(SINÓPSIS COMPLETA DENTRO DEL LIBRO)
Mía un bello nombre para una bella chica, pero algo le pasa a esta chica.
Aparentemente tiene una vida normal, pero una serie de sucesos la hace dudar de lo que está viviendo.
Acompáñala a descubrir la verdad
...
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Los días transcurrieron de una forma muy rápida, estábamos a martes y yo me encontraba en casa después de una larga jornada en la escuela. En resumen toda la semana pasada Thomas se volvió parte de nuestro grupito, estudiábamos juntos, almorzábamos juntos y demás cosas juntos, resulta que todos sabían quien era ya que Lucas y Bruno habían sido buenos amigos de Thomas en la infancia, ¿Cómo es que ellos lograron reconocerlo y yo no?, en fin no puedo quejarme, soy un pequeño desastre andante, a veces no recuerdo cosas y soy mala con los rostros y los nombres, muy apenas se el de mis amigos y mis padres, a y sin mencionar que solo se el apellido de mis profesores, pero bueno mis desastres a veces resultan divertidos como ahora que estoy llena de pintura y tirada en el suelo gracias al enano que tengo por hermano.
Unas horas antes de la tragedia estaba pensando como decorar mi cuarto, ya tenia la pintura, gracias a mis padres que suplen cada una de mis necesidades innecesarias. Justo cuando ya tenia mi cabeza repleta de ideas y comenzaba a ponerme manos a la obra llego para mi buena fortuna, nótese el sarcasmo, mi hermoso hermano Milo, el menor de la familia, de la nada comenzó a lanzarme pintura con sus manos, después salto sobre mi y me hizo caer de un sentón al suelo, embarro sus manos llenas de pintura sobre mi cabeza y salió gritando: ¡Por Narnia!
Sali detrás de él, no sin antes observar mis hermosas paredes casi terminadas, tiene suerte de que están tal y como las pinte porque estaría mil metros bajo tierra, dejo mis zapatos llenos de pintura en la habitación y tomo uno de los botes de pintura con cuidado de no manchar el piso, porque si pinto el suelo de la casa mi madre se encargara de llevarme mil metros bajo tierra, salgo al jardín y observó todo el perímetro en busca del enano, vaya tengo un jardín bastante espacioso, bien eso no es importante.
Detengo mi vista en el árbol que se encuentra en el centro, detrás de este está Milo, dejo el bote con pintura en el piso y tomo un poco con mis manos tratando de no hacer ruido, me acerco sigilosamente al árbol y extiendo mis brazos como si estuviera abrazando el árbol pero en realidad estoy llenándole la cara con pintura rosa, él gritó como una niña y se abalanza sobre mi con más pintura, ¿Cuándo tomo el otro bote?.
Ahora si, este enano y yo estamos en una guerra, seguimos lanzándonos pintura, algunos vecinos pasan, pero solo nos ven con muecas, otros que ya nos conocen y simplemente nos ignoran, gracias por dejarme morir en manos de este enano incompetente, espero que carguen en sus conciencias mi muerte vecinos sin corazón.
De pronto siento fuera de mi el peso de mi hermano que estaba sobre mi espalda el muy gordo, me volteo e incorporo, cuando levanto la vista veo a Thomas, espera, Thomas!!
-Vaya no sabía que mis vecinos hacían guerra de pintura- dice soltando una carcajada - te ves bien llena de pintura- dijo entre risas.
Espera, ¿he escuchado bien? ¿El acaba de decir vecinos?
- ¿Vecinos? - pregunto con los ojos muy abiertos
-Si mis padres siempre han sido dueños de esta casa, pero aún no vivimos aquí, están haciendo algunos arreglos porque la dejamos un poco descuidada después de mudarnos - dice señalando la casa de al lado.
- Eso explica el porque lleva tantos años sola- digo con mucha sorpresa y obviedad
- ¿Por qué estaban matándose con pintura?
- Simple amigo, me gusta molestar a mi hermana - dice Milo resaltando la palabra "amigo" mientras se coloca delante de mí y frunce el ceño, mi hermanito está madurando.
- Si, ya sabes peleas típicas de hermanos que después terminan bien- digo pasándole los brazos a mi hermano sobre sus hombros.
- Bien, entonces te veo mañana en la escuela, Mia- Thomas me guiña un ojo y desaparece por la cerca que une nuestras casas.
Cuando se aleja puedo soltar todo el aire que estaba conteniendo en mis pulmones, que vergüenza me vio llena de pintura.
-Vergonzoso hermana, ¿es tu novio?
- ¿Qué?, él no es, no es mi novio, como se te ocurre eso, solo es un compañero de la escuela que ahora será nuestro vecino.
- Tranquilízate solo bromeaba- dice caminando a la entrada de la casa- tienes problemas, medícate
Bueno no esperaba esa respuesta, se comporta como un bebe peleando conmigo y ahora me responde como adolescente, que le pasa.
Le resto importancia y vuelvo a mi habitación para terminar de arreglarlo y limpiarlo para poder dormir en el esta noche.
