D E M O N ☪ [국민 - Fanfic] RESUBIENDO

☪.-Wound

Seok Jin comenzó con el curamiento, tratando de ser lo más cuidadoso posible, no quería revelar su identidad de ángel con un humano, pero todo eso falló cuando la herida de Jimin cerró y abrió los ojos chocando con su mirada.

– ¡¡AAAH!! —Gritó Jin cayendo de espalda.— ¡SE SUPONÍA QUE TENÍAS QUE ESTAR INCONSCIENTE! —Jin se levantó y se sacudió.— Jungkook de verdad es un… —Murmuró.—

Jimin aún no lograba reaccionar del todo, le dolía el abdomen pero la herida se había ido.
»Mierda, un ángel, no, no puedo estar muerto« pensó Jimin.

– No estás muerto, antes de que lo preguntes. —Habló Jin.— No tenías que haber despertado, todo se fué a la basura por tu culpa, niño… —Murmuraba.—

– ¿Q-quién eres tú? —Preguntó una vez dejó de dolerle la cabeza.— ¿Dónde está Jungkook? —Jimin se levantó corriendo a buscarlo por todos lados.—

– Se fué. —Respondió Jin y Jimin le miró.— ¿Por que siento que te conozco? —Murmuró.—

– ¿A dónde fue? —Preguntó Jimin mirando por el balcón.—

– Volverá pronto, tú… ¿Tú eres algo de Jungkook? —La curiosidad estaba consumiendole.—

– ¿A qué te refieres con eso? —Jimin frunció el ceño.—

– ¿Son novios o algo? —Jin se acercó a él.— ¿Tienen una relación?

– No… —Tembló.—

Taehyung aterrizó en el techo de la casa y los dos se asustaron por el ruido que había hecho.

– ¡Diablos!, Los arcángeles me dijeron que no estabas en la aldea entonces yo… —Hablaba Taehyung bajando al balcón.— Jimin, ¿Estás bien? —Preguntó abrazándolo con todas sus fuerzas pero sin lastimarlo.—

– ¿Tú cómo sabías que estaba aquí? —Le miró Jin con el ceño fruncido.— ¡Por qué nunca nadie me hace caso, tienen que ser más cuidadosos en el mundo humano! —Le gritó.—

Taehyung cerró los ojos y se quedó callado, suspiró y cuándo abrió los ojos se topó con la mirada furiosa de Jungkook.

– Tú… —Jungkook se acercó a Taehyung y lo separó de Jimin.— Largo de aquí. —Jungkook lo empujó.—

– ¡Tranquilos! —Jin se interpuso.—

– Tu no puedes correrme de aquí, el único que puede hacerlo es Jimin, por qué esta no es tu casa. —Le retó Taehyung furioso.—

– Jungkook, por favor. —Jimin lo abrazó y hundió el rostro en su pecho.—

Seok Jin miró aquél acto que tranquilizó a Jungkook como un cachorro. El rubio definitivamente era especial para Jeon y cuándo algo es especial para él, el pelinegro se vuelve increíblemente territorial, esa confianza que había entre ellos, era muy grande y linda, pero nada podía ser, estaba prohibido y eso le desanimó un poco a Jin.
Por qué después de mucho tiempo, volvía a sonreír y ser feliz, pero Jimin era un humano.

– Está bien, está bien. —Murmuró Jungkook besando su cabeza con cariño.—

– Supongo que Jimin está mejor. —Habló Jin con una sonrisa.— Deberíamos irnos. —Le hizo una señal a Taehyung para que saliera.—

Taehyung le miró de pies a cabeza a Jungkook y salió volando y desapareciendo de su vista.
Jimin agradeció por la curación y Jin sonrió.

– ¡Eres un ángel!~ —Seok Jin acarició la pequeña cabeza de Jimin.—

Jimin sonrió apenado y bajó la mirada.

– Gracias por todo, sin ti, estaría muerto y yo no quiero morir… —Le dijo Jimin.—

»No quiero morir ahora que conocí a Jungkook-ah~« Esos eran los pensamientos de Jimin a lo que Jungkook sonrió, jamás en su vida se había sentido así de feliz.

– Jungkook. —Jin le miró y sacó al ser oscuro de sus pensamientos.— Ven conmigo. —Jin voló y aterrizó al jardín.—

Jungkook le siguió y tomaron una forma humana para no levantar sospechas.

– Te pagaré por esto. —Habló Jungkook.— Dime que es lo que quieres.

– Ven a l'aldea mañana por la tarde, tenemos que conversar de algo y te diré que quiero.—Le respondió Jin y caminó para regresar a casa.—

Jungkook no respondió, abrió la puerta de la casa y fue a la cocina por un trago.
Se sentó en la barra y se puso a unir pistas que lo llevarán a la persona que les había lanzado la flecha.
Solo había encontrado una pista que no lo llevaba a mucho, por que era una fotografía suya actual y una de su infancia.
Unos pasos lo sacaron de sus pensamientos, alzó la mirada y se encontró con la linda sonrisa de Jimin mirando su foto como si fuese lo más hermoso.

– ¿Eres tú? —Preguntó quitándole la foto.—

– C-claro que no. —Jungkook intentó quitársela.—

– Si lo eres. —Respondió Jimin sentándose en el sofá.—

– Entonces por qué preguntas. —Jungkook se fue a su lado y pasó su brazo por los hombros de Jimin.—

Los dos se quedaron mirando unos segundos como si fueran a besarse pero el menor se alejó un poco.

– Q-que lindo~ —Jimin miró la foto con ternura.— Tus alas son muy hermosas. —Pasó un dedo por la fotografía.— Y tus ojos… ¿Siempre fueron de ese color? —Preguntó.—

– Me preguntas cosas que no sé exactamente… —Respondió Jungkook.— Pero a lo que recuerdo, sí.

– ¿Crees que no recuerdas tu infancia por qué alguien borró esos recuerdos? —Sus miradas coincidieron, Jungkook también sentía curiosidad por saberlo, pero no sabía dónde encontrar pistas de eso.—

– Trataré de recordar todo. —Habló Jungkook y se levantó para cargar a Jimin.— Ahora durmamos.

– ¡Jungkook, bájame! —Gritó asustado y a la vez riendo.— Puedo caminar.

– Pero no quiero que camines, hoy yo te llevaré a la cama. —Sonrió Jungkook subiendo las escaleras.—

Jimin se sonrojó y hundió su rostro en el hombro de Jungkook aspirando su aroma.
Los dos se acostaron y Jimin se puso nervioso cuando el pelinegro quedó demasiado cerca de sus labios.

– Buenas noches, Jimin-shi~ —Jungkook dejó un suave beso en sus labios, mientras su corazón latía con fuerza, como si fuese a salirse y explotar.—

– Buenas noches, Jungkookie~ —Sonrió Jimin escondiéndose entre las sábanas.—

El rubio se acurrucó en el pecho de Jungkook mientras este le acariciaba con suavidad, no tardó mucho para conciliar el sueño y quedarse profundamente dormido. Jeon apagó la luz y cerró sus ojos hasta dormirse.