Capítulo 6.

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  ☆Capítulo 6☆

Caminamos hasta encontrar la biblioteca. Estoy muy nerviosa. No confío en el, ni siquiera es de mi mundo, ya se que eso no debería de importar pero… ¿confiar en un Aqua?
Al entrar diviso al mencionado sentado en una mesa pegada a la ventana centrando su atención en un libro de pasta azul. Nos acercamos con cautela.
-¿y bien? -pregunta Melva tomando asiento a la derecha de Devan.
-la verdad, pensé que no vendrían -sonríe mientras cierra su libro. Tomo una silla paralela a ellos, esto  es una muy mala idea.
-acabemos con esto Rápido -pide Melva.
-Bueno, la razón de esta reunión es por que hemos notado que cosas extrañas están pasando en Celestia, y tenemos un fin en común, detener lo que sea que está sucediendo para que nadie salga herido ¿están conmigo? -pregunta Devan. Por alguna razón  todo lo que dice parece verdad.
-¿Cómo sabemos que esto no es una trampa? -pregunto.
-Ustedes los Terra son muy desconfiados -resopló cruzando los brazos.
-tenemos nuestras razones para no confiar en ti, pero aún así, estoy de tu lado -dice Melva segura de lo que está haciendo. Me gustaria poder levantarme y largarme, pero mi cuerpo parece no responder, elevo la mirada y me topo con los ojos expectantes de Devan. Debo admitir que el color de sus ojos es precioso, azul intenso como el mar, profundos como el cielo y misteriosos como el Universo, no tengo ni la menor idea de lo que piensa, sabe muy bien como guardar sus emociones sin transmitir algo en su mirada. Eso da miedo.
-supongo que no me puedo oponer -mascullo.
-Entonces… ahora somos un equipo ¿por donde empezamos? -nos pregunta.
-¿a que te refieres? -le pregunta Melva.
-Tenemos que saber que son esas sombras, espiarlas, saber lo que quieren y… acabar con ellas -planteó.
-Nosotras tenemos una minima idea de lo que pueden ser, se llaman Shapeshifters, cambiaformas. Pueden hacerse pasar por una persona normal en cualquier mundo, nadie sabe como luce su forma original, tan solo han visto la sombra de dichos seres, habitan el mundo 18 -explicó Melva.
-tienen una muy buena teoría, y en caso de que ellos sean Cambiaformas significa que podría ser cualquiera de nosotros… ahora entiendo por qué no confían en mi -sonrie.
-aún así, no tenemos pruebas, y hay un solo libro en la biblioteca que hable del mundo 18, no podemos investigar más -intervengo.
-se donde podemos conseguir información- Devan se aclara la garganta- pero estoy seguro de que no les agradará la idea, parecen ser niñas correctas -nos califica. Mi ceño se frunce. No podemos hacer algo que vaya en contra de las reglas de Celestia, pero tampoco podemos permitir que alguien salga lastimado
-Te escucharemos -asegura Melva. Devan observa a su alrededor para ver si hay alguien observándonos y luego empieza a hablar.
-¿Han entrado a la oficina de la directora? -nos pregunta.
-si -contesta Melva.
-bueno, como habrán observado, tiene una gran cantidad de libros. Esos son los libros prohibidos a los estudiantes, contienen otro tipo de magia al cual no tenemos acceso, pero estoy seguro de haber visto unos cuantos libros sobre el mundo 18 que nos servirán de ayuda -explica su plan.
Me tomo un segundo para analizar todo lo que está diciendo ¿quiere que le pidamos permiso a la Directora de tomar unos libros? ¿o quiere entrar y robar los libros?
La segunda opción parece la que Devan tomaría, pero si alguien nos descubre estaremos fritos y es una idea absurda hacer eso.
-¿Cómo piensas entrar a la oficina de la directora? -pregunta Melva.
-con su ayuda y un poco de suerte -indica Riendo.
-no voy a hacer eso -exclamo de malhumor. Es una idea absurda robar libros ¿Qué somos? ¿ladrones de libros? No lo creo.
-¿por qué no? Nadie se dará cuenta Adestia -habla Devan.
-¿te volviste loco? Si nadie tiene acceso a esos libros es por una buena razón, además, de seguro están protegidos por magia -explico.
-¿tu me ayudas Melva? -pregunta Devan ahora ignorando mi existencia. Mejor así.
Melva y yo cruzamos una mirada. Ella sabe que no quiero hacerlo, pero ella parece bastante dispuesta y se que ella si quiere intentarlo, pero no quiere estar sola con Devan, el chico es extraño y puede que todo esto si sea una trampa. Agh. No puedo dejar a Melva sola, tengo eso presente, pero si nos atrapan…
-Esta bien, lo haremos -Refunfuño cruzándome de brazos.
Devan sonríe triunfante y se levanta.
-Después de la cena… esperen una hora, nos juntaremos aquí, encontrarán la puerta abierta -nos explica y empieza a caminar hacia la salida como si dicha reunión nunca hubiera existido.
-es una muy mala idea -murmuro hacia Melva.
-las peores ideas se pueden convertir en las mejores, ya verás que todo saldrá bien -asegura Melva.

Adestia y el misterio del castillo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora