Dragon Ball: Ultraverse

Capítulo 14 - Entrenando con Kaiō-sama

Opening 1 - Dragon Ball Z - Chala Head Chala

Krilin, Yamcha, Ten Shin Han y Chaouz habían pasado dos días desde que lucharon contra las Saiyan y estas entraron junto a Kakarotto a la habitación del tiempo, el primer día, ellos le pidieron al viejo Kami que le enseñará todo lo que le enseñó a Kakarotto, pero este les dijo que él no le enseñó nada, Kakarotto todo lo aprendió por si mismo en el templo y solo necesito algunos consejos de él, algunas lecciones de Mr. Popo y el resto lo logro por si solo, solo quería de los elementos necesarios para hacerse más fuerte, un ejemplo era la habitación del tiempo, su lugar favorito, así que los guerreros le pidieron Kakarotto que les enseñará todo lo que pudiera y los hiciera más fuertes, pero Mr. Popo les dijo que debían conocerse a si mismos si querían hacerse más fuertes para conocer sus debilidades y su poder, y para eso Mr. Popo quiso mostrarles lo que era enfrentarse a enemigos más fuertes como los Saiyan, para eso usaron una habitación con un enorme péndulo donde irían al pasado, este los llevo al pasado en el planeta de los Saiyan donde se enfrentaron a dos de estos antiguos Saiyan.
Uno a uno fueron cayendo, a pesar de que usaron todo su poder y sus mejores técnicas, pero aun así no pudieron vencerlos y fueron asesinados, pero solo había sido su mente la que había viajado al pasado después de despertar de nuevo en el templo, Kami-sama les dijo que esos Saiyan que enfrentaron, a pesar de ser antiguos, no se comparaban con Kakarotto, eran incluso muy débiles.
Al día siguiente comenzaron su duro entrenamiento donde Kami-sama les dio ropa muy pesada para que entrenaran, incluso el mismo Yajirobe vino para entrenar, al ser este muy poderoso, todos tenían que enfrentarse a él, pero fue cuando de repente sintieron un ki muy poderoso junto a otros dos que eran menos fuertes que el primero dentro del templo, escucharon pasos y del templo salieron las figuras de Kakarotto, Kale y Caulifla.
Krilin, Ten Shin Han, Yamcha, Chaouz y Yajirobe miraron sorprendidos al trío de Saiyans, al igual que el viejo Kami y Mr. Popo, los primeros se habían sorprendido primero por el aumento de poder de los tres Saiyan, pero luego su sorpresa cambio al ver a una de las Saiyan, Caulifla se veía un poco más alta al igual que Kale y un poco más musculosa, pero lo que los sorprendió era el pequeño bebe de casi un año en brazos de esta, el viejo Kami miró al bebé, luego a Caulifla y luego a Kakarotto.
- Hola a todos - Dijo Kakarotto mientras rodeaba los hombros de las dos mujeres Saiyan que sonreían ante los guerreros, el viejo Kami y Mr. Popo.
- K-Kakarotto, ¿Qué hace un bebé con ustedes y de donde lo sacaron? - Preguntó Krilin al ver bebé en brazos de Caulifla mientras Kakarotto sonreía.
- Pues, ¿De donde crees, Krilin? Es mi hijo y de Caulifla - Dijo Kakarotto mientras tomaba al niño que se había despertado y miraba a los presentes que reaccionaron asombrados ya asimilando lo dicho por el Saiyan.
- ¿QUEEEEEEE? - Exclamaron todos impactados mientras Kakarotto sonreía ante la reacción, luego les explicó que a pesar de que habían pasado dos días en el exterior, dentro de la habitación del tiempo pasaron dos años y bueno las cosas se dieron con la Saiyan y ahora podía considerarse estar casados, aunque no era oficial, lo que después sorprendió fue lo que dijo Caulifla.
- Si, no solo yo soy la mujer de Kakarotto_kun, sino también Kale, ella y yo decidimos compartirlo, así nosotras nunca nos separaremos, lo mejor fue la noche en que Kale se entregó a él y estuve ahí para animarla jejeje - Dijo sonriendo mientras veía a la sonrojada Kale que molesta le gritó.
- ¡Caulifla! - Exclamó la Saiyan avergonzada mientras los guerreros estaban avergonzados, aunque estaban envidiosos de Kakarotto, sobre todo Krilin y Yamcha ya que logró enamorar a esa mujeres tan hermosas, pero lo interesante era que los tres eran Saiyan, así que eran perfectos.
- Es increíble que hayas entrado en la habitación del tiempo hace dos días y salgas con un hijo, sin duda la pasaste muy bien ahí dentro, ¿eh? - Dijo Krilin sonriéndole a Kakarotto mientras lo tocaba con el codo en el pecho, pero de inmediato recibió un golpe en la cabeza por parte de Caulifla que lo miraba furiosa.
- Eso no es de tu incumbencia, idiota, solo nosotros podemos hablar de eso, no te debe importar las veces que Kakarotto nos cojio hasta preñarme a mi o cuantas veces se cojio a Kale... - Dijo Caulifla, pero Kale le tapó la boca mientras se sonrojaba por lo que decía su amiga, Krilin se sobo la cabeza mientras veía al Saiyan que sonreía, los demás aún estaban sorprendidos al ver a Kakarotto con un hijo, pero bueno suponían que era algo que iba a pasar normalmente.
- Bien, quisiera ir a mostrarle a mamá y al abuelo nuestro hijo, sin duda se pondrán muy felices - Dijo Kakarotto mientras las mujeres Saiyan asentían, caminaron listos para irse, pero ante Kakarotto se giró hacía el viejo Kami-sama - Por cierto, viejo Kami, esperó hayas decidido decirme sobre aquel sujeto que puede entrenarme en el otro mundo, quisiera saber de él - Dijo Kakarotto sonriendo mientras el viejo Kami se ponía nervioso, no quería ver a Enma Daiō-sama, seguro se molestaría por la petición de Kakarotto.
- Oye, Kakarotto_kun, ¿Cómo es eso que vas a ir a entrenar al otro mundo? ¿Acaso no piensas entrenar con nosotras? - Preguntó Caulifla algo molesta mientras miraba a su marido con el cejo fruncido.
