La Guerra De Las Sombras

Elena

"todo monstruo en la historia comenzó siendo un inocente bebé, por lo que todo bebé tiene la capacidad de ser un monstruo"

Nava, María, Stefen, el pequeño Gustav, Flor, Florish y Urth se reunieron en un pequeño espacio de las praderas, hacia meses que el ataque de los despiertos había arrasado con la grandeza del Este y traído un cierto equilibrio en la riqueza de ambas naciones, shagini miraba la escena vigilante mientras la familia completa comía los platillos que habían traído, Nava y Flor les habían pedido a sus familiares que ese día hubiera paz pero pareciera que no se podían contener, el plan había funcionado de maravilla, la familia de Nava odiaba a la de Flor y viceversa, pero ese día dejaron de lado sus diferencias para celebrar el nacimiento de Elena, la nieta de Flor, la elegida por la profecía

Shagini miraba al bebé con odio
-esta vez te mataré-
El ambiente parecía muy tenso por lo que Flor intento conversar con su hermano
-dime Nava ¿Cómo lidiar con los intentos de asesinato?-
-¿Intentos de asesinato?-
Pregunto Nava confuso
-ya sabes, los que tenemos el poder siempre correremos un gran riesgo de ser asesinados, por ejemplo, ayer tuve que lidiar con el intento número 342 de esta decada-
Nava abrazo a su hermana
-¿Porque no me lo dijiste? Yo nunca he tenido un solo intento de asesinato, déjame ayudarte hermana-
-no soy como tú, no sé hacer que mi pueblo me quiera-
-solo demuéstrale que lo quieres-
María pareció molestarse con su esposo
-mehor dile que asesine a su madre, a ver qué tal-
-Maria, por favor, lo prometiste-
Stefen se levantó del pasto alterado
-¿¡Cómo quieres que contamos que está bien!? ¡Son asesinos papá!-
-¡Detente hijo!-
Nava trato de calmarlos pero en eso alto Florish
-¡Por lo menos nosotros si llegamos a general, soldadito!-
Stefen desenvaino su espada y la apuntó contra la princesa, en ese instante Urth hizo lo mismo
Cuentos de raíces salieron del suelo y sentaron a todos los presentes, Nava alzó la voz
-¡He dicho que se acabó!-
Durante el resto de la comida masticaron en silencio, al acabar Flor hizo un anuncio
-quiero decir que Urth me sorprendió el otro día con un impactante descubrimiento, muestrales querido-
Urth tomo un pequeño cofre, malhumorado, y lo habrío para que todos pudieran ver su contenido, tenía un viejo trozo de tela rasgado
-se trata de un pedazo de tela de Berek ¡Esta vivo, esto lo prueba!-
Nava puso su mano en el hombro de su hermana
-Flor, fuiste la única que lo vio, llevas meses buscándolo, déjalo ir-
Flor tomo el trozo de tela y lo sacudió en el rostro de Nava
-¡Puedo sentirlo! ¡Sigue allá afuera!-
-Flor...-
Urth actuó rápido para salvar la situación
-dime Nava ¿Cual es la sitúacion de los despiertos?-
Nava agradeció en voz baja la interrupción, ya que así no tendría que sacar a su hermana de su Ilusión
-pues, bastante bien diría yo, aún quedan algunos que prefieren seguir la voluntad de la naturaleza pero se han mudado al Norte del Bosque, no creo que volvamos a tener problemas-
La comida siguió con bastantes momentos incómodos hasta que cada uno se fue a su nación sin intención de repetirlo, Nava y Flor se quedaron atrás para hablar
-eso lo demuestra, el plan funciono-
-la primera parte del plan hermano-
Las dos familias no volvieron a reunirse.

