La Guerra De Las Sombras

Stefen en duelo

"perder a un ser querido es algo triste y doloroso, todos pasamos por la sensación en algún momento pero no hay que dejar que nos detenga de seguir viviendo."

Stefen aún no podía creer la muerte de su madre, había tantos recuerdos que ahora eran dolorosos y tantas cosas que le hubiera querido decir antes de que se fuera
Para el, su madre había Sido la única que lo comprendía, que lo entendía, y ahora había perdido esa importante parte de el.
-podria haber hecho algo, ser un mejor hijo o... ¡No sé! ¡No debería haberme quedado quieto sin hacer nada!-
Shagini emergió desde las sombras de la habitación
-no hay nada que pudieras hacer, tu madre estaba orgullosa de ti-
-vete shagini, no quiero tu compañía-
Shagini no se fue, al contrario, se acercó al chico
-eso no es cierto, no debes de sufrir solo, no como yo-
-¿Tu también perdiste a alguien?-
Shagini asintió entristecido
-perdi a todos mis hermanos y a mi padre en el mismo día, nunca volveré a verlos, me aisle del mundo hasta que tú padre me encontró-
-¿Tienes hermanos?-
El demonio sacó su asquerosa mano blanca de la túnica negra y extendió 7 de sus 8 dedos
-tenia 7 hermanos, los perdí a todos, deje que eso me rompiera, que me dejara hecho trizas-
-¿Y que cambio?-
-tu padre, vio a través del monstruo, tocó mi corazón y me hizo sentir completo de nuevo, nunca podré agradecerle lo suficiente-

Los ojos de Stefen brillaron
-wow ¡no sabía que pensabas asi de mi padre!-
-se que suena maravilloso, pero en el interior me siento extremadamente solo, no creo que nadie comprenda realmente como me siento porque ser un demonio, no, ser EL demonio; es muy dificil-
Stefen le dió un par de palmadas en la espalda a Shagini
-creo que has demostrado tener más humanidad de lo que nadie hubiera pensado, después de todo, no somos tan diferentes-
-gracias, príncipe-
Bixie se subió en el regazo del príncipe y se quedó dormido
-no puedo creer que esa cosa siga viva-
dijo shagini con desprecio
-siempre está molestando-

Flor y Florish dieron un paseo por los jardines del gran palacio del Este
-hija mía, hay grandes cambios por venir, se avecina una tormenta y necesito que seas fuerte-
Florish miró a su madre extrañada por el repentino comentario
-Lo haré madre, aunque no entiendo a qué te refieres-
-el último y mayor poder que poseemos nosotras, maestras de la mente, es el de leer el futuro, un poder que solo se manifiesta en raras ocasiones, hace años que hice una profecía, en esta todo lo que conocemos es destruido y la tierra se tiñe con sangre, se acerca el momento, debes ser fuerte-
-¡Lo seré madre!-
Flor abrazo a su hija y le regaló una sonrisa
-sin importar que pase, lucharemos juntas contra esto-
Flor se sentó junto a un rosal y puso una gota de rocío en su mano, la gota dió vueltas de manera jugueton
-mira con atención hija mía, en el mundo fluye energía, lo puedes ver en todos lados, puede ser buena o mala, bella o fea, pero eso es lo bonito de la vida-
Florish se quedó mirando la gotita y entendió lo que su madre quiso decir
-pero, debes tener un propósito, algo que te haga destacar, no puedes segiir siendo una imitación de mi, busca tu propia vida, se feliz, vete antes de que llegue la tormenta-
-¡No! ¡Me quedaré contigo madre! Sin importar lo que nos arroje el futuro debemos permanecer unidas-
Flor sonrió
-te pareces mucho a tu padre-

Berek recorrió el bosque de punta a punta advirtiendo a los trolles de lo que vendría, como shagini le había ordenado, luego se dirigió con su maestro y le pregunto porque solo tenía que avisar a trolles y hombres roca, porque no a los despiertos
-Lo siento por ellos, pero si queremos tener una oportunidad, necesitamos a los despiertos en el bosque, creeme, algún día me lo agradeceras-
Berek asintió y trato de irse pero shagini lo detuvo
-siempre fuiste mi favorito Berek, de entre todos los mortales, lo que tú y Flor comparten es único, quiero que sepas que vuestra historia será contada por milenios, te llamarán de muchas maneras; Berek, Ask o Adan siempre con tu amada Flor, Embla o Eva, pero sin importar el nombre yo siempre acompañaré tu historia-
Berek abrazo al demonio
-gracias-