- Ustedes entrenaran, pero no lo harán conmigo, quiero que vengan aquí con mi madre a entrenar, ella se puede volver igual de fuerte a ustedes, además si sucede lo que pienso, ella sin duda puede ser se ayuda - Dijo Kakarotto sonriendo divertido cosa que confundió a las Saiyan a los demás que lo estaban escuchando, sin más que decir los tres Saiyan se fueron volando abajo fijando su rumbo a Capsule Corp. Donde una Gine y un Son Gohan les esperaba una gran sorpresa cuando los tres Saiyan llegaran.
Las mujeres volaban a gran velocidad sin alejarse mucho de Kakarotto que llevaba a su hijo, después de unos minutos las mujeres se posaron junto a él sonriendo.
- ¡Es increíble! Después de pasar tanto tiempo en esa habitación, puedo moverme muy rápido ahora aquí en el exterior - Dijo Caulifla mientras sonreía volando mientras Kale sonreía con su amiga, luego Caulifla le preguntó al Saiyan - Kakarotto_kun, ¿Cuál es tú interés en que tu madre entrene con nosotras? No es mala idea, pero creo que tienes algo en mente - Dijo la Saiyan mientras Kakarotto que estaba sonriéndole a su hijo que veía todo a su alrededor asombrado, el Saiyan dijo.
- Si hay algo que sé muy bien es que mi madre es muy temperamental y es poderosa si se lo propone, pero según dijo ella, Raditz por grande y perverso que sea, él le teme a mi madre - Dijo Kakarotto sonriendo malicioso mientras las Saiyan lo veían sorprendido.
- ¿Quieres que tu madre sea la que le de una paliza a tu hermano para que entre en razón? - Preguntó Kale asombrada mientras Caulifla sonreía divertida.
- Será muy interesante ver la reacción de Raditz al ver a mamá cuando él llegue a la Tierra – Dijo el Saiyan mientras seguían volando.
Kakarotto junto sus mujeres e hijo arribaron a Capsule Corp. Y al llamar por el teléfono fueron recibidos por el Dr. Brift que los recibió alegremente como siempre, este los llevó a ver Gine y a Son Gohan, al darse cuenta que Kakarotto cargaba un bebé le preguntó si ahora cuidaba niños, a lo que el Saiyan dijo que era hijo suyo y de Caulifla, el doctor estaba sorprendido ya que tan solo hace pocos meses había visto a los tres Saiyans, pero ahora volvían y con un hijo, lo dejo pasar mientras llegaban donde estaba Gine, esta estaba en una enorme estructura esférica de color negro y blanco, el Dr. Brift dijo que es uno de los más grandes avances que estaban desarrollando, era una nave espacial la cuál podría viajar a grandes velocidades para viajar en poco tiempo, habían tenido que usar elementos de las naves tanto en la que vinieron a la tierra Kakarotto y Gine, además de las Saiyan, estas recordaron sus cápsulas y dijeron que se habían olvidado de ellas.
El Dr. Brift dijo que apenas la estaban terminando desarrollar, pero que en un par de años la nave estará lista, es más la nave tendría un generador de gravedad que podría llegar a las 100 veces que el de la tierra, ya que según Gine, la gravedad que tenía el planeta Vegeta era de 10 veces que el de la tierra, al entrar a la nave vieron a Gine arreglando algunas cosas, al verla, Kakarotto la saludo.
- Hola, mamá - Dijo el Saiyan mientras sostenía a su hijo, la mujer alzó la mirada y vio a su hijo y sonrió, pero al ver al bebé en sus brazos, abrió los ojos muy sorprendida y gritó de emoción mientras se acercaba a su hijo y tomaba en brazos al pequeño que al ver la alegre cara de la Saiyan sonrió mientras la mujer le hacía muecas graciosas, fue cuando dijo ella.
- Por cierto, ¿Quién de ustedes es la madre? - Preguntó a las otras Saiyan, Caulifla sonrió y alzó la mano - Vaya, sin duda no tardaste en caer en los encantos de mi hijo, ahora, ¿Cómo se llama este hermoso bebé? - Preguntó mientras abrazaba al bebé, Kakarotto sonrió y dijo.
- Su nombre es Gohan, en honor al abuelo - Dijo mientras Gine sonreía, eso sin duda le gustará a Son Gohan.
Salieron de la nave y fueron a buscar al abuelo Gohan, al encontrarlo no pudo evitar soltar una lágrima de emoción al conocer al hijo de su nieto y más aún cuando le dijeron que le habían puesto su nombre al niño, pasaron un rato felices, incluso la esposa del Dr. Brift trajo bocadillos para festejar el momento, minutos después llegó Bulma que se sorprendió al ver a Kakarotto y a las mujeres Saiyan, mas aún cuando supo que Kakarotto había tenido un hijo con una de ellas, el Saiyan explicó que al entrar a la habitación del tiempo, allí dentro pasaron dos años, por eso el niño tenía poco más de un año, ahora por fin entendieron como era posible eso, ahora Bulma no pudo evitar sentir envidia de Caulifla, ella le dio un hijo a Kakarotto y ahora era suyo para siempre.
Después de pasar un rato agradable, Kakarotto le dijo a su madre su idea de entrenar con Kale y Caulifla, además de pasar tiempo con ellas y el bebé, mientras tanto ella se hacía más fuerte, Kakarotto le dijo que cabía la posibilidad de que su hermano Raditz viniera a la tierra, no sé sabia cuando, pero podría ser en cualquier momento, pero eso era algo que Kakarotto quería averiguar.
Usando su estatus de Kami-sama, podría ir al otro mundo y buscar a alguien que supiera y además alguien poderoso que lo entrenará, así que iría para hacerse más poderoso y si tendría que vencer a los otros Saiyan que venían al planeta lo haría, pero con Raditz sería diferente, él se enfrentaría a su madre para hacerlo entrar en razón, sería muy triste que el mismo Kakarotto tuviera que matar a su hermano, así que mejor su madre lo convencería por medio  de golpes.
Así que ya estaba decidido, Gine se iría entrenar con Caulifla y Kale, pero se irían en un mes para lograr terminar algunas cosas, además que alargarían el viaje para aprovechar y pasar tiempo las tres con el bebé, luego llegarían a la torre Karin, subirían y luego irían al templo sagrado, les tomaría quizás otros seis meses, entrenarían otros 6 meses antes de entrar a la habitación del tiempo por otros dos días mientras Kakarotto se iba a entrenar al otro mundo.
Así que sin más, Kakarotto se despidió de su madre y sus mujeres, cosa que sorprendió a todos, en especial a Bulma, y luego del bebé que se puso triste al ver a su padre irse, luego de que el Saiyan se fue, Gine preguntó sobre que como era eso que eran sus mujeres a lo que Caulifla dijo.
- Bueno, en la habitación del tiempo, no solo me hizo su mujer sino también a Kale, ya que las dos decidimos compartirlo, aunque yo tuve más veces con él y por eso me preño tan rápido jajaja - Dijo Caulifla mientras reía y Kale se ponía roja al igual que Bulma y su madre, Son Gohan y el Dr. Brift pensaron que el Saiyan era muy afortunado o debían tenerle lástima y Gine sonreía ya que le caía muy bien esa chica.
Kakarotto llegó rápidamente al templo sagrado y llegó a hablar con el viejo Kami, el Saiyan le pidió que lo llevará al otro mundo para entrenar y también para saber algunas cosas, pero el viejo Kami aún estaba dudoso de llevarlo así que aceptó aunque antes que nada le dijo a Kakarotto.
– Kakarotto, el lugar a donde iremos es el castillo de Enma Daiō-sama, es un dios muy importante, así que debes comportarte ante él, ¿de acuerdo? – Preguntó el viejo Kami miraba seriamente mientras Kakarotto lo veía y asentía, luego el viejo Kami tocó el hombro de Kakarotto y desaparecieron para minutos aparecer en el otro mundo, más específicamente en el castillo de Enma Daiō-sama, ante Kakarotto estaba un inmenso escritorio y tras este se encontraba un enorme sujeto con la aparecía de un ogro, vestía un traje mientras veía a los recién llegados confundido y dijo.
– Ah, viejo Kami, ¿Qué haces aquí con el joven Kami? – Preguntó el enorme ser mientras el viejo Kami le hacía una reverencia y dijo.
– Es un gusto verlo, Enma Daiō-sama, traje a mi sucesor y nuevo Kami-sama ya que este esta interesado en conocer a Kaiō-sama, para entrenar con él, a pesar de ser el dios de la Tierra es alguien que le gusta pelear y busca hacerse más fuerte, es el protector de la Tierra después de todo - Dijo el viejo Kami mientras miraba al enorme ogro que miró a Kakarotto mientras este lo observaba curioso.
– Supongo que sabes de la jerarquía de dioses, para comenzar esta el Kami, dios y protector de la Tierra, luego viene los Kaiōs, son 4, el norte, el sur, este y oeste, somos parte de la zona norte, luego de estos sigue el Gran Kaiō, yo estoy al mismo nivel que los Kaiōs, yo decido quien va al paraíso y quien va al infierno - Dijo el enorme ogro mientras Kakarotto lo miraba y decía.
– Oye, no te hace eso a ti el guardián de la puerta al otro mundo – Dijo el Saiyan mientras el viejo Kami comenzó a sudar y el enorme ogro lo miró fijamente y muy serio.
– ¿Así que solo soy un guardián de la puerta al otro mundo? Quizás debería enviarte al infierno cuando mueras, chico - Dijo el enorme ogro molesto mientras Kakarotto solo alzaba lo hombros y decía.
– A dónde sea que vaya me haré más poderoso, pero no moriré hasta hacerlo y acabar con el ser que destruyó mi planeta - Dijo el Saiyan seriamente mientras Enma Daiō-sama lo veía, este chico tenía una férrea determinación y miró su libro, Kakarotto, un chico que solo le importaba hacer el bien, acabo con la Patrulla Roja, venció a Piccolo Daimaō y aceptó ser el nuevo Kami solo para protegerlo de posibles amenazas.
– ¿Así que quieres ir a entrenar con Kaiō-sama? – Preguntó el ogro mientras el Saiyan asentía – Bien, para ir al hogar de Kaiō-sama debes ir por esa puerta - Dijo señalando una puerta detrás de él – Ahí alguien te llevará al comienzo del camino de la serpiente, debes ir por este camino para llegar con Kaiō-sama, así que adelante - Dijo el hombre mientras el Saiyan asintió y se giró al viejo Kami y le dijo que ayudará a entrenar a sus esposas y madre, pero sobre todo que cuidará a su hijo, y sin más se fue dejando a un viejo Kami desconcertado, pero Enma Daiō-sama quiso saber algo – Oye, viejo Kami, ¿Escuche bien? ¿Ése chico tiene más de una esposa? – Preguntó el ogro a lo que el viejo Kami nervioso asintió mientras Enma Daiō-sama pensaba que sin duda ese chico era muy interesante y desde ahora su héroe, pero el viejo Kami se quedó pensativo, a su cabeza vino por lo que pasaría de nuevo al soportar a las mujeres de Kakarotto, más aún con el hijo de este y su madre Gine, de repente se vio sacado de sus pensamientos por un Enma Daiō-sama molesto que le dijo que dejará de hablar y se largará que era un estorbo, el viejo Kami disculpándose, se fue.
Mientras tanto, Kakarotto iba en un auto donde un ogro de tamaño normal lo conducía por un camino donde a los lados había solo nubes doradas, fue un largo camino hasta que llegó al inicio del camino de la serpiente ahí estaba la cabeza de una enorme serpiente con su boca abierta y sobre el larguísimo cuerpo de la serpiente había un camino de al menos dos metros y medio de ancho, pero Kakarotto desde la cabeza vio a lo lejos por donde se perdía el camino a lo lejos, preguntó que tan largo era ese camino, a lo que el ogro amablemente dijo que tenía de largo 1 millón de kilómetros, esto asombro al Saiyan y sin más comenzó a dio inicio a su carrera por el largo camino, pero se lanzó volando y saltando a gran velocidad avanzando a gran velocidad ante el asombro del ogro que decía que eso no era justo.
