•7: Todos dicen•

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Estar en la universidad es interesante, todos son buenos, la mayoría. Las clases me hacen sentir como una profesional, me refiero al hecho de sentirme como una psicóloga. Todos eran amables y bien portados, excepto una persona, siempre encontraba la manera de molestarme, y obvio me defendía, era pura envidia la que sentía. Ella tiene mucho dinero y la verdad no sabía en sí el porqué me tenia envidia.

ㅡMarianne... -Ahí esta, esa voz chillona entrando por mi oído casi rompiendo mi tímpano. Levante mi mirada.

ㅡ¿Y ahora que quieres, Tina? -Hable con mi mirada fría. Su cabello teñido de rubio estaba recogido a un lado, sus ojos azules brillando como siempre, y no faltaba su vestido de siempre; el corto, ese que esta como cuatro dedos mas arriba de la rodilla. Y claro unas zapatillas de tacón.

ㅡNada en realidad... solo pasaba por aquí y me pregunté si Troy estaba bien con una zorra como tú.

ㅡ¿Otra vez con eso? Te he dicho, querida Tina que el esta más que feliz conmigo, por eso te rechazó, odio ser descortes contigo, pero, lárgate.

ㅡClaro que no me rechazó. ¿Sabes cuantas veces a estado en mi cama? ¿O yo en la de él?. No lo sabes, ¿porque quién le diría a su novia que se esta revolcando en la cama de alguien mucho mejor? -Lancé una carcajada.

ㅡ¿Desde cuando has dicho eso?. Otro chisme que has inventado para que le importes a los demás... -Dios, no puedo estar haciendo esto ㅡAmbas sabemos que no es cierto, Tina.

ㅡHay Marianne, eres tan estúpidamente ciega... -Sonrio ㅡAhora cuéntame, ¿Como vas con tu otro novio, Zorrita?.

ㅡ¿Zorrita? -Asintió ㅡ¿Yo? -Asintió de nuevo ㅡYo soy la zorra, según tú. ¿Pero quien es la que anda con vestiditos cortos y con zapatillas de prostituta? -Miro su atuendo. No soy así, pero me tengo que defender. ㅡYo no soy la zorra, además tu admitiste ser una en el momento en que hablaste sobre acostarte con mi novio.

ㅡ¡Me las vas a pagar Óvice! -Chillo, se dio la vuelta para empezar a caminar por el pasillo.

ㅡ¡Claro! -Grité.

ㅡHola, Marianne.

ㅡAh, hola Lu.

ㅡLe diste su merecido. ¡Así me gusta, chica! ㅡMe dio cinco. Mejor amigo desde la primaria, Luis, mejor conocido como Lu.

Se paso la mano por su cabello azabache.

ㅡY Troy, ¿Como esta ese imbécil?

ㅡNo hables así Lu, es mi novio. Ustedes dos no se llevan bien, pero tampoco lo tienen que demortrar. -Me encongi de hombros. ㅡDeberian de odiarse como nosotras, las mujeres.

ㅡ¿Como es eso? -Alzó una ceja esperando mi respuesta.

ㅡEn silencio. -Lanzo una carcajada que sonó por medio campus.

ㅡ¿Entonces que es lo que hay entre Tina y tú?

ㅡMhm... olvida lo que dije. -Volvio a reír.

ㅡ¿Como has estado, Mar?

ㅡMhm, bien, con problemas pero bien. -Sonreí. Me miro con ternura y luego me abrazo.

ㅡTranquila Mar. Todo se arreglara. No tienes que fingir que estas bien si estas conmigo. -Suspire.

ㅡEs que... no se, ese idiota de Luck. -Se separó del abrazo.

ㅡ¿Tú supuesto amante?

ㅡSí.

ㅡ¿El del mini super ?

ㅡSí.

ㅡ¿El de la-

ㅡSí, sí, Ese mismo, Ya deja de preguntar.

