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La puerta acababa de sonar justo cuando Yoongi preguntó quién era la persona con la que Hoseok había quedado, así que le entró incluso más curiosidad. Hoseok, para que dejara de tener esa intriga, se acercó con calma hacia la puerta, giró la llave y la abrió lentamente.

—¡Buenos días, hyung! —una dulce voz habló con tono animado, mirando a Hoseok con un pequeño brillo en la mirada. Éste rió suavemente mientras extendía una mano para acariciar su pequeña cabeza.

—Buenos días, Jimin.

La cara de Yoongi en ese momento era legendaria. No sabía ni qué expresión poner al ver todo aquello, porque no se lo esperaba para nada, ni una pizca. Era capaz de imaginar a cualquiera de los miles de amigos que tenía el menor, pero Jimin ya era otro nivel.

—¿Qué significa esto...? —pudo preguntar una vez se recompuso de su asombro.

—Significa que hemos quedado para dar una vuelta y hablar sobre un par de cosas —explicó Jimin mientras asentía con la cabeza.

—Por eso no podías quedar... —razonó casi para sí mismo—. Porque habías quedado con Hoseok...

—¡Muy bien, YoonYoon! —le felicitó Hoseok, medio burlándose de él. Yoongi le dirigió una mirada fulminante, a la cual respondió con una risa espontánea y divertida que le hizo cambiar de nuevo su forma de mirarle. No podía enfadarse con él—. Bueno, en un rato volveremos, ¿sí?

Y apenas le dejó tiempo para contestar, pues ya había salido de la casa y cerrado la puerta con llave, dejando al mayor encerrado dentro. Suspiró, pasando las manos por su rostro, nervioso. El pulso le temblaba, su corazón latía con velocidad y su respiración se había agitado ligeramente.

—No sé cómo puedo vivir con él día a día y no sufrir un ataque de ansiedad o algo por el estilo —comentó Hoseok mientras se abanicaba con las manos. Jimin solamente rio mientras tiraba suavemente de él para salir del edificio.

—Oye, tienes muchas cosas que explicarme bien aún —le dijo el menor, una vez fuera.

—Lo sé... Pero no tengo claro si estoy preparado para desvelar tanto.

—Eso ya me dice mucho.

Hoseok se maldijo a sí mismo. Era demasiado bocazas, no sabía nunca cuándo callarse, hasta cuando era para su propio bien. Pero dicho estaba, y Jimin era demasiado listo para lo que había pensado en un primer momento.

—Entonces, dime —volvió a ser el menor quien habló—: ¿cuánto tiempo llevas enamorado de Yoongi?

—Uhm... —se pensó la respuesta, porque era obvio que iba a mentir—. Tiempo después de conocernos, más o menos. —Recibió una mirada seria y con el ceño fruncido de Jimin. Mierda, lo había pillado— Vale, poco después de habernos conocido. —Una mirada más— ¡Vale! El mismo día que nos conocimos... 

No acababa de entender cómo unos ojos tan pequeños y adorables eran capaces de penetrar tanto en los de otra persona. Había sentido incluso miedo. ¿Cómo era eso posible, si vivía con la persona a la que todos temían? "Porque lo amas", le dijo su subconsciente. Nunca había estado tan de acuerdo con algo o alguien.

—Bien —respondió tranquilo, por fin—. Y hablando seriamente... ¿Sigues intentando conseguirlo, incluso teniéndome a mí de pareja?

—Bueno, digamos que nunca intenté hacerlo. Siempre lo quise a mi lado, pero... Esto era una simple manera de verlo feliz, porque nunca olvidaré su sonrisa diaria cuando tenía a Jungkook.

—Ya veo... —caviló, llevando una mano a su barbilla—. ¿Piensas que te lo cederé tan fácilmente? —preguntó amenazante, de pronto.

—¿Q-Qué?

«First date» || YoonSeokDonde viven las historias. Descúbrelo ahora