Situaciones

10. Dulce (XiCheng)

NOTAS DE LA AUTORA: Escribo esto para mí esposa nomás porque sí ;3
Dedicado a Simbelmyne08
Esto contiene M-Preg xD
Espero que lo disfruten

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10. Dulce (XiCheng).

Aunque no lo pareciera, el sabor dulce era algo que Jiang Cheng disfrutaba mucho.

Le gustaba, por ejemplo, comer una sandía fresca en pleno verano, o pasteles lunares en los festivales de linternas.

Había un "dulce" en particular que era muy de su agrado: aquel helado que sólo se podía conseguir en la Ciudad de Caiyi, en Gusu. Y había una razón para ello.

Jiang Cheng podía recordarlo claramente en su memoria.

“En aquel entonces era sólo un pequeño de seis años. Su hermano marcial aún no había llegado a su vida, por lo cual, la mayor parte del tiempo la pasaba con su hermana o con sus perros.

A decir verdad era un niño bastante inocente, aunque le costaba mucho trabajo entablar relaciones con las personas debido a su personalidad. Su madre lo había criado de forma muy estricta por lo cual le resulta difícil saber qué tanto podía abrirse con las personas y prefería no hacerlo.

Ese día estaba sentado en el salón principal, escuchando a su padre con atención.

—A-Li, A-Cheng, hoy tendremos un invitado importante –les dijo a los niños. YanLi, de once años de edad, le sonrió.

—¿De quién se trata, padre? –preguntó con curiosidad, esperando que quizá se tratase de madame Jin y su hijo.

—El Líder de Secta Lan, QingHen-Jun, vendrá a hablar conmigo sobre una colaboración entre nuestras sectas. Al parecer hay un gouhl difícil de eliminar en su territorio y quiere aprovechar la oportunidad para hacer lazos –respondió–. Sus hijos vendrán con él.

—¿Son a quienes llaman los "Jades de Lan"? –preguntó YanLi nuevamente.

—Mn –respondió Jiang FengMian con una sonrisa–. Lan XiChen, el mayor, tiene la edad de A-Li; y Lan WangJi, el menor, es casi de tu edad A-Cheng –comentó mirando el pequeño, que se había mantenido en silencio todo el rato–. Me gustaría que ambos les hagan compañía cuando lleguen –pidió.

—Está bien, padre –respondió YanLi. Jiang Cheng se mantuvo en silencio.

—Muchas gracias –dijo FengMian y se puso de pie–. Iré a prepararme para recibirlos –comentó antes de salir.

—A-Cheng –llamó YanLi al ver a su hermano tan callado, sentado con la espalda recta y mirando al suelo–. ¿Qué sucede?

—Escuché a Madre hablar sobre Lan WangJi una vez –dijo–. Ella dice que es un discípulo modelo y que lo mínimo a lo que todos podemos aspirar es a ser como él... Hermana, no quiero estar con él toda la tarde para que Madre termine comparándome con él todo un mes... –YanLi sonrió con comprensión.

—Yo me quedaré con ellos y les diré que tuviste que hacerte cargo de los perros –Jiang Cheng alzó la mirada y le sonrió.