Vidas cruzadas [H.S]

4

''Toc, Toc''

Abril.

Cuando dije que quería aprovechar la oportunidad, no me refería precisamente a esto.

Había pasado una semana de lo ocurrido y me habían puesto a trabajar junto a los demás, prácticamente corría hacia todos lados, tratando de que todo estuviera en perfectas condiciones antes de que ellos comenzaran a cantar.

Ni siquiera había visto a Harry puberto para conversar, él aparecía por momentos y luego volvía a desaparecer. Las únicas veces que lograba entablar una conversa decente, era en las mañanas cuando nos veíamos al toparnos por algún lugar y solo para decir un estúpido ''hola''.

¿Quizá me estaba evitando?

¿Había sido algo muy loca?

¿Lo espanté?, carajo, sí. Lo había espantado y ahora él ya no quería ni verme.

Luego de que me revisara el médico hace una semana atrás, había continuado mintiendo. Finalmente aquel señor me diagnosticó amnesia temporal; Una gran mentira por cierto. Agradecía que no me hubieran hecho exámenes, era fácil de engañar a aquel médico y a Harry.

—Hey ¿puedes llevar estas cajas al camión? —interrogó un chico cuando me senté en el suelo.

¡Estaba jodidamente cansada!

Hice una mueca antes de levantarme.

—Claro —sonreí fingidamente—. ¿Qué cajas?

—Esas de ahí —apuntó hacia una esquina antes de irse.

Observé las cajas en el suelo y suspiré frustrada.

Las levanté con cuidado de no botar nada y, lo más gracioso es que apenas veía el camino. Las dos cajas estaban pesadas, tapaban mi vista y hacían que me sintiera torpe. Comencé a caminar mirando hacia un lado, notando que había una puerta en la salida, iba a dejarlas en el suelo pero alguien me las quitó de mis manos.

—Creo que necesitas ayuda.

—Gracias —le digo observándolo—. Mierda —tapé mi boca con ambas manos—. ¡Eres Louis, Louis Tomnlinson! —chillé.

Él soltó una risa.

—Deberías abrir la puerta —sugirió.

—Sí, sí...

La abrí con rapidez, viendo como él salía por ella y llegaba hasta un camión estacionado. Las dejó en el lugar indicado y sacudió sus manos antes de observarme de nuevo. No podía quitar mis ojos sorprendidos de él, era el jodido Louis.

Y sí, había visto a los demás chicos pero nunca de cerca; Incluso... estaba Zayn.

—¿Tú eres la chica nueva, verdad? —me apuntó con duda.

—Lo soy —asentí con una sonrisa—. Eres tan joven —murmuré—. Aunque sigues igual en... —me callé. Estaba volviendo actuar como loca al notar su rostro confundido.

—Harry dijo que habías perdido tu memoria —comentó con su ceño fruncido—. ¿Es verdad?

Sonreí al recordar mi gran mentira.

—Lo es, pero creo estar mejor —encogí mis hombros.

—¿Ya estás recordando?

Él volvió abrir la puerta cuando preguntó aquello.

—No —digo en una mueca—. Aún no. Por cierto... ¿Sabes dónde está tu amigo? —alcé una ceja.

—¿Harry?