Kakarotto avanzaba rápidamente disfrutando de lo largo que era para entrenar corría a gran velocidad saltando y volando, el camino no era recto, estaba lleno de zigzags, sube y bajas, espirales, tirabuzones y más que Kakarotto tenía que recorrer, no paso nada en especial mientras avanzaba, salvo que tenía hambre, así que se comió algunas nubes que lo satisficieron mucho para seguir su camino, por una semana estuvo corriendo por el camino de la serpiente donde encontró un castillo junto al camino de la serpiente, cuando intento entrar, cayó por una rampa y terminó ante la princesa serpiente, una hermosa mujer  de 25-30 años de edad, llevaba unos grandes pendientes color violeta y una boa de piel blanca en su cuello, utilizaba un Cheongsam de piel de serpiente y botas de tacón alto color orquídea. Su piel era turquesa y su cabello era naranja, la mujer comenzó a seducirlo y convencerlo para que se quedará, hizo que tomará un baño en aguas termales muy calientes que casi parecía lava, el Saiyan lo disfrutó mucho, luego la mujer intentó dormirlo con comida, era muy extraña, pero delicioso y Kakarotto comió muchísimo, a pesar de que la comida tenía hierbas para dormirlo, estas no funcionaban con él, a diferencia de las que probó en la habitación del tiempo que hizo tener sexo como animales con Kale y todo había sido planeado por Caulifla.
La princesa serpiente y sus ayudantes intentaron todo para que se quedará, pero Kakarotto siempre decía que no, finalmente la princesa mostró su verdadera naturaleza de fría, manipuladora y con ansias de comérselo, pero Kakarotto dijo.
– Al fin se muestran como son, vamos, quiero divertirme - Dijo el Saiyan y comenzó a salir del castillo que finalmente fue destruido por Kakarotto mientras la princesa serpiente se transformaba en una enorme serpiente, Kakarotto sin mas se enfrentó a ella golpeándola y finalmente hacer que se enredara ella misma y con un fuerte golpe mandó a la enorme serpiente para caer por las nubes doradas y perdiéndose así cayendo al infierno, Kakarotto sonrió y siguió su camino rápidamente.
Finalmente, después le había tomado un mes, llegó al final del camino de la serpiente, a primera vista no vio nada, pero a lo alto vio un pequeño planeta y saltó para llegar a este, pero en el aire se vio atraído por la gran fuerza de gravedad, Kakarotto se dio cuenta que a pesar de ser un planeta pequeño tenía una fuerte fuerza de gravedad, en la habitación del tiempo, allí era el doble de la Tierra, pero se podía aumentar, la gravedad de aquel pequeño planeta era quizás diez veces que de la tierra, cayó pesadamente de pie mientras veía el lugar, era un planeta lleno de pasto verde, con árboles aquí allá, en el centro del planeta había una casa incluso con fuente para el agua, había un solo camino de piedra blanca que rodeaba el planeta y un auto rojo.
Kakarotto camino tranquilamente por el lugar hasta que encontró a un hombre frente a él y junto a este un pequeño simio que lo hizo sonreír. Kakarotto miró a la persona frente a él, el hombre era de piel azul celeste, era de baja estatura, de constitución obesa, llevaba gafas de sol Teashade, y tiene un par de antenas de grillo, usaba unas ropas de color rojo y azul debajo de una túnica negra donde en el pecho tenía el kanji de Kaiō, lo observo y dijo.
- Kaiō-sama, soy el Kami-sama de la Tierra, he venido por dos asuntos de los que necesito usted me ayude - Dijo Kakarotto, el Kaiō lo vio con el ceño fruncido detrás de sus gafas.
- Dime, muchacho, ¿Qué es lo que quieres? - Preguntó el Kaiō mientras Kakarotto lo veía.
- Primero, necesito saber de posibles amenazas al planeta tierra, es por que quiero saber sobre unos sujetos llamados Saiyan, quiero saber si son una amenaza o no y cuando llegaran, uno de ellos es alguien llamado Raditz - Dijo Kakarotto seriamente mientras el Kaiō lo veía, eso le causó mucha curiosidad, venir hasta ahí para preguntarle eso, solo para saber si la Tierra corre peligro, le agrado el sujeto frente a él.
- Bueno, puedo ayudarte en eso, a ver, veamos - Dijo el Kaiō mientras colocaba sus antenas frente a él se concentró un momento, podía ver en el espacio exterior, los planetas, estrellas y galaxias, fue cuando llego a un planeta y allí encontró al sujeto llamado Raditz junto a otros dos sujetos, vio en ellos la maldad y sus perversas ambiciones de destruir planetas y hacerse más fuertes, escuchó como conversaban sobre ir a buscar a la tierra a Kakarotto para que se una a ellos, también buscar las esferas del dragón que lea permitiría hacerse invencibles, el Kaio dijo finalmente - Encontré a ese sujeto llamado Raditz, esta junto a otros dos Saiyan, pero a diferencia del primero, los otros dos son muchísimo más poderosos, más terribles, al parecer, tienen pensado venir a la Tierra buscando a otro Saiyan y se una a ellos, también buscan las esferas del dragón, ellos llegarán en aproximadamente 10 meses, es obvio que ellos vendrán a acabar con los terrícolas y vender el planeta, así ha sido siempre los Saiyan, crueles y terribles - Dijo el Kaiō mientras Kakarotto lo veía fijamente y preguntó.
- ¿Qué sabes tu de los Saiyan? - Preguntó el Saiyan mientras el Kaiō lo veía y conservando su seriedad dijo.
