C H A N G E

12.

Al sentir libre mis ojos los abrí, frunzo el ceño al ver tan clara la luz. Me incorporo en la pequeña silla de madera, no hay nada más que eso una silla de madera. Era claro, estaba secuestrada. Ya no tenía la venda en la boca ahora la tenía atada en las muñecas y en los tobillos. Me rio al ver a Martin parado esperando palabra alguna. Le escupo. Y rio por segunda vez.  ¿Por qué? Porque ya me habían secuestrado una vez y sabia como escapar.

–Sabes mi querida Nina ¿porque estás aquí?

– ¿Obsesión?

–Claro que no. Simple. Venganza.

–No lo entiendo. –Empezaba a preocuparme cuando sacó una pequeña navaja del bolsillo de su chaqueta.

–Ya te he dicho, venganza, dulce venganza. –se acercó más. –Tu querido Novio, Styles. –Mire a otro lado y medio torcí la boca, ese desgraciado solo me buscaba problemas. –Me ha metido en la cárcel. –Frunzo el ceño, de nuevo. –No soy Martin mi querida Nina. ¿Has escuchado hablar sobre… “La sombra”? –Maldición, “la sombra” era el nombre que llevaba el jefe de la otra banda o pandilla, enemigos de Harry y nuestra banda, por lo que tenía entendido había violado a la hermana mayor de Harry, Gemma y lo encerraron en la cárcel, tendría que salir en diez años pero al parecer ha salido antes. –Mi querida Nina, por culpa de tu querido novio y tu queridísima cuidita estuve en esa mugrienta cárcel, Siendo acosado por los maricas de mi celda. Pero no dejaría que un niñato como Harry Styles me ganará la pelea y vine por ti.

***

–No hay tiempo que perder chicos, Nina está desaparecida no hay modo que salga del país en tan solo una hora necesitamos encontrarla, y necesito su ayuda. –Habló Harry a todos los que se encontraban en el Club33 incluyendo a Zayn quien estaba igual de preocupado que Harry.

Vanessa estaba en su casa pidiendo ayuda a sus padres quienes tenían buenos contactos en la policía, mientras Calum avisaba a los padres de Nina.

***

–Mira… “La sombra” –bufe. –Ash no sé ni cómo llamarte. Okay mira pedazo de mierda, no tienes por qué limpiarte las manos en mí, arreglen sus problemas ustedes dos y ya.  Yo ya no tengo nada que ver con Harry ni con los del Club33 eso ya… ya es pasado.  –baje mi cabeza.

–No, lo que quiero es que a Harry le duela cuando sepa que te tengo en mis manos. Que tengo su más preciada joya. Nina Thompson. –rió. Lo miro seria, arqueando una de mis cejas. –Bueno iré al baño, no te muevas. Bueno no pues hacerlo. Haha. –rió de nuevo. Idiota.

Mientras él iba al baño inspeccioné el lugar buscando alguna salida, pero solo estaba una ventana y la puerta de entrada. La silla no pesaba en lo absoluto y las vendas eran de muy mala calidad, gracias a los chicos estaba entrenada en escapes. Pase mi mano izquierda por debajo de uno de los nudos mal hechos y luego la derecha por el nudo de arriba y listo, luego quité los nudos de los tobillos y ya estaba libre ahora a escapar.

***

Suena el móvil de Harry.

– ¿bueno?

–Harry, Harry. –era él.

–Tu. Dime ¿Qué tal la cárcel?

–Tu dime Styles ¿Que tan buena es Nina en la cama?

–Maldito hijo de puta ¿Dónde la tienes?

–Shh, shh Harry no te emociones. Tu querida Nina ha intentado escapar, esto no les da ventaja a ninguno de los dos. Pagaras Styles y muy caro.

***

–¿Te crees lista? –Pregunto, ahora estaba atada de manos y pies, ojos y boca. Quería salir de esta tortura, estaba recostada en una fina tela de seda sobre el piso. –pensabas escaparte por esa pequeña ventana, Nina dime ¿Cómo caíste tan fácil?

No respondí, obvio tenía mi boca tapada con la estúpida pañoleta, odio a Harry.

–Nina, Nina. Solo para mantenerte informada, tu novio ya sabe que estás conmigo.

Al fin buenas  noticias, si Harry ya sabía reunirá a todos y vendrán por mí. Suspiro aliviada.

Se colocó sobre mí colocando sus rodillas alrededor de mi cintura. Quitó la pañoleta negra de mi boca abrí la boca para insultarlo de todas las maneras posibles, pero antes que pudiera decir algo sentí como sus labios violentamente se movían sobre los míos, pensé que la primera vez que lo besaría seria hermoso pero fue todo lo contrario, asqueroso. Trataba de quitarme pero me era imposible.

–Quédate quieta. –susurró entre lo que él llamaba beso.  No le obedecí. -¡Quieta! –Grito. Me quité y besó mi mejilla. Hice lo posible para mover mi pierna pero no pude por la presión de las de él. ­–Eres desobediente, eh. –asco. Estaba llorando, quería salir de ahí, quería correr libre y estar entre los brazos de Vanessa o de Calum e incluso en los de Harry o Zayn.

Se escuchó un fuerte golpe en la puerta, al parecer la habían derrumbado. –Mierda. –Susurró él, Martin o como sea que se llame.

–Quita tus sucias y asquerosas manos de ella. –La gloriosa voz de Harry.

El rió en respuesta, quitó sus manos de mis caderas y quitó la venda de mis ojos.

–Mira Nina, tu noviecito ha venido al rescate.

Pude ver como Harry estaba, rojo de la ira. Atrás de él estaba Zayn quien tenía los ojos llorosos.

–Vamos Alexis suéltala, no es su pelea es la nuestra.

¿Alexis?

Pero que mierda.

–no la dejaré libre así de fácil. –saco la navaja, de nuevo y la colocó sobre mi cuello. Harry dio un paso rápido. –Eh, lejos. –advirtió. Por mi mejilla derecha rodaba una lagrima, trague con dificultad. ¿Sería mi última noche viva?

Cuando menos lo esperaba, Harry sacó de su pantalón una pistola, era su favorita, sonrió y guiño un ojo, cerré los ojos y solo escuché el disparo. Sentí como Harry quitaba el cuerpo de Alexis sobre mí y me apretaba fuerte contra el rodeándome con sus brazos.

–Todo es mi culpa, perdóname mi ángel. Nunca debí separarme de ti.

Yo solo lloraba, por que todo había acabado, él estaba muerto y ahora estaría con Harry.

Sentí otras manos abrasarme, Zayn. Quien lloraba conmigo.

– ¡Nina! –oí su voz, mi Vanessa. –Por Dios Nina. Se abalanzo a mí riendo y llorando al mismo tiempo. Luego vino Calum y luego todos los del Club33. Esperaba que esas tres personas pasaran por la puerta pero no fue así.