Nava meditaba en su trono tranquilo, la muerte de su esposa lo había dejado devastado pero tenía cosas más importantes en mente, sacó su espada de madera y la miró con orgullo
-es probable que nunca te use como espada, pero siempre serás un gran recordatorio-
Keith lo miraba extrañado
-¿De qué sirve si no la vas a usar?-
-mi querido amigo, hay tanto que aún desconoces, está espada no es un arma, es un regalo, es un recordatorio de que soy importante, viví tanto tiempo tratando de ser para el mundo lo que mi hermano fue para mí que no me di cuenta, me he vuelto mucho más, mira a Kima, mira a sus alegres ciudadanos, observa a los despiertos cuidar el bosque en mi honor o a los hombres roca que por fin me otorgaron su perdón, yo me he vuelto mucho más que un hombre, me volví un ejemplo de paz y soy el padre de los despiertos...
Pero me sigo sintiendo pequeño, me siento como un fraude, antes hablaba con María de esto y ella me hacía sentir mejor, perderla está siendo muy duro, aunque debo seguir adelante-
Keith se quedo estupefacto por la reflexión, su rey tenía razón, en todos los años que había gobernado nunca hubo ni una sola persona que hablara mal de el, incluso pareciera que durante la guerra en enemigo lo respetaba, creer que alguien así tuviera un idolo tan poco importante como su hermano y que sufriera en su interior como alguien normal se sentía extraño
-todos tenemos sueños, esperanzas, ilusiones, yo creo que es mejor disfrutar lo que tenemos ¿Que cree usted señor?-
Nava sonrió
-opino lo mismo que tú, y juro por mi nombre que está espada no cobrará una sola vida pues fue hecha con respeto, no con odio-

Elena escucho las palabras de su tío abuelo, para ella eran meras estupideces, le faltaba madurar, se fue con Gustav para pasar la noche con el, al fin y al cabo ya se había celebrado la boda, podía estar tanto tiempo como quisiera con el
Pero shagini la detuvo;
-hay algo que debes saber, Florish no es hija de Berek el guerrero, es hija del Kervadir, Elena eres el producto del incesto de dos medio hermanos y tienes problemas mentales, sé que esto te parecerá algo difícil de asimilar, pero desde que naciste fuiste un cáncer en este mundo y yo me encargaré de destruirte-

Nava miró a Keith preocupado
Había demasiadas cosas cruzando su mente, de hecho, estar meditando acerca de la situación actual, lejos de calmarlo lo puso muy nervioso
-necesito que me hagas un favor-
-Lo que sea viejo amigo-
Nava le entrego a Keith una espada nueva, hecha apenas unos días antes
-vigila a Gustav, si alguna vez notas un brillo púrpura en sus ojos, mata a Elena-
Nava se marchó de la habitación con un paso lento pero seguro, mientras, un brillo violeta adorno los ojos de Keith
-lo que usted diga magestad-

Shagini interceptó a Nava en los pasillos y lo abrazo
-¿A qué viene esto amigo mío?-
El demonio parecía a punto de llorar
-¡Tienes que matarla! ¡Mátala, no podrás evitar la profecía!-
Nava tocó su hombro con delicadeza
-no sé porqué de repente estás así, pero debes saber que nadie es realmente malvado, solo necesita un empujón en la dirección correcta-
-¡No no no! ¡No puedo perderte! Nava, tienes un corazón de oro, no existe criatura alguna a la que no puedas amar ¡Demonios! ¡Incluso le dabas trozos de pan a las hormigas por lastima!-
-aun lo hago, tienen una vida difícil-
-¡Pero debes dejar de ser así! ¡Por favor! ¡Antes de que ella te mate!-
Nava miró al demonio a los ojos, bueno, a los huecos en su máscara
-no me va a pasar nada, ella no tiene motivo para odiarme, no te preocupes, todo va a estar bien-

Keith se sentó junto a Stefen en uno de los cinco balcones y miró hacia la estatua de Sava
-¿Cómo te sientes?-
-estoy cansado de que la gente me pregunte siempre lo mismo, quiero estar solo-
Stefen apartó la mirada
-que sabrás tú de dolor de todas formas, siempre fuiste el general favorito de mi padre-
Aquellas palabras dañaron el corazón de Keith, el sabía que eso no era cierto pero por algún motivo se negaba a replicar, shagini intervino en la conversación
-¿Cómo te atreves? ¡Keith ha sufrido más que todos nosotros! ¡En cambio tu; buuua buua perdí a mi mami! ¿Tienes idea de lo que él ha pasado para llegar a donde está?-
-shagini por favor, no necesito que me defiendas-
-¡No! ¡No tienes idea porque eres solo un príncipe mimado! El debería reinar el Este pero su padre lo abandonó, creció en las calles ¡Demonios! ¡Tiene una cicatriz en cada ojo! ¿No es suficiente para probar que el, más que nadie ha ganado lo que tiene por su propio esfuerzo?-
-¡Yo no pedí ser príncipe!-
Stefen tenía lágrimas en los ojos
-¿Crees que a mí me gusta que la gente me vea y piense "ahí va el principito" ¡Maldita sea! ¡Ni siquiera quiero gobernar Kima! ¡Yo sería mucho más feliz siendo un humilde arquitecto!-
Shagini admiro la revelación del joven, por fortuna Keith logro calmar a ambos
-relajense, ¿Que más nos podría pasar?-