- Hace miles de años, habitaban dos razas en el planeta Vegeta, una era los Saiyan y la otra los Tsufuru, la gravedad de ese planeta era como mi planeta, los Tsufuru eran amigables y del tamaño de los humanos, eran la mitad del tamaño de los Saiyan de aquel entonces, eran muy inteligentes, su cultura y tecnología progresaba más rápido que la otra raza, por otro lado, los Saiyan eran mucho menos, eran de constitución mas gruesa, era una familia de guerreros con poderes increíbles, lo más destacado de los Saiyan era su cola, eran sin duda peleadores por naturaleza, un día, esos guerreros demostraron sus poderes y comenzaron atacar a los Tsufuru, estos con ayuda de armas muy avanzadas se enfrentaron a ellos, pero los Saiyan, a pesar de que eran muy pocos, eran más poderosos que esas armas y les gano terreno a los Tsufuru, pero su ventaja llegaba cuando cada 8 años, aparecía la luna llena, al ver la luna, ellos se transformaban en monos gigantes, esto fue un gran misterio para los Tsufuru, esto causo un gran daño y perdieron la batalla, así fue como el poder de los Saiyan fue aumentando y los Tsufuru se fueron extinguiendo y los Saiyan al final se quedaron con el planeta Vegeta, después de eso, los Saiyan tuvieron batallas en el espacio exterior, pero su cultura y su tecnología se redujo en su batalla contra los Tsufuru, los Saiyan se dieron cuenta que no podían ir muy lejos en busca de batallas, por eso se aliaron con otros alienígenas para obtener los mejores armamentos, naves espaciales y dinero, cosa que les sirvieron para sus peleas, a cambio de eso, les entregaría los planetas ya conquistados para usarlos como lugares para vivir, los Saiyan fueron progresando rápidamente, y su poder de pelea iba aumentando cada vez más, ellos tenían un plan en el que consistían en mandar bebés Saiyan para enviarlos a otros planetas y para cuando creciera acabaran con todos sus habitantes, así es como vivían los Saiyan, fue cuando el dios de ese planeta apareció, las acciones de los Saiyan eran un caos, él atrajo con sus enorme poder meteoros gigantescos para destruir el planeta Vegeta, fueron muy pocos los Saiyan que sobrevivieron - Dijo el Kaiō mientras miro a Kakarotto que lo miraba fijamente y sonrió burlón, cosa que desconcertó al Kaiō, el Saiyan dijo.
- Tu información esta completamente errada, eso que dices no es lo que en verdad paso - Dijo Kakarotto mientras el Kaiō lo veía sorprendido, ¿Acaso lo había un mentiroso? - Lo que dices no fue lo que paso, para empezar, los Saiyan antes vivían en el planeta Sadala, pero fue destruido por la guerra civil, o eso dicen, pero muchos dicen que los Saiyan fueron traicionados por un grupo de su misma raza y los llevo casi al exterminio, pero algunos lograron escapar, estos llegaron al planeta de los Tsufuru, estos al principio ayudaron a los Saiyan, pero los Tsufuru los veían como posibles esclavos, eso era algo que el orgullo Saiyan no permitiría, por eso se rebelaron contra los Tsufuru y los exterminaron, los Saiyan vivirían tranquilos en ese nuevo planeta, pero fue culpa de las ambiciones de un Saiyan que destacó entre ellos, se proclamó Rey de los Saiyan y el nombre del planeta fue cambiado a planeta Vegeta por nombre de ese rey, los Saiyan eran usados por este Rey como sus soldados, el rey quería conquistar planetas y obtener tecnología, por eso mandaba a soldados para que consiguieran armamento, tecnología moderna y dinero, todo por la ambición de ese Saiyan llamado Vegeta y como él hubieron otros reyes llamados así, hasta que el último que hubo se alió con un maldito tirano, ese sujeto le tenía miedo a los Saiyan, nadie sabía por que, pero solo sabían que les temía a los Saiyan, por eso fue que él destruyó al planeta Vegeta, no fue una lluvia de meteoros como dices - Dijo Kakarotto mientras el Kaiō lo miraba sorprendido y finalmente dijo.
- Si eso es cierto, ¿Cómo lo sabes? - Preguntó el Kaiō mientras Kakarotto sonreía.
- Me lo contó mi madre logrando saber toda la historia de los Saiyan y habiendo logrado sobrevivir junto a su hijo a aquella explosión, yo soy Kakarotto, el Saiyan que ellos buscan - Dijo Kakarotto impactando al Kaiō con aquella revelación, esto era increíble, estaba ante un superviviente del planeta Vegeta, además que ha peleado todo esta tiempo para salvarlo, eso quería decir que algunos Saiyan no eran terribles como parecían - Mi padre sacrificó su vida por salvarnos a mi y a mi madre Gine, él tenía la sensación de que algo mal ocurriría, por eso nos metió a mi y a mi madre en una nave después de enfrentarse a algunos soldados que  los querían atrapar por lo que hacían, finalmente logramos escapar mientras mi padre se quedaba y moría en aquél planeta, todo por culpa de un tirano llamado Freezer, él fue el que destruyó al planeta Vegeta junto con los Saiyan que había allí, incluyendo mi padre - Dijo Kakarotto furioso mientras contenía su furia, el Kaiō lo veía y recordó que el Kami de la tierra que se reveló ahora como un Saiyan criado en la Tierra y ahora su protector había venido por dos cosas, la primera era saber de las amenazas que pudieran haber, pero había otra razón, así que le preguntó.
- Al parecer, tu determinación es muy grande, sin duda tu antecesor te eligió bien para ser Kami-sama – Dijo el Kaiō mientras Kakarotto pensaba y dijo.
- Kaiō-sama, ¿crees que hay una forma de avisarle a mis amigos de la llegada de los Saiyan en 10 meses, ellos deben de saberlo para que se hagan mas fuertes – Dijo Kakarotto a lo que Kaiō-sama lo vio y dijo seriamente.
- Claro, solo debes tocar mi hombro, podrás comunicarte mentalmente con ellos, adelante – Dijo Kaiō-sama mientras Kakarotto le tocaba el hombro, fue cuando sintió el contacto y el ki de todos, su madre, sus dos mujeres, el viejo Kami, Mr. Popo, los demás guerreros incluso el mismo Piccolo que sintieron y escucharon la voz de Kakarotto en sus mentes y dijo.
- Hola a todos, soy Kakarotto, les hablo desde el otro mundo con ayuda de Kaiō-sama, he venido hasta aquí usando mi título de Kami-sama sin tener que morir, les habló para decirles, incluso a ti Piccolo, en 10 meses llegarán a la Tierra tres enemigos muy fuertes que quieren matar a todos los terrícolas y vender el planeta,, estos seres son Saiyans como yo, uno de ellos es mi hermano mayor, Raditz, pero no es este él el importante, sino los otros dos, ellos son muchísimo mas poderosos, así que les advierto que deben entrenarse muy duro así como yo, deben ser capaces de enfrentarlo… Mamá, Kale, Caulifla quiero que se entrenen en caso de que deban luchar con ellos, pero mamá quiero que seas tú la que  enfrentes a Raditz, debes hacerle entender a mi hermano que lo que esta haciendo esta mal, incluso si tienes que darle una paliza – Dijo Kakarotto mentalmente a sus amigos, todos se sorprendieron al saber que otros Saiyan incluyendo el hermano de Kakarotto vendrían a causar daño, mientras tanto, Gine asintió a las palabras de su hijo, si tenía que hacerlo para que su hijo mayor entre en razón lo haría, por su parte, Piccolo sonrió, no entendía por que, pero parecía que Kakarotto seguía siendo ingenuo al pensar en él como un aliado, pero en realidad sentía curiosidad por estos sujetos y si acababa con ellos, podría enfrentarse a Kakarotto de nuevo y esta vez vencerlo.
