Despertar del ejército de muertos

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"la envidia y la traición pueden ser sentimientos muy peligrosos en tiempos difíciles"

Largos chorros de sangre descendían como cascadas manchando el trono de mármol blanco con su rojo manto, Nava casi no podía hablar, sentía el cálido líquido en sus pulmones


-hijo mío...
¿Porque lo hiciste?-


El príncipe no contesto, retiró el cuchillo, lo había clavado tan fuertemente que incluso quebró el trono de mármol, y se fue, dejando a su padre en el suelo agonizando. shagini estaba atrapado con cadenas hechas de hierro de valor, veía a su amor morir y no podía hacer nada, Bixie olisqueo con tristeza la cabeza del rey
Nubes de tormenta cubrieron Kima, Nava pronunció sus últimas palabras dirigidas hacia shagini


-siempre hay esperanza-


El demonio ardío de ira y comenzó a conjurar a todo pulmón


osro ad ne a ad rompe sa adenas, sembra e door ed a despedda!-


Tal fue el enojo que rompió las cadenas de valor, lo único que supuestamente no podía romper ahora eran trocitos humeantes desparramados por la habitación, el demonio tomo a Nava en sus brazos


-no me dejes Nava, no sé que haré si ti-


Lo abrazo con fuerza


-por favor no me dejes-


El demonio lloro, sus lágrimas ácidas empezaron a matar a toda la vegetación de Kima


-Nava, no te vayas, te lo suplico, eres lo único bueno de este mundo miserable-

Shagini sostuvo el cuerpo en sus brazos, sus gritos de dolor hicieron temblar las paredes, el principe no pudo escapar de su ira. Un brazo esqueletico negro emergio de debajo de su tunica y le agarro el tobillo, el simple contacto le quemaba la piel a Stefen quien se desmallo del dolor

-¡Asesino! ¡ASESINO!-

Elena aparecio justo a tiempo para salvar al principe y le dijo a shagini que no lo tratara asi

-¡se lo merece! ¡asesino de mierda!-

-no sabemos si lo hizo a proposito, mira sus ojos; estan brillando-

A la mañana siguiente Stefen le retiró las cadenas a Shagini y le informo que Gustav había Sido culpado de la muerte de su padre, Elena lloraba en su habitación porque el príncipe hiba a ser arrojado a los acantilados del sur en una expedición que Keith comandaba
-Lo que no entiendo es ¿Porque lo hizo? ¡Amaba a nuestro padre!-
-todos lo amabamos-

Flor regreso a su palacio abatida, no recordaba nada acerca de quién era, todo le parecía borroso y Florish la tuvo que ayudar a entrar
-¿Madre? ¿Que paso?-
-Berek, Shagini-
Esas eran las únicas dos palabras que salían de su boca, constantemente las repetía y Florish temía que su madre se hubiera vuelto loca
-¡Urth! ¡Ayúdame tarado!-
El tuerto acudió en seguida al llamado de su esposa
-no tienes porqué llamarme así, que mal se ve ¿Que paso?-
El aspecto de Flor era deprimente, tenía los ropajes rasgados y no recordaba más que esas dos palabras
-no está en condiciones de gobernar, tendremos que cambiar de líder, hazlo tu Urth, yo la llevaré a la punta-
La punta era la habitación que estaba más alta del palacio, allí Florish puso a su madre para descansar en una pequeña cama hecha de lana y telas blancas fabricadas por los artesanos del Este
Al día siguiente Urth reclamo el trono y el poder de los reinos del Este volvió a manos de un Kervadir
-me pregunto cómo estará nuestra hija-
Dijo mientras pensaba en los castigos que le daría por escapar con una sonrisa enfermiza

La Guerra De Las SombrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora