Tengo 16 años y dudo, entre la vida y la muerte.
¿En qué momento es que la muerte se volvió una opción? En el instante que entendí que nada me pertenece.
No soy libre. No soy feliz.
Pero tengo lo que todos: tiempo. Segundos, minutos, horas, días, semanas, meses, años. Y aún así, yo soy quien le pertenece al tiempo no él a mí.
No tengo nada.
Sólo tengo opciones:
Seguir viviendo en el infierno, con mi padre lastimándome por el resto de mi existencia. O puedo terminar con este sufrimiento de una vez por todas.
Ya intente escapar.
Ya intente esperar.
Ya intente pedir ayuda, pero que caso le podrían hacer a un "niño malcriado".
Jamás habría creído que el suicidio era una solución. Pero le temo al miedo que siento cada mañana cuando abro mis ojos y recuerdo lo solo y perdido que estoy.
Y si no, que alguien me responda ¿Mi padre va dejar de golpearme? ¿Las noches van a dejar de ser oscuras y dolorosas? ¿Hay aunque sea una sola persona a la que le importe? ¿Hay algo por lo que valga la pena luchar?
Mis piernas todavía me sostienen, pero me siento vacío hasta el punto que ya no hay algo que salvar.
¿Sabés? Es irónico, poder sentirse lleno de vacío.
Y es aún más irónico, que quiera que alguien me salve.
Blue
ESTÁS LEYENDO
366 días ✔
Teen FictionLos diarios fueron creados para guardar secretos, para desahogar corazones rotos, para no ser leídos por nadie ajenos a ellos. Son pura y exclusivamente para quienes los escriben. "Querido diario" así comienza cada historia, en cada nueva página. S...