Mientras tanto, en el planeta de Kaiō-sama, Kakarotto se despedía de sus amigos diciéndoles que los vería en 10 meses y esperaba que se hicieran más fuertes, luego agradeció a Kaiō-sama y este lo vio y dijo.
- Tu dijiste, que venías aquí, por dos razones, ya me dijiste la primera, ¿Cuál es segunda? - Preguntó Kaiō-sama mientras el Saiyan lo veían.
- Quiero que me entrenes en artes marciales, quiero que me enseñes tus técnicas más increíbles, quiero que me hagas más poderoso para así salvar a la tierra de cualquier amenaza, a eso he venido, Kaiō-sama - Dijo Kakarotto mientras el Kaiō lo observaba seriamente, veía gran determinación, fuerza de voluntad y un poder increíble, pensó que era posible que este sujeto podría aprender a dominar su técnica más poderosa, así que aceptó y dijo.
- De acuerdo, te entrenare, pero debo decirte que mi entrenamiento será muy duro, deberás sobrepasar tus límites, así que, ¿estas listo, muchacho? - Preguntó el Kaiō mientras el Saiyan asentía - Bien, si quieres que te entrene, primero debes acostumbrarte a la gravedad de este planeta, así que debes atrapar a Bubbles - Dijo Kaiō-sama mientras el simio comenzó a correr y Kaiō-sama le daba la espalda, pero frente a él apareció Kakarotto sosteniendo al simio haciendo a Kaiō mirar atrás a donde estaba segundos antes y luego adelante mientras el pobre Bubbles alzaba las manos como diciendo "no tengo idea de que pasó" mientras el Saiyan comenzó a jugar con el simio divirtiéndose ambos haciéndose amigos, pero luego Kakarotto dijo.
- ¿Solo eso me harás hacer? Porqué eso fue muy fácil, puedes enseñarme algo mejor - Dijo el Saiyan mientras Kaiō se ponía serio sin importarle la falta de respeto de Kakarotto, pero en ese momento, apareciendo en una esfera brillante veloz llegó una especie de saltamontes, el bicho comenzó a decir que era una falta de respeto la manera en que se dirigía al gran Kaiō-sama, de inmediato Kaiō-sama, al ver al insecto llamado Gregory dijo que su siguiente prueba sería darle un golpe a Gregory con un enorme mazo, el Saiyan dijo que no quería lastimar al insecto a lo que Gregory comenzó a retarlo a que lo golpeara ya que él era muy resistente, Kakarotto usó el maso para golpearlo, pero fallo, esto hizo a Kaiō pensar que eso si le tomará más tiempo y se giró dándoles la espalda antes de oírlos al caminar a su casa diciendo.
- Eres un inútil - Dijo Gregory.
- No te quiero matar, grillito - Dijo Kakarotto.
- No soy como tu, soy todo resistencia, anda dame con fuerza... ¿eh? ¿A donde se fue? ¿Cómo diablos estas detrás de mi? ....¡¡AAAAHHHH!! - Gritó Gregory y antes de que Kaiō se girara a ver que paso sintió como todo el planeta se estremeció y cuando se dio la vuelta vio a Kakarotto sosteniendo el martillo en el aire mientras hay un agujero que atravesaba el planeta de lado a lado y este sólo dijo.
- ¿Que? Él me dijo que le diera con fuerza y si, aguanto, atravesó el planeta sin hacerse puré - Dijo Kakarotto mientras veía el agujero sonriendo al igual que Bubbles, preguntándose donde estaba el pequeño insecto, Kaiō-sama estaba sorprendido por lo que veía, ese sujeto había atrapado a Bubbles en segundos y había logrado golpear a Gregory demostrando una gran fuerza.
Al ver lo que paso, Kaiō-sama estaba más emocionado, este sujeto había dominado muy fácil la gravedad de su planeta y tenía un poder y fuerza increíble, solo tenía 8 meses para que Kakarotto entrenará y aprendiera lo que él le iba a enseñar y pensó.
- Estoy seguro que Kakarotto podrá aprender mi técnica especial, el Kaiō-ken, pero él tiene una fuerza y una gran determinación que no sabría hasta que nivel podría llegar, el Kaiō-ken es la técnica que tanto había soñado y que nunca fui capaz de dominar, además de esa técnica mortal, pero, ¿Qué tan lejos lo llevaría Kakarotto? - Pensó el Kaiō mientras Kakarotto se le acercaba y decía.
- Oye, Kaiō-sama, eso es todo lo que me vas a enseñar - Dijo Kakarotto mientras el Kaiō dijo con seriedad.
- Supongo que ya estas listo para lo que vine, ya que mi entrenamiento será irremediablemente duro, ¿Seguro que podrás con él? - Preguntó Kaiō-sama mientras Kakarotto lo veía.
- Por supuesto que lo lograré, siempre estoy dispuesto a superar los límites - Dijo el Saiyan con determinación.
- Debes volverte el más poderoso de universo si quieres vencer a esos Saiyan o cualquier amenaza que se ponga en el camino, debes estar dispuesto a todo, desarrollar tu mente y tu cuerpo, ¿esta claro? - Preguntó Kaiō-sama mientras Kakarotto asentía sonriendo, era el momento del verdadero entrenamiento.
