Sola

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Abriendo cada ves mas sus ojos se topo con la luz de la ventana que ya era costumbre chocar con ella.

Se sento en la cama y miro a los lados..... No estaba en su cuarto.

Recordo ir a la casa de Jughead a curarlo.

Estar en el sillón y quedarse dormida.

Mierda.

Que lindo que no la dejó dormir en el sofa y le dejó su cama. Es todo un caballero sin duda

Dejo sus pensamientos de lado y se levanto colocando sus zapatos. Abrió con cuidado la puerta.

Estaba el parado de espaldas haciendo el desayuno.

Nerviosa camino y se paro alado de él.

Jughead volteo con un vaso pero se asusto al ver a la rubia y lo dejó caer por accidente.

—Oh no —dijo agachandose a recojer.

—Juggie se que soy fea pero no es para tanto —soltó entre risas repitiendo la acción del castaño.

—No.... Es eso... Solo me asustaste— negó con la cabeza con un color carmesí en sus cachetes.

—Si..... Muchas Gracias por dejarme en la cama y poderme quedar —dijo colorada—solo que no me di cuenta yo este estaba muy cans—no termino por la interrupción del castaño.

—Oye esta bien, si, no agradezcas — interrumpió poniéndose de pie y dedicándole una sonrisa —buenos días—medio susurro pasando por su lado para dirigirse a la mesa.

—Buenos días —susurro mordiendose el labio.

—Quieres desayunar.

—Claro —dijo girandose en sus talones para verlo —Betty abrió sus ojos —La Escuela!—Grito recordando.

—Betts es temprano — dijo mirando su reloj — olvidalo comemos en la escuela, vamonos.

Jughead tomó sus cosas y se fueron a pasar a la casa de Betty a recoger sus cosas.

—Bueno Jug.... Mi mamá no esta siempre en buenas condiciones y lo siento si esta muy...... Ya sabes.... Ebria y así —soltó Betty apenada, parda frente a la Puerta.

—Betts yo no te juzgare — dijo Jughead con voz tierna y mirándola fijamente.

Sin más Betty abrio la puerta para el interior de la casa, de la cual este salió un olor penetrante a alcohol.

Betty subío las escaleras para alistarse rápido.

Jughead entró y quedó alado de la puerta esperando, visualizado una señora rubia en el sillón dormida.

Alice se removió y abrió lentamente sus ojos.

Sin más se sentó y vio al muchacho parado.

—¿Y tu quien eres niñito? —soltó Alice con lo ojos medios cerrados viéndolo de arriba abajo.

—Señora Cooper, buenos dias, soy amigo de su hija —dijo Jug incomodo por la mirada de la señora puesto en el.

Pues Jughead llegaba a se un chico muy nervioso.

—Claro tenías que ser amigo de mi hija la inútil aggg — rodó los ojos molesta poniendose se de pie para ir a la cocina.

—Señora su hija.... No es — pero este no termino de hablar porque Betty lo interrumpió.

—Jug nos vamos—hablo Betty bajando las escaleras.

-Cla- Claro vamos —tartamudeo al ver a la linda rubia.

Solo Dejate QuererDonde viven las historias. Descúbrelo ahora