Babysitting || WayV

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Tres pequeños iban agarrados de la mano y daban pequeños saltitos, estaban emocionados de por fin salir a algún lugar que no sea el supermercado de la abuelita y su amable nieta. Aquellos tres pequeños realmente querían salir a pasear lejos de su hogar, DeJun iba agarrado de la mano izquierda de Chittaphon mientras que Hendery se encargaba de agarrar la mano derecha del mayor de los pequeños.

SiCheng los cuidaba desde atrás junto con el bebé YangYang, que se sorprendía por cada cosa llamativa que sus ojitos llegaban a observar en el camino. Los tres pequeños iban vestidos con unos tiernos overoles similares, mientras que Winwin llevaba ropa poco llamativa y cubría su rostro para no llamar la atención de fans u gente que supiera que era idol.

Apenas habían llegado a los juegos del parque los pequeños se separaron corriendo libremente alejándose no mucho del mayor. Con YangYang aún en sus brazos SiCheng también se encaminó a los juegos, llevando al pequeño a los columpios de bebés. Mientras él y Yang se divertían, Hendery Ten y XiaoJun discutían por quién ser el capitán del barco pirata.

—¡Yo soy el mayor! Merezco ser el capitán.

—Popuse el uego yo lo sele. — discutió Jun al escuchar la razón del porque Chittaphon quería ser el capitán. Razón que le pareció muy tonta e infantil.

—Y..yo quelo sel…

Las palabras fueron dichas tan suavemente que los dos pequeños mayores no lograron escuchar a KunHang.

— Yo quelo sel ¡pilata! — Con todo el valor Hendery logro hablar más fuerte, llegando a gritar la última palabra.

— ¡KunHang no te metas! — luego de gritar al unísono DeJun y Ten siguieron gritándose ignorando al pequeño Hen que herido y deprimido habían dejado.

—Chicos… — cero atención, ninguno había volteado a verlo. — ya niños dejen de pelear… — Ten comenzó a correr al menor; terminaron dando vueltas alrededor de WinWin. — ¡Xiao De Jun! ¡Chittaphon! ¡Dejen de correr! — con molestia detuvo el andar de los dos que corrían, le resulto algo incomodo el movimiento que realizo por la cangurera de bebé que tenía puesta para YangYang.

Intentaron librarse de SiCheng sin poder lograrlo, refunfuñando dejaron de patalear por su libertad claramente WinWin era más fuerte que ellos dos y ni uniendo fuerzas iban a lograr vencerlo.

—Ahora que tengo su atención. — soltando a los pequeños revoltosos, SiCheng comenzó a ver a su alrededor verificando que todo este bien y el que Yukhei no haga algo estúpido como decirle a Kun de su paradero con los chicos. — es hora de irnos acabo de ver a la parejita feliz paseando por aquí, si Kun nos ve estoy seguro que me matará.

Ten y Jun cruzaron miradas aterrados, no sería nada bueno encontrarse con Kun, si bien el mayor no demostraba su enojo con los demás a menudo cuando desobedecías una orden directa y clara por su parte Kun te haría arrepentirte cruelmente de tus actos, Juntando sus manitas Chittaphon y Xiao se acercaron hasta al mayor mirando su entorno esperando no ver al más grande por edad.

Estaban dispuestos a irse querían llegar lo antes posible al departamento y eso es lo que estaban haciendo hasta que Ten se percato de la ausencia de su querido KunHang.

— ¡WININ! ¡¡HEN NO ESTA!! — Chittaphon se alteró, su pequeño amigo no estaba y no se había dado cuenta de ello. Ten tenía miedo de que algo malo le pasara, Hendery era un niño tímido y el solo pensar que le sucediera algo hacia temblar su pequeño cuerpo.

— ¿Qué? No puede ser... — desesperado miro a todos lados, efectivamente Hendery no se encontraba a su alrededor. ¿Como no se había dado cuenta de eso? — Okey calma... Vamos a buscarlo. Solo mantengamos la calma... Así lo encontráremos...

SiCheng pedía calma cuando él era el más alterado, muchas preguntas rondaban su cabeza en esos momentos; ¿Como pudo haber perdido a Hendery? ¿Porqué tenía que desaparecer justo en esos momentos? ¿Porqué debía ser tan silencioso? ¡¿Porqué debían llamarlo en ese instante?! Temblando saco su móvil del bolsillo, lo único que deseaba en esos momentos era que la persona que llamara fuera el molesto de Nakamoto.

Pero no siempre todo termina siendo lo que queremos, aquella persona que deseaban no encontrarse la cual intentaban evitar estaba llamando.

Tragando saliva duramente agarro fuerte el móvil en su mano y con un débil "hola" respondió la llamada.

— A la casa, ahora.

No había llegado a preguntar nada, Kun le había cortado dejando claro su enojo, no dijo mucho fue corto y precisó pero sobre todo aquello aterrador.