05

286 22 6
                                    

" Tock, Tock, Tock.

-¿Quién es?-

-¡La persona que no abandona tu corazón!- "

-¡La persona que no abandona tu corazón!- "

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

JongIn había pasado toda su semana estudiantil buscando al tal O.S.H por toda la constitución, pero nunca lo encontró, preguntó a sus maestros pero se negaron a darle alguna información personal sobre sus estudiantes además no coincidía con amigos así que se negó rotundamente a tenerle que dirigir palabra a alumnos. Siempre estuvo atento entre sus compañeros de clase, jamás en su vida se había interesado tanto en el momento que los maestros pasaban lista, pero al final del día era absolutamente nada.


¿Acaso aquel estudiante era de su salón?

Era estúpido que no fuera de su salón cuando le pasó la tarea y apuntes. Llegó a pensarlo tanto hasta llegar a la conclusión que a lo mejor alguien de su salón era amigo cercano del tal O.S.H y aquel chico era tan amable que decidió pasarle la tarea a base del correo electrónico del desconocido, era lo más acertado que pudo llegar.

Así que el último día de clases no buscó más y la pasó solo, solin, solito como todos los desgraciados días de su vida aunque todavía la duda de saber quien era el chico lo comían; las clases habían pasado normales y por fin era la hora de salida. Como siempre salió por la puerta delantera y caminó a su casa con los audífonos puestos perdiéndose en su moreno mundo, los kilómetros de su casa a la escuela eran cortos por eso se tomaba el tiempo para llegar a su hogar, a veces hacia algunas paradas y satisfacía su papila gustativa con algún dulce enchilado.

JongIn amaba los dulces con chile, con doble sentido también, sentía como un placer cada que algo picoso se depositaba en su boca. Era algo raro pero común sabiendo que en Corea las comidas picosas eran las más apreciadas, y JongIn viniendo de una familia que adoraban lo picoso simplemente le encantaba.

Se detuvo cuando el semáforo se colocó en verde, miró a los alrededores con una paleta en su boca y no pudo evitar que su corazón se acelerara en el momento que reconoció el lugar; era el mismo lugar donde había visto al hermoso chico de ojos redondos por primera vez. Todo estaba tan fresco en su memoria: la caída, los diálogos compartidos, los sentimientos, la primera impresión. No creía en el amor a primera vista hasta ese día, el día que su visión respecto al amor cambió drásticamente y aunque muchas veces se reprendió por volver a sentir aquellas emociones con más intensidad, al final terminó enamorado de KyungSoo.

El amor era algo que no se podía controlar, llegaba a la puerta de tu corazón tan inesperadamente, aveces se quedaba y en otras se iba rompiendo todo a su paso.

•Ángel | 🌻 SooKai. | PAUSADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora