Eddsworld x reader | One-shots

Amarre de amor

Sheriff Thompson x Reader Obsesiva, acosadora.

Advertencia: No se mucho sobre esta clase de brujeria, si me equivoco en algo me dicen.

Dedicado a: Todas las que me pidieron de este personajes cvrcrui.

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En un amarre de amor se implica la promesa por parte de quien lo ejecuta, que una vez realizado, nada ni nadie podrá separarlo de la persona amada.

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Un adormilado joven joven abría los ojos con pereza, la idea de vagar por las calles del pueblo buscando por algo que hacer o en que ayudar le mataba. No es que no se preocupe de su pueblo, claro que no. Simplemente, estos eran de esos tantos días en los que no quiere hacer nada, solo beber alcohol hasta estallar.

Como el buen alcohólico con problemas que es.

- Demonios, de nuevo amanecí vivo - Murmuró al aire mientras se incorporaba de la cama.

Se vistió con sus ropas típicas de Sheriff, tomó su gorro y se dispuso a salir de la casa.

¿Desayuno?, el desayuno es para perdedores obesos.

Al abrir la puerta se topó con un pequeño frasco misterioso. Con una mirada confundida, se hincó en el suelo; antes de tomar el frasco lo analizo un poco.

El envase era de vidrio, su contenido era inquietantemente rojo. Si veías más detenidamente, se podía apreciar la esquina de lo que al parecer era un fotografía.

Con aparente inquietud tomo entre sus manos el frasco y lo metió en uno de los bolsillos de su traje azul para ir en rumbo a la cantina en donde encontraría a su amigo buscando explicaciones.

Pero, siendo seguido por una atenta mirada color (c/o), con impaciencia se colocó la capucha de su capa y partió en el mismo rumbo.

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Ya en la cantina, el de parche entró con un poco de nerviosismo. Desde hace rato sentía que lo vigilaban, cada vez que volteaba encontraba a la nada misma, literal.

- ¡Hola Sheriff! Se ve bien hoy, creo que es por lo lindos que son sus dos ojos- Intento bromear el detective causando una pequeña sonrisa en el cantinero y un notable fastidio en el de parche.

Al ver que el Sheriff se sentaba en una de las banquetas, se apresuró en preparar una cerveza.

Con delicadeza, el de cuenca colocó el frasco de contenido rojo en la mesa. Causando la confusión del amante de la cola.

- ¿Y eso? ¿Acaso se te callo un diente  y decidiste coleccionar tu sangre? - Pregunto a modo de broma - Estas enfermo Thompson.

El nombrado dio una mirada de odio. El cantinero, al voltear para entregar la cerveza, quedó horrorizado. Se podía notar claramente en su expresión de rostro.

- ¿D-De donde saco o encontró eso? ¿Es de algún poblador?- Pregunto con miedo el de bigote naranja.

- Lo encontré al frente de mi puerta, fue raro. Lo abriría pero, siento que está trucado- Respondió con desinterés- Supondrá que me dirás lo que es.

Todd limpiaba un vaso de vidrio con nerviosismo, dudando en decirle que simplemente tire eso lejos. Aunque, también su Sheriff estaba metido en un lío grande, tenía que averiguar quien fue la persona y echarla.

La magia negra es algo de lo que uno no se debe confiar.

La puerta sonó  al set abierta, una joven de estatura mediana entró al lugar. Las botas de tacón bajo sonaban en los tablones de madera, llevaba una capucha negra que apenas dejaba ver su rostro.