Elena creció como una princesa durante los primeros años de su vida, conforme entraba en la adolescencia se empezó a dar cuenta de que su padre empezaba a cambiar su actitud frente a ella, se mostraba bastante cariñoso, tal vez demasiado y a la joven Elena esto no le hacía demasiada gracia, en el palacio tenía todo lo que deseaba pero tanto su madre como su abuela parecían odiarla, en especial la segunda, que rara vez le dirigía la palabra
Elena comenzó a odiar a sus parientes de la misma forma en la que sentía que ellos la odiaban a ella y aunque no tenía ningún problema aparente, pues podía tener todo cuanto deseara con solo pedirlo, decidió que estaba harta de su vida como prisionera de su propia realidad, que cruzaría el bosque y encontraría al hombre que su madre tanto odiaba, si, eso la enfadaría mucho, de cierta manera era una forma de llamar la atención, de rebelarse, Elena se había convertido en la clase de persona que tiene todo excepto lo que desea, lo que necesita, amor, se había convertido en la clase de persona que Flor quería.

Elena, Nava, todo el mundo había Sido manipulado por la mano controladora de Flor, la mano del destino que se les había otorgado, la mano de una diosa que no soporta el desorden o la perdida

La reina miró a través de su ventana, vio a su nieta escapar de casa, tomo un trago de una botella y susurró
-empieza el juego-

El anciano Nava reunió a sus dos hijos para hablar, acababa de recibir la carta de Flor que indicaba la siguiente parte de plan; hacer que Gustav y Elena se enamorarán, ese era el motivo de la reunión
-hijos míos, tengo una importante misión para cada uno, para ti Stefen, te daré una misión muy importante, viaja a las tierras de los hombres roca, con ellos deberás construir un castillo como ninguno a un lado de las ruinas de los Rokarfer, sé que a tu madre le hará ilusión visitar ese lugar, pero hazlo bien, lo suficientemente fuerte como para resistir una guerra-
Stefen comenzó a irse de la sala de trono pero un pensamiento surco su cabeza de Guerrero
-¿Que clase de guerra?-
-la peor-
Stefen se retiró apresurado dejando al anciano rey y a su otro hijo
-tu tendrás una misión más importante; ve todos los días al bosque, específicamente a la colina que en este se encuentra hasta que te topes con una hermosa joven, sin preguntar su procedencia deberás casarte con ella y traerla a Kima, entonces serás mi heredero-
Gustav salió del palacio de lo más emocionado, su padre por fin le había asignado algo importante y la recompensa le parecía maravillosa, una chica y el trono, todo lo que el podía desear...

Stefen tomo su espada, forgada por los mejores herreros de Kima y se encaminó hacia el norte, para cuando anocheció ya había llegado allí
-¡Hombres de roca! ¿Alguien me escucha?- gritaba sin cesar
Finalmente de las viviendas decoradas con gemas de diversos colores salieron sus propietarios
-ya es de noche ¿Qué demonios quieres que vas a gritar tanto por ello?-
Stefen les explico su situación y que necesitaba ayuda para lograrlo, hay que reconocer que a los hombres de roca no les entusiasmo mucho la misión que Nava el asesino le había dado a su hijo, pero sin el rey de Kima nunca hubieran tenido tales viviendas, y también fue el primero que los trato como iguales
-aceptamos, sería bueno tener un castillo al lado, por si acaso-
Stefen y Los hombres de roca, junto con veinte maestros de la tierra que habían venido a ayudar, comenzaron las preparaciones para construir un fuerte castillo, un lugar como ningún otro, Arce Nix, el castillo de nieve fue el nombre que le dieron
Levantaron fuertes muros y grandes torres, hicieron un gran comedor, habitaciones para todos los usos y necesidades, Stefen tenía talento para eso, de cierta manera pareciera que había nacido para aquella tarea, Stefen había encontrado una vocación que en verdad le gustaba, comandaba alegremente donde tenía que estar cada cosa, no era como el fuerte que había construido shagini aquella vez, esto era complejo, planeado y a Stefen le encantaba lo que hacía sin darse cuenta despertó su talento oculto, los ladrillos se movían solos, las paredes surgían como por arte de magia, Stefen era maestro de la tierra.