-¿Y con quien iras al baile de despedida antes del receso de invierno?- pregunto la castaña, cuando tomaron la curva que les permitia ver el colegio a la distancia.
-Ya te dije que ire sola, y si fuera por mi, directamente no iria- respondio en tono cansado.
-Te invitaron como veinte chicos, Tamara... ¡no puede no interesarte ninguno!- exclamo exasperada.
-Creeme que pueden no interesarme, por algo dije que no- respondio.
-Tu no eras asi antes- dijo Sofia frunciendo el ceño.
Tamara esbozo una pequeña sonrisita;- Antes no habia descubierto el maravilloso mundo de los libros.
Siguieron caminando en silencio hasta llegar a la puerta, donde se encontraron a Santiago, mejor amigo de ambas desde el jardin de infantes.
-Tami, Sofi- saludo con una sonrisa.
-Santi- le devolvieron el saludo al mismo tiempo.
-¿Que paso con Leila?- pregunto Tamara mientras subian las escaleras hacia la puerta de entrada- ¿Te respondio al final?
-Oh, si- dijo Santiago- Acepto que vayamos juntos a la despedida... mientras yo consiga que Fede salga con Mayra.
Sofia hizo una mueca;- La tienes perdida, Fede esta detras de Tamara desde que tenemos cinco años. No saldra con Mayra.
El chico hizo una mueca;- Vale la pena intentar.
Cuando abrieron la puerta, quedaron boquiabiertos. Unas veinte lechuzas estaban causando alborotos en el patio del colegio; la directora, el hombre de mantenimiento y varias maestras las perseguian de aca para alla, mientras estas quitaban carpetas a los alumnos que corrian hacia las aulas o simplemente manchaban de excremento su uniforme.
Una de las maestras de los chicos de primero se les acerco, y les dijo que debian ir a su aula correspondiente. Al parecer las lechuzas no eran una molestia de grado menor para las autoridades del colegio, ya que aun faltaban cinco minutos para que tocara el timbre.
Los chicos volvieron su vista hacia el patio y tragaron duro; su aula se encontraba en el segundo piso, y para llegar a las escaleras habia que atravesar el campo minado de lechuzas. Intercambiaron miradas.
-¿Corremos?- pregunto Tamara.
-No veo mejor opcion- comento Santiago.
-Corremos- respondio Sofia.
***
-¡Eso fue genial!- exclamo Tamara con una sonrisa, cuando al fin estuvieron a salvo subiendo las escaleras.
-Eso lo dices porque a ti no te quitaron tus apuntes de ciencias- bufo Sofia.
Santiago las miro con el ceño fruncido;- ¿Por que ninguna tiene mierda de pajaro en la cabeza?
Voltearon hacia el chico, y tuvieron que morderse la lengua para no reir; estaba integramente cubierto de excremento, con el cabello alborotado y algunas plumas reposando en el.
-Tu tampoco tienes precisamente en la cabeza- comento Sofia.
-Nop- aseguro Tamara- Eres una mierda andante. Deberias ir al baño y tratar de arreglar eso.
***
Estaban ambas sentadas juntas en el ultimo banco de la primera fila, como siempre. Y el pelinegro de cabellos negros tenia que ir a molestarlas, como siempre.
-Tam, ¿podemos hablar?- pregunto.
-No se de que quieres hablar conmigo- respondio la rubia.
-¿Que fue lo que hice ahora, Tamara?- pregunto exasperado- ¿Quieres explicarme?
-Naciste, Martin- respondio ella en tono cansado.
-Oh, que dulce- ironizo el chico- En verdad quiero saberlo.
-¿Para que? ¿Para prometer que cambiaras y luego romper las promesas como siempre? No, gracias- se nego ella.
El chico solto un suspiro cansado;- No te libraras de mi asi de facil, Lancaster.
-Eso vamos a verlo- respondio ella con superioridad.
En eso, entro la profesora Clementi al salon, cubierta de excremento y con plumas por todos lados. La mueca de horror que traia la mujer casi hace reir a la mayoria, pero ninguno tenia ganas de obtener una notificacion el dia anterior al receso de invierno.
-Lancaster, Lima, Molina y Lopez- dijo- Hay tres de esos bichos con cartas que tienen sus nombres afuera del salon.
Tamara salto de su asiento;- ¿Se refiere a las lechuzas, profesora?
-Si, esos bichos- respondio la mujer.
Tamara miro a Sofia y salio corriendo, llego antes que todos los demas ante los tres ejemplares; una enorme lechuza marron, una pequeña lechucita blanca, y una de tamaño intermedio color negra. Su corazon dio un vuelco al notar los escudos en las cartas.
La lechuza negra se acerco a ella y dejo caer una de las dos cartas que traia en su pico a sus pies.El escudo de Hogwarts.
Definitivamente explotaria de felicidad en cualquier momento.
Tomo la carta con dedos temblorosos al tiempo que los demas salian de adentro del salon. Los tres chicos miraban a las lechuzas estupefactos, mientras Tamara abria la carta con los nervios a flor de piel.
Querida Srta. Lancaster:
Tenemos el placer de informarle de que dispone de una plaza en el colegio Hogwarts de Magia y Hechicería. Por favor, observe la lista del equipo y los libros necesarios. Las clases comienzan el 1 de septiembre. Esperamos su lechuza antes del 31 de julio.
Hoy mismo iré yo personalmente a su casa para hablar con su madre, con quien usted vive según tengo entendido, y para darle las instrucciones sobre como deberá comprar su material escolar. Ademas, habrá notado que su carta llega un año tarde y eso merece una explicación apropiada.
Muy cordialmente,
Minerva McGonagall
Directora.Cerro los ojos y deseo que no fuera una broma, luego volteo a ver a sus compañeros, quienes ya estaban leyendo sus cartas y tenían la misma expresión de desconcierto en sus rostros. Sofia miro a Tamara.
-Dime que esto es una mala broma- dijo seriamente.
Tamara negó y se encogió de hombros;- No lo se... deberíamos esperar, se supone que McGonagall vendrá a mi casa esta tarde.
La castaña asintió, luego frunció el ceño y miro a Martin y a Paloma;- ¿Y ellos?
-Durmstrang y Beauxbatons, supongo- respondió con un suspiro- Otros colegios de magia; uno en el norte y otro en Francia.
-Si- confirmo Martin- Aquí dice que fui aceptado en el Instituto Durmstrang para jovenes Magos.
-Y aqui dice en la Academia Beauxbatons para jovenes Brujas- dijo Paloma- ¿Y ustedes?
-Colegio Hogwarts de Magia y Hechiceria- respondio Tamara.
***
El dia de clases siguio normal... bueno, normal sin contar los incidentes que las lechuzas causaron por todo el colegio y que Tamara no estaba prestando atencion en clases; cosa sumamente rara.
Al final del dia, todos se despidieron prometiendo verse en la fiesta al dia siguiente y se dirigieron a sus casas. Sofia y Tamara fueron juntas a casa de esta ultima; las dos querian confirmar si lo que las cartas decian era cierto.
ESTÁS LEYENDO
Las Mellizas Nott [EN EDICION]
FanfictionTamara era una potterhead irremediable, que vivia con su madre y sus dos hermanos mellizos. La chica tenia vagos recuerdos de su padre, pero solo lograba recordar con nitidez la mirada de este. Al finalizar su ultimo año de primaria en una escuela p...