366 días ✔

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Una estación floral, 2019

Durante la primavera extrañas cosas pasaron, no más de las usuales, pero imposibles de olvidar.

Orange se fue unos días y cuando volvió estaba algo sobrecargado:

—Un té helado para la señorita y los scones para llevar. Aquí tiene su cambio, que tengas un buen, buen día... ¡El agua! —Él corría por toda la cafetería, no tenía ni la más mínima idea de que le pasaba. Hasta el final de la tarde no tuve respuestas.

Estaba cerrando la puerta con llave y el pelinegro soltó como si de una bomba se tratará:

—¡Voy a ser tío! ¡Voy a ser tío! —Rebosaba de alegría, pero no duró—. Oh, por Dios, voy a ser tío. —Se sentó contra la puerta, más bien se derritió y quedo de suerte sentado.

—Es bueno, supongo. —Me senté a su lado—. ¿Por eso te fuiste una semana para ver a tu familia?

—Era el cumpleaños de mi papá y en mitad de la fiesta mi hermana anunció su embarazo, se veía taaan feliz. —Se quedó callado unos breves segundos, los suficientes para que Orange entrara en pánico—. No me malentiendas, también estoy feliz, sólo que... Es increíble, como pasa el tiempo. Un día jugábamos en la nieve y al siguiente...

—Cada uno se hace su propio camino. —Hasta el día de hoy no sé porque dije aquello.

—Exacto, exacto. Tú entiendes de qué hablo.

—Sinceramente no. No he visto a nadie de mi familia de sangre desde hace mucho tiempo —susurré, presionándome los brazos para detener el escalofrío—. No sé nada de mi hermana, nunca conocí a mi medio hermano y mis p... —no pude terminar la oración, eran cinco letras, pero en mi garganta eran dos grandes rocas que no me dejaban pasar el aire.

Orange no me hizo preguntas, se limitó a rodearme con su brazo y como un reflejo apoye mi cabeza en su hombro. Cuatro palabras se me cruzaron por la mente, realmente fue un sentimiento que no tuve miedo en verbalizar:

—Violet es mi familia.

Blue