01 x 02 : Lazos

395 17 2
                                    

Int

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Int. Hostal Viento Sur. Habitación Beatriz. Madrugada.

Beatriz, dormida, comienza a moverse, provocando que sus ojos comiencen a entreabrirse con lentitud. Recuperando la claridad, ve a dos seres alienígenas al costado de su cama. Impactándose en un segundo. Asustada. Sin poder gritar, completamente paralizada, los observa impotente. Aparece un tercero, desde la puerta de la pieza, cargando un pequeño bebé en sus brazos que se ríe con inocencia.

Es tu hijo – siente una voz metálica, dentro de su cabeza.

Beatriz comienza a sollozar, angustiada. Imágenes de ella, embarazada, tocándose el vientre, decorando una pequeña pieza con móviles y juguetes, viendo unos pequeños zapatitos de lana color celeste, feliz por el hijo que lleva en su interior, comienzan a repetirse hasta que logran despertarla abruptamente.

Se sienta en la cama, con la angustia en su pecho, viendo que la claridad de la mañana ilumina su pieza. Comprendiendo que todo era una pesadilla. Bastan unos minutos, para que su puerta se abra y entre Celeste, con lentitud, tratando de que no se apague la vela que está sobre un pequeño pastel.

_ ¡Feliz Cumpleaños! – sonríe Celeste, avanzando hasta ella, sorprendiendo por completo a Beatriz, quien lo había olvidado – Menos mal que estás despierta – dice llegando a su lado – Tienes que pedir un deseo.

La cumpleañera cierra los ojos, llegando a su mente una fugaz imagen del bebé de su sueño. No era la primera vez que lo soñaba. Desde que había perdido a su hijo, múltiples sueños similares se le repetían de vez en cuando. Sopla la vela y Celeste deja el pastel encima del velador, para abrazarla y felicitarla.

_ Espero sea un día muy lindo – desea Celeste, sincera – Te quiero mucho.

_ Gracias Celeste, yo también – agradece, aún con algunos recuerdos.



Int. Hostal Viento Sur. Habitación Vedran. Mañana.

El joven se mantiene de pie frente a la ventana de su pieza. Observa la tranquilidad del pueblo y sonríe, encantado con las montañas que tiene en frente. Vedran, apenas había despertado hace unas horas, había tomado una decisión: Contarle toda la verdad a Beatriz sobre aquel hijo y decirle finalmente que era su madre.

Necesitaba abrazarla y decirle que había llegado para protegerla.

Int. Hostal Viento Sur. Cocina. Mañana.

Celeste termina de preparar los desayunos para la gente que se hospeda en el lugar. Le ha dicho a Beatriz que siga descansando mientras ella se encarga de la Hostal. Llevando de a dos bandejas, dirige sus pasos hacia el comedor, encontrando a Vedran, el cual ya se ha levantado y se mantiene quieto frente a la ventana. Ella sonríe, para luego comenzar a hablar.

GrisesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora