En la mañana siguiente, lunes, los odio con mi vida. Froto mis ojos para adaptarme a la luz que entraba por en medio de las cortinas de la habitación. Frunzo el ceño, ¿dónde estaba? Ohh –pensé al recordar la noche anterior, la casa de Harry. Sonreí al verlo recostado en el sofá de la habitación, es algo muy raro, hace dos noches habíamos tenido sexo, y ayer no durmió a mi lado por una simple palabra: respeto.
Anne había sido muy amable al aceptarme en su casa, no quería para nada regresar a mi casa. Con mis padres y…
Ohh por Dios Kate
Ya han pasado dos meses, me levanto mi cabeza daba vueltas. Y la gran pregunta es por que todo tenía que ver con dos meses. Pienso las cosas bien y las coloco en orden.
Tenía que estar de novia con Harry en dos meses, por Kate… y Zayn regresaba en dos meses. Miro mal a Harry al pensar lo peor. Veo como quita sus sabanas y despierta de la misma forma que yo.
–Hola mi amor. –Dice, con su voz ronca de recién levantado.
–Me puedes explicar bien las cosas Harry.
– ¿De qué hablas? –se levantó del sofá caminando hacia mí. Tenía la intención de abrasarme, pero me quite.
–Sabes de que hablo. Dime Harry, ¿Zayn tiene algo que ver con el secuestro de Kate?
–No, Nina tu bien sabes cómo me cae ese tipo. No haría esa clase de tratos con él.
–Ya han pasado los dos meses Harry, olvidemos esto. –recogí mi bolso, que estaba al lado de la cama.
–No, Nina, mi amor no. Mira no te vallas, ¿adónde iras? Por favor no te vayas solamente así.
–No Harry, el trato eran dos meses. Y ya está, estamos a mayo. Gracias por todo.
Lo que más quería era irme de ese lugar, estar cerca de Harry era peligro. Lo conocía y sabía que haría cualquier cosa para quedarme con él. El hecho de que no se llevara bien con Zayn no es excusa, el único que me diría la verdad era él. Zayn.
Baje las escaleras para irme, pero me toma de la mano. Su madre nos observa confundida. Buscando explicación alguna con su mirada. Me solté de su agarre y acomode mi bolso en mi hombro. No solía pedir ayuda en lo absoluto, me hacía sentir menos, como que no lo podía hacer cuando sí, me refiero al bolso el cual pesaba mucho. Ya casi no tenía ropa que tendría que ir a mi casa por más, obligatoriamente.
Estaba pensando bien, Harry había cambiado en serio lo había hecho, por mí. Y si le dejaba volvería como estaba antes, o aun peor. Pero por el otro lado estaba Zayn, sería muy injusto con el yo amo a Harry pero también lo amo a él.
–Iré a mi casa nos vemos en el parque de mi calle a las cinco, ni más ni menos. Adiós Anne, gracias por todo.
Harry quedo en silencio, con su boca media abierta aun sin creer lo que estaba pasando. Después de diez minutos de esperar el bus al fin estaba en camino a mi casa. El único y lo repito de nuevo, el único que me puede decir la verdad es Zayn. Llegue al portal de mi casa a las diez de la mañana exactamente, las luces seguían encendidas, normalmente así de anormal era mi familia. Suspire antes de abrir la puerta. Justo cuando abriría la puerta alguien más se adelanta. Thomas, el chofer de mi hermana.
–Hey Nina, que milagro que está...
–Quítate ojos lindos. –empuje y lo aparte de mi camino. No mentía, sus ojos, azules con un gris claro por el borde, eran simplemente perfectos. Al pasar por la puerta deje mi bolso con mis otras cosas al pie de las escaleras, amarre mi cabello en una coleta y caminé hacia la cocina. Solo quería un jugo de naranja pero, todo aquí lo complican.
–¡¡En que pensabas Nina!! Si secuestraron a tu hermana también te hubieran secuestrado a ti, o tan solo era a ti a quien querían secuestrar, y le ha tocado a tu hermana. Nos has decepcionado totalmente. –Mi padre, Wow que gran discurso, bostecé dejando ver mi aburrimiento. –Nina, te estoy hablando. –Habló ahora más fuerte.
–Papa, ¿esto será siempre que estoy aquí? Peleas y más peleas con ustedes tres, tú y mama siempre le aplauden a Kate todo lo que hace, claro es su primera hija y va bien en sus estudios, no fuma, no toma, no anda con personas que narco trafican droga ni la coge. Si lo entiendo es la hija perfecta, pero podrías solo un día comprenderme, todo esto lo hago por algo que ya ustedes saben, oculto mi tristeza con esto. –No, Nina no llores. –Fue lo peor que me pudo pasar, y como los padres que eran me abandonaron en el peor momento que pude pasar.
–Nina…
–No papa, nada de Nina. –Ya empezaba a llorar, quizás haber estado con alguien que me entendía y me había hecho sentir algo que nunca nadie me lo había dado, amor. Se preguntaran, ¿Qué paso? Pues esto paso. –Papa no me puedes venir a consolar después de tres años. –Me tiré al piso al recordar tal tragedia con mis manos ocultando mi rostro, podía escuchar a mi madre y a Kate llorando del otro lado de la cocina. –Papa, era mi hija –Rompí más en llanto, esto era lo que pasaba. Hace tres años atrás cuando estaba con Harry, competimos un error y estuve embarazada, desde ahí mis padres me odian y esto me ha llevado al alcohol y las drogas, pero lo peor es que no me apoyaron en nada era obvio, tenía los quince recién cumplidos era una niña, esto también incluía la fiesta de quince años que nunca me realizaron. Me culpo por haber hecho lo que hice, después de los nueve meses cuando la bebe estaba a punto de nacer nadie estaba conmigo en el hospital solo Calum que esperaba afuera de la habitación. Cuando desperté de la anestesia solo me dijeron dos palabras: Lo lamentamos. Esto me destrozó el corazón, tenía quince y los riesgos de que una de las dos muriera eran altos, justo cuando nació murió. Y mis padres siempre me lo echaran en cara, de que hago todo mal y que mi vida va sin rumbo. ¿Harry? A Harry le dolió mucho, pues era su hija pero no se inmuto en hacer cosa alguna. Cuando Calum se enteró de que aún seguía con Harry y las cosas con las drogas, se separó de Mí y de Vanessa. Todas las personas que quería, se fueron. Y solo me quedaba una y esa era Vanessa. –Gracias, gracias papa, siempre me haces sentir de esta manera. Se supone que son mis padres y tienen que apoyarme en las buenas y en las malas. –Me levante con ira. –Vamos, pregúntenle a Kate cuantas veces no ha tenido relaciones con Liam, verán que no soy la única que decepciona en esta casa. Todos somos humanos y cometemos errores, un amigo me dijo que si uno se lo propone, cambia. Inténtenlo. –me seque las pequeñas lagrimas que aún quedaban sobre mi rostro y subí las escaleras, ya no estaba triste, ahora solo la ira se adueñaba de mí.
Tomé mi bolso, lo abrí para tirar toda la ropa que estaba sucia a la canasta de ropa sucia. Tomé la ropa nueva que compre hace unas semanas con Vanessa, doble cada una de ellas para luego meterlas en la bolsa. Las horas corrían, mis padres se habían ido al trabajo y yo me había quedado con Kate en la casa, estar sola con ella era realmente incomodo, y ahora con todo esto del secuestro, mas.
El almuerzo pasó, como buena hermana que soy llame a la pizzería por dos pizzas para nosotras dos, necesitaba sacarle información de su secuestro pero no me quiso decir nada, era extraño normalmente escupes todo y ya, pero no ella era Kate Thompson y hacia lo que quería. El reloj marcaba las cinco de la tarde, era hora de enfrentar la realidad, tome mi bolso ya listo y salí de mi casa, dirigiéndome al parque donde estaría Harry y Zayn, sí, Zayn. Los dos me tendrán que decir sus diferentes versiones de aquel misterio del maldito secuestro de mi hermana. Me despedí de Kate amable, en definitivo cambie con ella. Y de mis padres, solo les deje una nota: “Los odia Nina”. Con ellos sería la misma Nina de siempre. Ya estaba en el parque y ninguno llegaba me estaba desesperando, pero al fin llega uno de ellos.
ESTÁS LEYENDO
C H A N G E
Teen FictionNina Thompson, 17 años, alta, castaña, ojos café claros, bella, muy bella. Ruda y muy dolida, su vida iba sin rumbo, llena de drogas sexo y alcohol. Sus padres La odiaban al igual que su hermana. --- Aveces tomamos decisiones que no nos convienen pe...