¿Como describir el sentimiento de estar perdida?
Es como saber lo que tienes que hacer pero no poder hacerlo y es estrezante estar en una linea al borde de lo bueno y lo malo.Melva despertó hace dos días. no me habia dado cuenta de lo mucho que la queria hasta que me hizo falta y es que estos tres días se han sentido solitarios, me recuerda a mi antigua yo, estando en terra.
Allá estudiaba en una escuela pequeña, en mi clase apenas habían 12 alumnos (incluyendome) y al ser tán tímida y extraña no tenía amigos.
Eziel se encargaba de hacer de todos mis días una tortura total y no me habia percatado de como habían cambiado las cosas en celestia.
Somos 160 alumnos de primer año y aunque Eziel aún no se a artado de mi, ya no es una lucha constante por salir huyendo y Melva me a ayudado mucho.
Nunca habia tenido una amiga y ahora veo que es algo increible tener a alguien con quien contar y ahora veo que puedo confiar en ella.Hoy en particular estoy emocionada.
Justo antes del descanso me toca Historia con Lazare y tengo muchas dudas sobre los corazones de Cristal y sobre el fundador de Celestia ¿El era humano? Pero sobre todo, quiero saber más sobre los humanos.Antes del desayuno me dirigo a la enfermería para visitar a Melva y a Dominique.
-¡Hola! -saludo alegre a Ambas que las pusieron en el mismo cubiculo.
-¡Adestia! -saluda Dominique.
-¿Como va todo? -me pregunta Melva.
-aún no podemos entrar al Comedor pero las clases se han retomado de forma Normal aunque los profesores estan alterados por lo que pasó y están vigilando a los Ignis sobre todo -le cuento a ambas chicas.
-Ya quiero salir de aquí, pero hasta la próxima semana nos permitirán la salida -masculla Melva.
-¿aún duele? -pregunto.
-de vez en cuando, aún nos están dando los frascos morados para que la pasemos algo inconcientes -Suelta Dominique alegre.
Ambas chicas se ven igual que siempre, las quemaduras más profundas las tienen vendadas pero apenas si se notan las que ya sanaron.
-¿Les gustaría que les trajera algún libro? -les pregunté.
-podrías traernos comida... la que dan aquí es horrible -suelta Melva haciendo una Mueca de asco.
-intentaré traerles algo al final del día... debo irme, las clases están por empezar ¡Que se mejoren! -saludo con la mano y salgo de la enfermería.
Me dirigo a la primera clase que es Leyes con Falan Jameson, un ventus vastante relajado que se pasa la clase tarareando canciones.
Llego a mi destino y encuentro a Finn en la entrada del Aula.
-¡Adestia! Hoy el profesor trajo unas cuantas partituras... supongo que aprenderemos más de musica que de Leyes -me avisa Finn mientras entramos.
-¿como es que ningún profesor se a dado cuenta de que el hombre no sabe nada? -le pregunto.
-Supongo que debe ser muy distraido... mi madre también es muy distraida, una vez olvidó que debía irme a traer a la escuela y estuve varias horas esperando afuera -cuenta Finn.
-¿Por qué no caminaste?
-Pues por que no me gusta hacer ejercicio -aclara con obviedad y ríe.
En eso el profesor entra, El profesor Jameson, de pelo blanco y piel del mismo color, va vestido de blanco lo que lo hace parecer una nube flotando por celestia.
-¡Alumnos! ¡Bienvenidooos! -arrastra la última O.
-Y por si no sabían... eso estuvo en Sol Mayor -nos aclara.
Claro... sol Mayor ¿Que se supone que es eso?
-El día de hoy leeremos el cápitulo tres y nos enfatizaremos en la Ley más importante de nuestros mundos, que se diviertan -el profesor toma su violin y se pone a tocarlo.
Suena Horrible, posiblemente suena a Un animal muriendo.
Abro mi libro en el capítulo que indicó e intento concentrarme pero los sonidos agudos y desafinados no me dejan concentrarme.
-¿Por qué no hace silencio? -grita una voz del fondo de la clase que reconozco como la de Eziel.
-¿Disculpe? -reclama el profesor ofendido.
-¿Se da cuenta de que suena horrible? -pregunta una de las amigas de Eziel conocida como Tasha.
-Jovencita... ¡más respeto hacia el instrumento! ¡No tienen derecho terras! -exclama el hombre aferrandose al instrumento.
-...vaya, esto es patético -me susurra Finn.
-creo que no le agradamos -susurro de regreso.
-¡insolentes! -chilla el hombre.
La mitad de la clase está en silencio mientras que otros cuantos murmuran cosas.
Entonces veo a Gravity levantarse.
-Creo que deberíamos de hacer un trato con usted... muchos de ell... nosotros queremos aprender Leyes y otros cuantos quieren aprender música así que podemos dividir el horario -explica la chica y de pronto todos guardamos silencio.
-¿Dividir los horarios? -pregunta el Profesor confundido.
-Si... emmm... los días 1 tendremos leyes y los días 5 tendremos Música ¿Qué le parece? -pregunta Gravity.
-pues... -el profesor guarda silencio durante varios segundos- ¡No! Ahora, sigan leyendo o los castigaré a todos -chilla el hombre.
Gravity se ve desconcertada por la reacción del profesor pero de igual manera regresa a su lugar.
-¿Por qué siempre intenta arreglarlo todo? -me pregunta Finn en un susurro.
-¿a qué te refieres?
-Pues... la última vez que intenté hacer un trabajo en la biblioteca la chica se entrometió y me enseñó un método raro para hacer los ensayos... ahora prefiero hacer tarea en mi dormitorio -me explica Finn.
-Dale una oportunidad, no es mala persona -repongo.
-tal vez algún día lo intentaré, pero no será pronto.
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Adestia y el misterio del castillo
FantasyCuatro mundos diferentes. Unidos por un Quinto, único. Cuando Adestia Cumple 15 años es enviada a Celestia, una escuela elemental ubicada en un mundo desconocido en donde le enseñarán a usar sus poderes y a convivir con personas de otros mundos. Lo...