ㅡ¿Salimos hoy, Mar?

ㅡNo puedo, Troy me invitó primero, lo siento, Lu... -Toque su mejilla con mi pulgar.

ㅡOdio a Troy, desde que estas con él no salímos. Es un idiota, cree que es tu dueño y de verdad odio que te utilice de esa manera... -Se tapo la boca.

ㅡ¿Qué?

ㅡNada...

ㅡDime, ¿de que manera me utiliza?

ㅡTú ya lo sabes...

ㅡNo, no lo se, Lu, dime.

ㅡÉl te esta siendo infiel, sabes que ya se a acostado con la universidad entera.

ㅡNo digas eso, no es cierto. -Claro que no lo era, él me ama y yo lo amo, y somos felices, ¿por que me seria infiel?.

ㅡEs cierto Marianne...

ㅡNo lo es. Se lo que digo.

ㅡY yo se lo que es ese idiota, ¡se acostó hasta con el conserje!

ㅡNo estamos jugando Luis. No puedes llegar así de la nada y decirme que me utiliza y que a estado con todo el mundo en una jodida cama.

ㅡ¡Si puedo, porque soy tu amigo y tengo que abrirte los ojos!. Él te hace daño, Mar. No puedes evitar la verdad, alguien llegará y te abrirá los ojos de la manera más fea y evidente para ti.

ㅡ¡Ya no hables más de esa mierda! -Estaba tan enojada que no podría verlo una vez más a la cara sin golpearlo.

ㅡNo, ¡te tienes que dar cuenta Marianne! -Me tomo por los hombros y me sacudió. Lágrimas se acumularon en mis ojos, trate de contenerlas, pero, no lo logre. -Lo siento... Mar, Perdóname. Sabes que solo quiero lo mejor para ti.

ㅡNo, alejate... -Solloce. Me atrapó en un abrazo. Intenté alejarme, pero el siempre había sido más fuerte que yo. ㅡNo necesito esto, ¡solo sueltame!. -Empuje su pecho y me separe del abrazo.

ㅡMar... Lo lamento. -Me miró con arrepentimiento, me acomode la mochila, quite mis lagrimas y salí de la Universidad. Busqué mi auto y me monte, lo encendí y maneje hasta mi apartamento.

Después de parquear y subir por el ascensor, entré a mi hogar y me senté cansada en el sillón. Tocaron la puerta y fui corriendo hasta ella, la abrí. No me esperaba ver a uno de mis vecinos.

ㅡHola. -Dijo el chico con una sonrisa, le sonreí.

ㅡHola, ¿Que se te ofrece?. -Dije con amabilidad.

ㅡ¿Puedo pasar? -Pregunto, asenti y el entro, se sentó en el sofa y cerré la puerta.

ㅡAhora, dime...

ㅡSoy Danny, pero me puedes decir Dan.

ㅡEsta bien, Dan. ¿Quieres algo?

ㅡNo, gracias Mari. -Mi celular sonó en mi bolsillo, mordi mi labio y mire a Dan.

ㅡ¿Me das un momento?

ㅡVe. -Camine hasta la habitación y conteste.

ㅡ¿Si?

Hola, amor... no podremos salir, me dejaron unas condenadas tareas. Muchas, ¡demasiadas!. Agradezco tu comprensión... Te amo.

ㅡAh, oka-

Colgó. Quedé anonada. Mire el celular y lo tire en la cama.

Marianne

Esa jodida voz, la ignore y me dirigí a la sala y me senté en otro sillón mirando a Dan.

ㅡ¿Tu novio te llamo?

ㅡMhm, sí. Planeabamos salir hoy, pero lo canceló por tareas... -En su rostro se formo una sonrisa y yo lo mire confundida.

ㅡAh, lo siento. Supongo que aún no sabes... te lo explicare.

➳ₛᵢₗₑₙCₑ†Donde viven las historias. Descúbrelo ahora