¡Amigo!, ¿Qué amigo? Juro que si Susana está involucrada, no quedará ni un solo rastro de su precioso cabello en esa linda cabeza.
― ¿Qué quieres decir con lo de presentar?― ¡Por favor!, por mi salud mental Susana, dime que no lo hiciste, suplico internamente.
― Sí, era algo como una cita a ciegas.― definitivamente Sussy sigue encabezando mi lista de posibles asesinatos y Lis la sigue por no prevenirme.
― Pues a mí no me habían dicho nada.― Intenté sonreír, pero me es imposible, cada vez quiero matar más a mis amigas. Torturarlas lentamente.
― Qué suerte la mía, no lo crees. Te encontré primero.
La que no tendrá tanta suerte será Susana, en cuanto termine la bendita fiesta; juro que la mato con mis propias manos.
Como pudo hacerme algo así, le dije que haría las cosas a mi modo, pero al parecer es imposible hacerla entender. Aunque no sé de qué me quejo si no hubiera invitado a su amigo, no podría haber vuelto a ver al hombre del bar ¿Cómo son las cosas?
― Espera ¿Dónde me llevas?― en qué momento comenzó él a alejarse de la gente.
― Confía en mí.
― Confiar en ti, ni siquiera sé tu nombre.
― Se supone que no debemos decírnoslo "Latifa".
― Esta no es una mascarada, es solo una fiesta de disfraces.
Cada vez que sale de su boca ese apelativo cariñoso es como si todo en mí se derritiera, tendría que salir corriendo hasta donde se encuentren mis amigas, pero estar con él me confunde de una y mil maneras, como nadie más lo ha hecho y me atrae de mil maneras diferentes. Será así cómo se siente el conocer a hombres y liarse con ellos en una noche.
― ¿Por qué me has traído a la calle?
― Para esto.― dice mientras me agarra otra vez de la cintura y se apodera de mis labios sin ninguna piedad.
No puedo decir que es un beso suave, en mis novelas los describirían como uno devorador y peligroso, no puedo evitar entreabrir mis labios para concederle el permiso que me está pidiendo con su lengua, me dejo llevar y enredo mis dedos detrás de su cuello, acercándome un poco más. ¡Dios como besa!, este hombre puede llevarme al cielo.
Nunca he sido besada de esta manera, es como si estuviera en mi propio libro romántico, es excitante de alguna forma; estar aquí con un hombre al que ni siquiera conozco bien. Pero no quiero parar, él me sujeta fuertemente y me aprieta más contra sus muslos, tanto que puedo sentir su erección. No puedo creer que yo le haya causado eso, bueno yo no, mi cuerpo.
― "Latifa" hasta aquí puedo sentir los engranajes de tu cabeza. Deja de pensar y déjame besarte.― dice mientras me deja tomar un poco de aire poniendo su frente junto a la mía.
¡Ay dios!, es más alto que yo, pero por mis tacones es más corta la diferencia, así que eso me da la libertad de agarrarlo por la parte del pecho de su túnica y besarlo. Él me sujeta de la cintura; me levanta en volandas y me aprieta contra la puerta delantera del que creo adivinar es su vehículo.
La parte racional de mi cerebro me dice que esto no está bien, pero la otra se deja seducir por sus expertas manos y ya no puedo razonar con coherencia.
Sus besos son tan voraces que me dejan un pequeño dolor en mis labios y sus manos ya no solo sostienen mi cintura, tengo que abrazarlo con mis piernas para no caer, mientras que él va subiendo lentamente desde mis pies a mis muslos.
― No puedo hacer esto.―susurró.
― Solo nos besaremos "Latifa" te lo prometo.― Mi mente no deja de pensar, lo dejó solo besarme y mi corazón no para de latir.
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Mi Primera Vez? (Terminada)
RomanceSamanta está cansada de seguir siendo virgen a sus veintiséis años, por lo que ha tomado una loca decisión y armada con sus dos mejores amigas iniciaran una campaña que le ayudara a dar el siguiente gran paso sin que le rompan el corazón en el proce...