"El tren está a punto de llegar a la estación, favor de mantenerse fuera de la línea amarilla hasta que la unidad se detenga por completo gracias"
Me sentía aliviado, cansado y preocupado. Tenía la extraña sospechas de que en cualquier momento sonaría mi teléfono para informarme que algo había salido malo, lo que provocaría que retrasaría la publicación del manga de este mes y todos los esfuerzos de la última semana serian inútiles.
El día había resultado increíblemente agotador, no había parado de correr de un lado a otro llevando los manuscritos, documentos y propuestas por todo el edificio. si no estaba corriendo estaba ocupándome de las llamadas telefónicas que ponía a todos histéricos, pues cada noticia que recibíamos era como despertar un nuevo caos. la oficina se encontraba hecha un desastre, estaba sucia, una gran pila de papeles descansaban en los escritorios de cada uno amenazando con derrumbarse en cualquier momento, los gritos de todos, o el sonido del teclado de las computadoras como locos para completar la información faltante, parecía que moriríamos en cualquier momento debido al estrés, (como cada fin de mes).
Podía sentir los gritos de Takano que aun retumbaban en mi cabeza mientras me gritaba ordenes e instrucciones, eso siempre pasaba al final de ciclo y todavía no entendía como podía sobrevivir a esto.
Deje salir un largo y prolongado suspiro. Lo único que deseaba era regresar a casa, darme una ducha con agua caliente y meterme a la cama, sin tener que ver a ninguno de mis compañeros, especialmente a mi jefe. Pero por desgracia la realidad de las cosas era sumamente cruel. Resultaba incomodo que contra todo pronóstico estuviera viviendo alado de mi superior, haciendo más difícil olvidarme de lo sucedido. (tanto nuestra historia del pasado como la del presente)
Los recuerdos de nuestro pasado parecían volver para acosarme, había intentado olvidarme de ese asunto por completo, incluso pensé que havia logrado olvidarme de el, pero Takano no me lo permitía, seguía detrás mío diciendo cosas que no podían suceder cada vez que estamos los dos solos, cuando estamos con todos puedo apoyarme de alguien para no hablar con el al menos de que sea obsoleta mente necesario. Pero cuando estamos los dos así... (-/////-)
Afortunadamente para mi, me seguía hablando de trabajo, lo cual de alguna forma lo agradecía y maldecía al mismo tiempo, no me gustaba admitirlo pero era un excelente mentor y supervisor.
En un principio no entendía nada sobre el proceso de publicar un manga ademas de que es mucho más rápido que el proceso de un libro y me costaba acostrumbrarme, Takano-san me remarcaba mis errores y me aconsejaba como podía hacer mejor mi trabajo, sus consejos eran certeros y cada proyecto que tenia lo volvía realmente una obra de arte.
Pero en cuanto a la vida privada, Takano se volvió parte de ella. Cuando éramos jóvenes salíamos, pero al parecer por un mal entendido terminamos "no importa con quien estuve nunca pude olvidarme de ti" fue lo que él dijo cuando descubrimos quienes eramos. Bueno aunque lo cierto es que no lo había reconocido hasta ese momento, me había tomado tan de sorpresa que no sabía como reaccionar y termine reclamándole.
Ta – onodera, me estas escuchando –
On – aaa perdona... ¿Qué decías? –
Ta – la propuesta, ¿ya la tienes? – sus ojos se quedaron fijos en mí, lo cual me incomodaba.
On- por supuesto, - desvié la mirada en otra dirección - está en mi casa, mañana la entregare temprano –
Ta - así,- permaneció un momento callado, con sus ojos fijos en mi, a pesar de no verlo, sentía su mirada - ¿estás seguro que está bien? – coloco su mano en mi frente y observe mi reflejo en sus ojos cafés.
ESTÁS LEYENDO
El secuestro
Fanfiction¿Qué arias si la persona de quien estas enamorada desapareciera? Takano Me deje guiar por el sonido hacia un callejón. Donde encontré su móvil tirado en el interior de un contenedor de basura. Sentí como el corazón se me caía a los pies, algo le ha...