CAPITULO 1

4.8K 222 19
                                    

Me preparaba para salir junto con mi amiga Irene saldríamos junto a mi hermano Hoseok saldríamos a una fiesta, agradecía que al fin mis padres me hayan levantado el castigo. Coloque un poco de labial en mis labios y me miré al espejo feliz con mi atuendo.

Me sentía cómoda, acomode mi suéter y mis botas juntó a mi falda me hacían lucir unas lindas piernas. Dejé mi cabello suelto lucia más largo de lo normal, me retoqué un poco él maquillaje y sonreí.

« Toc-Toc »

Tocaron la puerta se abrió dejando ver una chica de cabello castaño mi mejor amiga.

- ¿Ya estás lista? - dijo entrando a mi habitación, asentí - muy bien, tú hermano parece desesperado por ver a su amigo Tae. Parecía que le gusta.

- Mi hermano suele ser un poco raro - me encogí de hombros.

Se encogió de hombros también ambas salimos de mi habitación, bajamos las escaleras. Nos encontramos con Hoseok muy ansioso, Irene tenía razón parecía novio desesperado.

- Jung Dae ¿Porque tardaste tanto? - gritó desesperado.

- Wow, cálmate Hoseok - dije bajando de las escaleras acompañada de mi amiga, quien bajaba tras de mí. Mi hermano parecía un loco desesperado.

No dijo nada más y salimos de casa abrigados, nos montamos al auto de mi querido hermano gruñón y nos dirigimos a la casa de su amigo Tae. También es mi amigo pero casi no conversaba con el, tal vez un "Hola cómo estás" y "adiós" pero no éramos para nada cercanos. Era más amigo de Hoseok que mío, lo mío sería más como un cómodo. Encendimos la radio y una de mis canciones favoritas se escuchaba Call You Mine de The Chainsmokers & Bebe Rexha, tarareaba la canción Irene se me unió.

A los pocos minutos llegamos a una zona digamos un tanto privada las casas eran más grandes, estacionó el auto cuando llegamos y bajamos. El patio de la casa era un desastre, vasos rojos tirados hasta envoltorios plateados de preservativos rotos. Hug, asco. Hice cara de asco y seguí observando, también había algunos chicos o conversado o comiendo se la boca.

Irene me tomo del brazo y empezamos a caminar siguiendo a Hoseok, al entrar a la casa había humo y un rato olor. Había más gente estaba muy lleno, bailaban una canción que a mí parecer era de un DJ. Hoseok nos guío hasta la barra y nos dio un par de cervezas, pude ver como mi hermano se hiba con su amigo Tae. Se sonreían y se dieron un abrazo, no me sorprendía eran algo afectuosos y cariñosos.

Sin darme cuenta ya me había terminado mi cerveza pedí otra y me la entregaron, el chico que servía las bebidas me sonreí y era algo coqueto. También podía notar que era algo tímido, llevaba una camisa negra y por lo que pude notar llevaba unos pantalones negros muy ajustados. Sus ojos era de un café oscuro o eso era lo que podía notar por la poca luz, sus labios eran finos. Pude notar también una marca en una mejilla y su cabello castaño también un poco oscuro, era muy atractivo.

- Hey Dae - salí de mi ensoñación o más bien deje de mirar al chico que tenía al otro lado de la barra.

- Hola Jiminnie - sonreí y el nombrado hizo lo mismo.

- Qué bueno es verte de nuevo.

- Si - mire a mi amiga y está solo miraba al rubio - Irene mira el es mi amigo Jimin y ella es mi amiga Irene.

Los presente y ambos se sonrieron, Irene se sonrojo un poco haciando la ver más tierna. Conversábamos entre risas, me agradaba Jimin independientemente de que en un pasado era mi amor platónico. La cerveza de poco a poco desaparecía en mi boca y de ahí en mi garganta, sentía un poco de calor.

- Hey Jungkook, dame un whisky - grito Jimin al chico de la barra.

Ese mismo chico que ahora se que se llama Jungkook sonrió y asintió, sus labios pronunciaron un "Claro" empezó hacer el whisky de Jimin y se lo entrego. Jungkook ese nombre ya lo había escuchado pero no lo recordaba. Mientras Irene y Jimin conversaban, me di el lujo de volver a observar a ese muchacho. Me fui inevitable no morder mi labio, era el chico más sexy y ver como el pantalón se le ajustaba en los muslos hacia que se me subieran los colores al rostro. Ni a mí me quedaba de esa manera, los moldeaba de alguna manera que dios no sabía cómo describirlo. Mire mis piernas algo expuestas por la falda, hice un puchero con los labios. Era injusto que a mí no se mi vieran los muslos de infarto cuando me colocaba algún pantalón ajustando, me sentía más bien como un fideo. Alce la mirada hacía la botella de cerveza ya vacío, de nuevo me la había terminado.

- ¿Quieres otra? - alcé la mirada y era Jungkook, su voz era tan sensual.

- Si por favor - asentí con la cabeza varias veces.

Río un poco y tomo la botella para buscar otra, abrirla y entregarme la con una hermosa sonrisa.

« Dios de dónde salen esos chicos »

De nuevo me había sonrojado, pero está vez fue sobre la atenta mirada del chico muslos sexys. El apodo era estúpido, si tal vez. Su mirada era intimidante y a la vez curiosa, tal vez se preguntaría el porqué me había sonrojado. Sonreí tímida y me lleve la cerveza a la boca, mire a mi lado y no estaba ni Irene ni Jimin. Los busque con la mirada hasta que los encontré, ambos estaban en la pista bailando. Sonreí, se veían muy bien juntos. Ambos sonreían y hablaban. Me alegraba por mi amiga, tal vez en algún momento me dice que tiene una cita o algo parecido. Y conociendo a Jimin sumando la forma en la que la mirá, y su sonrisa angelical. Estaba segura que pronto abría una pareja.

Cerré los ojos y me enfoque en la voz del cantante masculino, no conocía la canción pero se me hacía algo pegadiza. Movía mi cabeza ligeramente al ritmo que marcaba la canción, era algo movida. Sonreí como tonta, ya parecía que estaba muy ebria. Pero no lo estaba ni un poco, tampoco estaba mareada. Solo estaba feliz, solo sonreía porque quería. Y no había motivos para ser feliz, porque soy feliz con lo que tengo.

EL ROBA BESOS; Jeon Jungkook [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora