•29: Excitante•

4 0 0
                                    

La lencería tenia, panties de encaje, sostén de encaje, un collar negro que me ahorca, ㅡNo literalmenteㅡ, y una banda negra en mi muslo izquierdo. Me veía sensual... Estaba ansiosa, me iba a acostar otra vez... con el diablo. Ahora me sentía extraña, mucho, no, 'mucho' le queda corto.

ㅡMarianne... -Llamo él. Camine fuera de la habitación con esos jodidos zapatos negros. Me pase la mano por el cabello y lo organice. La tela de la lencería era algo transparente y negra, dejaba ver mi abdomen y parte de mis senos, llegue a la sala. Él seguía con esa pijama de conejito, pero tenia el gorrito en la cabeza y estaba de espaldas. Dios, su espalda era ancha y sexy, aún con la pijama. Me acerque a paso lento, sintiendo su sonrisa, chasqueo los dedos y desapareció de mi vista, abrí los ojos y me congele. Unas manos tocaron mi cintura y me estremeci, una mano aparto mi cabello y unos labios suaves besaron mi cuello con sensualidad, un escalofrío me invadió.

ㅡQue sexy... -Susurro en mi oído. Suspire con pesadez, lo noto y bajo sus manos a mi cadera, apretandolas contra su pelvis.

Me gire para verlo a los ojos, pase mis manos por su cuello, aprisionandolo en un beso.

ㅡEres un conejito muy malo, Lucky... -Susurre contra sus labios.

Su mano derecha bajo por mi trasero, estrujando este para bajar a mi muslo y allí subirlo hasta su cadera, sostuvo mi pierna allí, su pelvis choco intencionalmente con la mía. Jadee al sentir su ya dura erección contra mi intimidad.

ㅡSí, un conejito que quiere follarte... -Susurro.

ㅡTe queda la canción...

ㅡ¿Cuál?

ㅡTe quiero pa' mi. Más la parte en la que dicen... 'Yo lo sé, cogemos como conejos'. -Cante mientras jadeaba.

ㅡTienes razón... -Sonrió. Una carcajada se coló en mi boca. Me levanto y enrolle mis piernas en su cadera, sintiendo más cerca su erección contra la delgada tela de la lencería.

Me llevo hasta la isla y allí me sento. Volvió a besarme, mis manos subieron a su cabello, estrujandolo.
Sus besos bajaron a mi cuello y mordió mi clavícula, robandome un jadeo que resono en las esquinas de mi casa, comenzó a descender con besos húmedos, aprisiono mis pechos en sus manos, los estrujo y jadee.

Sus manos siguieron bajando tocando mi abdomen, tire la cabeza hacia atrás aún jadeando, sus manos sostuvieron mis caderas, metió sus dedos índices a los lados de mis panties, estiró los dos y luego los soltó, gemi ante el ardiente ardor que inundó mis caderas. Sus manos siguieron bajando por mis piernas y abrió estas encima de la isla, su mano izquierda apretó mi muslo derecho y su mano derecha subió hasta mi intimidad, corrió a un lado el pantie y paso su dedo índice por mi centro, tocando mi clítoris de paso. Jadee.

ㅡEstas tan mojada... o mierda, Marianne. Sabes como voy a disfrutar follarte una vez más.

<Lucifer>•

Estaba tan mojada, era vulnerable... esta chica siempre fue mi talón de Aquiles, desde que estaba pequeña.

ㅡFollame ya, Lucifer... -Suplico mordiendo su labio.

ㅡTodavía no, preciosa... -Descubri su seno derecho con mi mano izquierda.

Deje besos húmedos alrededor de su pezón, para después rodear este con mi lengua, apretó mi cabello suplicante mientras jadeaba mi nombre. Mordisquee su pezón. Estaba tan... llevado del carajo, todo por ella y solo por ella. No dure ni un día sin tener sexo con ella, nadie me podría juzgar, ella es jodidamente sexy y estar dentro de ella es tan excitante, nunca estoy satisfecho.

Mi dedo índice aún la torturaba, rozando su clítoris con rapidez, metí mi dedo índice y mi anular en su interior, abrió más sus piernas. Se sentía tan estrecho y mojado, tan excitante... saque mis dedos y volví a meterlos con brusquedad, soltó un gemido y apoyo su frente en mi cuello, para después morder mi hombro. Doble mis dedos dentro de ella, presionando una de sus paredes, mordió con más fuerza y solté un jadeo; seguí dando golpecitos con mis dedos, utilice mi dedo pulgar en su clítoris, rodeandolo, tocandolo y pasarlo desde el inicio de mis dedos hasta la punta de su clítoris. Su mordida se volvía cada vez más fuerte, y sus paredes apretaban más mis dedos alertandome de su cercano orgasmo.

Grito mi nombre en un gemido cuando llegó a la cima para después enterrar sus uñas en mis hombros y morder con fuerza. Saque mis dedos de su interior y los metí a mi boca. Un delicioso sabor... ella se separo, sus mejillas estaban rojas, y una sonrisa acompañada de unos hermosos oyuelos adornaban su rostro.

La bese compartiendo su sabor, agarró mi nuca profundizando el beso, la tome de la cintura y la acerque más, chasquee los dedos y en menos de nada estabamos en la habitación, ahora ella estaba sentada en la cama y yo estaba parado frente a ella, aún juntos en el beso. Se separo y me miro con advertencia en sus ojos.

ㅡNo hagas eso... -Señaló con su dedo índice, sonreí y la acosté en la cama, bese todo su cuerpo, disfrutando de su sabor. Metí mi rostro en su cuello y disfrute una vez más del aroma de su cuello, sentí como se estremeció y rodeo mi cadera con sus piernas juntando nuestros centros, ya estaba harto de esa estúpida pijama. Baje la cremallera y me la quite, quedando desnudo, quite la lencería de su cuerpo, bese sus caderas y estas ya empezaban a pedir a gritos mi atención, lo que me encendía más, me acerque a su intimidad y suspire, intencionalmente, se estremeció  y tomo entre sus manos la sábana, estrujandola. Toque su clítoris con mi lengua, gimio, metí mi lengua en si entrada y subí hasta su clítoris.

ㅡ¡Luci!... -Grito, mordi suavemente su clítoris y toque la punta con mi lengua. ㅡLuck... -Jadeo.

Mi miembro estaba sumamente duro, la mire con picardía, ella sonrió y se levantó, me tiro contra la cama y se subió encima. Sexy.

ㅡYo tendré el control... ¡tienes que dejar de hacer tiempo! -Reprochó. Agarró mi miembro y lo apretó, jadee y cerré los ojos con fuerza. Su dedo índice toco mi glande, para después introducir mi miembro en su intimidad, oh, se sentía tan jodidamente bien. Me enterró hasta el fondo, sus paredes me apretaron y suspire, comenzó a dar saltitos, cerró sus ojos con fuerza mientras arrugaba su nariz y mordia su labio. No dure ni medio minuto en esa posición, tenia que tener el control, la estampe contra la cama y le di una fuerte estocada, luego otra, sentí sus paredes apretarme contra ella aún más, supe que acabaría, le di una última y fuerte estocada. Se corrio y yo la inunde con mi esencia. Salí de ella satisfecho con una sonrisa y mi cuerpo todo sudado al igual que el de ella, parte de su cabello estaba mojado y gotitas de sudor bajaban por los lados de su cara, me tiene a su lado, y nos quedamos dormidos.

➳ₛᵢₗₑₙCₑ†Donde viven las historias. Descúbrelo ahora