Kakarotto no era él único que había comenzado a entrenar con fuerza, los meses pasaron donde Ten Shin Han, Yamcha, Chaouz y Krilin habían avanzado mucho, el viejo Kami-sama les había dicho que ya Mr. Popo y él no tenían nada más que enseñarles, así que los mandó a que entrenaran por su cuenta en la Tierra, y así lo hicieron. Por su parte, las mujeres Saiyan junto a Gohan pasaban todo el tiempo juntos y entrenando, Gine adoraba al pequeño Gohan que con apenas 1 años y varios meses demostraba ser fuerte, determinado y un orgulloso Saiyan con su cola, el bebé observaba con mucho interés cuando las mujeres entrenaban, a las tres mujeres les tomó casi 8 meses en llegar al templo sagrado sin la necesidad de volar, solo fue cuando llegaron allí que vieron el potencial del pequeño Gohan que para cuando llegaron al templo sagrado ya tenia poco más de 2 años, al llegar los demás guerreros ya se habían ido, así que se dedicaron entrenar en la plataforma, un día cuando Kale y Caulifla estaban luchando volando, el pequeño Gohan se puso inquieto queriendo ir con su madre, fue cuando estando en brazos de Gine, se soltó y el bebé comenzó a volar rápidamente hacía su madre ante el asombro de Gine, en ese momento, Kale logró golpear Caulifla en un descuido y cuando iba hacerlo otra vez, Gohan se interpuso en su camino y se lanzo como un torpedo contra Kale y lo atrapo logrando calmarlo a duras penas, Caulifla no podía estar más orgullosa de su hijo, era tan poderoso como su padre, fue que al ver esto tuvieron pensado en un par de meses volver a entrar a la habitación del tiempo por otros dos años, pero esta vez para entrenar a Gohan, el pequeño Saiyan debía acostumbrarse al duro ambiente de la habitación ya que después de todo, era un Saiyan y el ambiente de la Tierra era muy suave.
Mientras tanto, con Kakarotto y Kaiō-sama, este le enseño en cuestión de meses el Kaiō-ken, primero le enseñó a usarlo y estuvieron durante casi tres meses luchando con fuerza usando solo esta técnica, era para probar el poder y la resistencia de Kakarotto y este no decepcionó al Kaiō, cada vez que lo golpeaba con el Kaiō-ken, Kakarotto se levantaba y volvía atacar, tanto así que llegó agotar al Kaiō, pero el momento de más asombro fue cuando el Kaio puso aprueba la velocidad de Kakarotto a la hora de usarlo usando como prueba el romper con su poder y velocidad rocas enormes, de lado y lado del camino habían estas rocas y ambos comenzaron a avanzar evocando un aura rojo que era el Kaiō-ken, Kaiō-sama al no dominarlo se agotó rápidamente, pero vio como Kakarotto avanzaba y rompía las rocas a su paso, incluso saltando en zigzag para romper las que no alcanzó Kaiō a romper, cuando las rompió todas, Kakarotto le pidió si podía algo más resistente para romper, el Kaiō así lo hizo y creaba columnas de un material cada vez más resistente que el anterior, finalmente al ver que había dominado por completo y superado más allá de las expectativas al Kaiō le enseñó la otra técnica especial que le iba a enseñar, la Genkidama, para eso debía concentrarse y evocar la energía de los organismos de un planeta, es decir plantas, animales, personas, etc., fue aquí donde Kaiō-sama supo que Kakarotto llegaría muy lejos, meditaba mucho para poder conectarse con la naturaleza, todos los días se la pasaba meditando, fue hasta el último día del entrenamiento que Kaiō-sama puso a prueba el poder de Kakarotto al usar al Genkidama, Kakarotto cerró los ojos por unos segundos, y Kaiō-sama abrió los ojos sorprendido en cuestión de un par de segundos, Kakarotto evocó la energía del planeta Kaiō rodeándose de un aura blanca brillante, para luego concentrarlo en su puño rápidamente, al ver que estaba listo, Kaiō-sama creo un bloque enorme de un material muy duro, el Kaiō le dijo que debía destruir ese bloque lo más rápido que podía y sin más lo arrojó pasando a una increíble velocidad al lado de Kakarotto, el bloque volaba a gran velocidad hasta que Kaiō-sama lo aumentó a su máxima velocidad y este desapareció, para que un segundo después Kakarotto lanza la energía de su pulo formándose una esfera azul celeste con destellos y un centro blanco del tamaño de una pelota de futbol e impactó contra el enorme bloque destruyéndolo por completo causando una gran explosión que sacudió al planeta y tanto Bubbles como Gregory cayeran al suelo, Kaiō-sama estaba muy asombrado, lo había destruido con mucha facilidad y en cuestión de segundos, nunca pensó que fuese a dominar la Genkidama a tal nivel, pero el Kaiō tenía una advertencia que decirle.
- Kakarotto, la técnica de la Genkidama es una habilidad única, la cuál recibe todo tipo de energía, que proviene de los organismos de un planeta, tu lograste reunir la energía de este planeta en cuestión de segundos y de manera muy fácil sin el riesgo de destruir este planeta, pero si lo usaras en la tierra, el poder sería incomparable, si haces lo mismo allá como lo hiciste aquí debo decir que llevarías a otro nivel esta técnica, ahora imagina si lo hicieras con un planeta más grande, o con el sol, pero estoy seguro que si llegas a dominar más allá la Genkidama el poder sería increíble, pero debes saber que tienes que cuidar el planeta Tierra ese es tu propósito, por eso eres el Kami-sama - Dijo Kaiō-sama con mucha seriedad, a lo que Kakarotto asintió.
- Estoy seguro que podré arreglármelas solo con el Kaiō-ken, tengo otro propósito para la Genkidama - Dijo Kakarotto pensando en Freezer y en el momento en que se enfrente a él usando esa técnica tan poderosa - Bien, entonces creo que es hora de irme, podré recorrer el camino de la serpiente en solo un día y me daría tiempo antes de que lleguen ellos - Dijo Kakarotto mientras Kaiō-sama asentía, luego este le cambio sus ropas rotas y sucias, por unas mejores conservando la armadura sin hombreras que le gustaba y el kanji en su pecho de su propia escuela, las ropas eran mucho más resistentes, pero lo que no veía Kakarotto era que en su espalda no estaba también el kanji de su escuela sino el de Kaiō, sin más Kakarotto se despidió de los tres seres y prometiendo que los visitaría de vez en cuando.
