calificación? -habló Katherine con tono neutral.

—No... Y tampoco pensé que esto fuera tan grave para hacerse un problema - comenté agachando la cabeza.

—Aún no se convierte en un problema- dijo Katherine —¿No te gusta tu calificación obtenida? ¿Por qué? -ahora su tono se había convertido en autoritario.

—No, no gusta, he puesto mucho de mi parte como para no obtener ni el 8 -hable intentando no sonar exigente.

—Para empezar, creo que nunca te has percatado que entre todos los maestros soy la más exigente ¿en algún momento leíste la rubrica de evaluación que di? -preguntó en tono molesto.

¿Habia dado una rubrica? Mierda, estoy perdida, totalmente acabada, la había cagado.

—No -contesté sería.

—Bien, te mostrare de que trata, porque puedo apostar que ni siquiera sabias que la había dado -exactamente profesora, comente en mi cabeza, y ella saco una una hoja de ese maletín nada femenino y me quise reír, no sé porque —Estoy evaluando de la siguiente manera; 20% tareas, 30% libreta, 20% examen, 10% comportamiento y 20% de participaciones, ahora dime -cruzo los brazos con la hoja en la mano —¿Tienes tu libreta completa?¿Tus tareas tienen buena nota? -no me dio tiempo de contestar, volteo a ver a Daniela —Ella no tiene los trabajos en clase porque se la pasa mirándome, su comportamiento no es del todo adecuado, las tareas las hace a como ella las entiende y obvio están mal, el examen, debo decir que esta mal por no poner atención y así podría seguir diciendo cada punto que hace que estés mal, sin embargo, NUNCA le he puesto una nota reprobatoria... -Katherine estaba enojada, su vena en la frente saltaba, no creía que ella se hubiera dado cuenta de que me la pasaba viéndola, no creía que fuera tan obvia.

—¿Qué tienes que decir a eso? -al parecer a Daniela le había sacado de órbita lo que Katherine habia dicho.

—Debo decir que lo lamento, que yo exagere un poco las cosas -mire a Daniela —Y también debo ofrecerle una disculpa a usted profesora, no sé que decir, estoy muy apenada -mire a Katherine con un sentimiento gigante de culpa que invadía mi cuerpo.

—No puedes seguir pensando que el león es de tu condición, ni seguir creyendo que puedes de todas, todas, ni pensar que a todos los profesores te los puedes ganar, te acepto la disculpa y gracias por aclarar todo esto frente a la directora- Katherine tenia un tono indignante y es muy comprensible.

—Si... lo sé -dije bajando la cabeza

—Yoselin, te pido que regreses a tu clase, y que de verdad te empieces a esforzar, yo sé que la profesora te puede ayudar -sonrió Daniela viendo a Katherine.

—Por supuesto -asintió con la cabeza Katherine.

—Gracias a las 2, y nuevamente, perdón -dije levantándome de la silla y salí de la oficina, me sentía mal, culpable... creo que no debí de tomarlo como algo tan grave.  

Prohibido enamorarseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora