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No había nada más aburrido que las fiestas en el palacio. La niña estaba sentada en una de las mesas, junto a Thor y sus amigos, que no paraban de reír a gritos y comer de manera no muy educada.

Agni no se sentía bien al rededor de los amigos de Thor, por que ellos no trataban de una manera amable a Loki. Y el Principe era lo que ella consideraba un mejor amigo.

El era muy amable con ella, aunque sabia que si algo salía mal podría hacerle daño.

Sintio una mano en su hombro y la chica sonrió al ver a Loki, que tendía su otra mano hacia ella.

— ¿Me permite esta pieza?.— La niña sonrió sonrojada, ante la atenta mirada de los niños de la mesa tomo la mano del príncipe.

— Si piso tu pie es tu culpa por haberme invitado a bailar.— El chico río mientras colocaba una mano en la espalda de la chica.

Comenzaron a moverse al ritmo de la música, bailaron sin importar las miradas de los demás, la chica reía y el principe también.

Desde que Agni había escuchado al Rey hablar así de ella, una semana atrás, había estado un poco distante. No quería que regañar al príncipe por estar cerca de ella.

Los dos niños cansados se acercaron a su mesa, donde las miradas volvieron a posarse en ellos, los miraban como si no pertenecieran allí, como si fueran algo que estaba mal.

Agni rodo los ojos y tomo un vaso de agua.

— ¿Crees que tu padre se de cuenta si nos escapamos?.— La niña sonrió al chico.

El le devolvió la sonrisa traviesa, y de la mano salieron corriendo del gran salón de fiestas.

Las carcajadas se escuchaban por los pasillo, y también las pisadas de como ellos corrían a gran velocidad, con sus manos juntas.

Pararon frente a la Gran biblioteca y entraron, ya era costumbre para ellos.

Leer era una pasión que ambos compartían. Y amaban eso.

Amaban sentarse uno frente a otro y leer hasta que sus ojos duelan.

Lume ▪︎ Loki Laufeyson Donde viven las historias. Descúbrelo ahora