Kakarotto se despidió y se fue perdiéndose a lo lejos, Kaiō-sama, Bubbles y Gregory le desearon suerte, ya comenzaban a extrañarlo ya que era un muy buen sujeto, pero de repente lo vieron volver corriendo hacia ellos a gran velocidad y solo pudieron quitarse del camino mientras el Saiyan pasaba y saltaba muy alto llegando al camino de la serpiente y comenzando a correr rápidamente. Kaiō-sama vio esto y asombrado dijo.
- Tal como lo pensaba, ese sujeto no conoce límites, tiene un poder que ni siquiera él conoce, es inimaginable, pero es alguien bueno que solo quiere proteger al mundo a cualquier costo, no creo que haya existido alguien así en el otro mundo - Dijo el Kaiō mientras sonreía.
Mientras tanto, Kakarotto avanzaba a una gran velocidad, corría muy rápido por el camino de la serpiente, volando y saltando a gran velocidad, enfocándose en el camino, en poco tiempo pasó el castillo de la princesa serpiente causando que estese estremeciera aterrando a las mujeres allí, ya después de varias horas logró llegar a la cabeza de la serpiente, recorrió el camino hacía el catillo de Enma-Daiō-sama, llegó haciendo tal desastre que mandó a volar al enorme ogro con escritorio incluido y mando a volar los papeles y el Saiyan dijo.
- Vaya, eso fue rápido – Dijo Kakarotto y sin más desapareció rumbo a la tierra, al parecer vio al viejo Kami y Mr. Popo que vieron sorprendidos al Saiyan, lo sintieron llegar a gran velocidad al castillo de Enma-Daiō-sama y ahora estaba allí, le iban a preguntar que tal fue el entrenamiento con Kaiō-sama, pero este dijo – Hey, Mr. Popo, tienes algo de comer – Dijo causando una gota en la nuca de los dos, mientras Kakarotto comía, les dijo que el entrenamiento con Kaiō-sama fue estupendo, pero que antes de que llegaran los Saiyan quería entrar una hora en la habitación del tiempo para dominar una de las técnicas que aprendió de Kaiō-sama y solo en la tranquilidad de la habitación lo lograría, el viejo Kami le dijo que sus mujeres, Gine y su hijo habían entrado el día anterior a la habitación, se veían muy emocionadas ya que al parecer, el pequeño a tan corta edad con 2 años ya demostrada ser un niño poderoso, Kakarotto sonrió y esperó a que salieran y ver a su hijo.
Kakarotto se sentó a meditar un poco, cuando fue el momento de que las mujeres Saiyan, Kakarotto sonrió ya que podía sentir el aumento de poder de las mujeres, pero sintió también un poder pequeño junto a ellas, cuando salieron fuera del templo, Kakarotto vio a sus mujeres, con ropas desgastadas, rotas y sucias, su madre cargaba a su hijo Gohan y se sorprendió al verlo, la última vez tenía poco más de dos años y ahora el pequeño Gohan tenía 4 años, era de una estatura baja, pero alto para su edad de quizás 80 a un metro de estatura, su cabello era largo recogido en una coleta, vestía trajes de Saiyan, armadura de combate sobre un Gi azul oscuro, al parecer las mujeres también entrenaron con el niño, que al ver a su madre se lanzó volando a los brazos de este y el Saiyan lo atrapó sonriendo mientras lo abrazaba.
- Vaya, como has crecido, hijo, apuesto que te has vuelto muy fuerte como tu padre - Dijo Kakarotto mientras Gohan sonreía y decía que había aprendido a luchar con sus madres y su abuelita Gine, Kakarotto las vio y estas asintieron, esto le hizo ver que Gohan era muy fuerte, así que decidió probar el poder de su hijo antes de entrar a la habitación del tiempo por un par de horas, le dijo a su hijo que explotara su poder y lo atacará con fuerza, Kakarotto quería medir el poder de su hijo así que uso un rastreador, Gohan explotó su poder y se lanzó al ataque contra su padre, Kakarotto lo esquivaba sonriendo mientras veía como su hijo llegaba a las 1000 unidades de poder, y veía que no era todo su poder ya que solo usaba su fuerza y velocidad, atacaba con fuerza y fiereza y veía que había aprendido el estilo de lucha de la  escuela del Gran Puño del Rey Mono, Gohan lo dominaba muy bien, sobre todo con agilidad, al final Kakarotto le dijo que lo atacará con toda su fuerza y usará su poder.
Gohan lo miró y asintió mientras se concentraba comenzando a evocar su poder y Kakarotto veía como el poder de su hijo aumentaba llegando a los 2000 unidades y vio que comenzó a preparar un Kame Hame, Kakarotto sonrió y vio como su poder llegó hasta los 3000 y lanzó su ataque, Kakarotto no lo bloqueó ni lo esquivo, lo recibió de lleno sonriendo orgulloso, la explosión no se hizo esperar y todos vieron esto sorprendidos, sobretodo el viejo Kami y Mr. Popo, pero cuando el humo se desvaneció mostro a un Kakarotto ileso y su armadura con quemaduras, miró a su hijo que lo vio asombrado y el Saiyan mayor sonrió y dijo.
- Estoy muy orgulloso de ti, hijo, si llegas a entrenarte más y te sigues esforzando llegarás a ser tan fuerte como yo - Dijo Kakarotto mientras sonreía y abrazo a su hijo.
Kakarotto les dijo a sus mujeres que descansarán, se relajaran hasta que fuera la llegada de los Saiyan, Kakarotto se despidió de ellas dándoles un beso a sus mujeres y a su hijo lo abrazo y beso su frente y entró a la habitación, pero en ese momento cuando la puerta se cerró, el viejo Kami sintió que alguien le hablaba mentalmente.
- Viejo Kami-sama, soy el Kaiō del Norte, debes decirles a las tres mujeres Saiyan que se preparen ya que los Saiyan están apunto de llegar, al parecer llegaron un día antes de lo previsto, llegarán en cuestión de minutos, así que diles que vayan y hagan el tiempo suficiente para que Kakarotto salga de esa habitación - Dijo el Kaiō mientras el viejo Kami se sorprendía y mostraba su preocupación, era el momento de la verdad, los Saiyan llegarían a la tierra en cualquier momento, pero las Saiyan estaban listas para ir a enfrentarlos, solo que había otros que se enfrentaría a los Saiyan primero.
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