L o s t M a n | L S |

4

-Todo listo, entonces.
Louis tronó sus nudillos.
El sol se estaba metiendo, una poca luz se colaba por la ventana, iluminándolos a todos.
-¿Estas seguro que tenemos acceso a esa propiedad Harry?, no has estado ahí desde hace diez años.
Tyler estaba sentado sobre el piso, jugando con las semillas de una manzana que se acababa de comer.
-Estoy seguro, mi papá nunca perdería esa casa, es importante para el.
Louis asintió.
-¿Que hay de los caminos?.
Harry asintió.
-Tenemos que venir por donde ustedes llegaron, el bosque es muy grande y me faltan partes por explorar, pero he llagado a la salida que da al lago.
Todos asintieron.
-Incluso cuando estaba pequeño marcaba los árboles con una hache para no perderme.
Harry susurro orgulloso.
-Bien, estamos más cerca que antes de hacer un plan.
Calvin sonrió.
Harry tallo sus ojos, arropándose un poco con la manta sobre su cuerpo.
En la oscuridad de la noche todos guardaban silencio, tratando de hacer un plan en sus mentes que fuera medianamente coherente para compartir, las respiraciones de cada una de las persona en esa pequeña sala de estar era lo único que se escucha. Harry mantenía su cabeza recargada sobre el hombro de Louis, sus ojos permanecían cerrados, Louis trataba de no concentrase mucho en eso.

El crujir de las hojas sacó a todos de su trance, haciendo que todos voltearan a la ventana en alarma. Los hombres voltearon a ver a Louis.
Y luego otra pisada y otra y otra. Los hombres estaban convencidos de que era algún animal salvaje de los que Harry salía tratar.
-¿Crees que...?.
Logan susurro, Louis negó.
-No, nadie sabe de esto, solo nosotros, nadie más.
Louis seguía con la mirada clavada en la ventana.
Todos estaban a punto de bajar la guardia, hasta que escucharon el primer disparo.
-Maldita sea.
Louis maldijo, haciendo que todos se pusieran contra el suelo.
-Vayan por sus armas, antes de que entren a la casa, Harry esperanos en la puerta trasera.
El rizado asintió, comenzando a arrastrase contra el suelo hasta la puerta trasera.
Los demás tomaron sus armas, cargándolas con rapidez y poniéndose en posición, casi sin hacer ruido.
Louis hizo algunas señas con la cabeza a sus chicos, indicándoles que tenían que salir por la puerta trasera. La puerta fue derrumbaba y en la oscuridad de la noche, el miedo de Harry se manifestó en un sangriento encuentro.
Calvin se encargaba de disparar repetidamente hacia la ventana, vidrios esparcidos por el suelo, mientras el se cubría ocasionalmente con la pared de la cocina. Tyler se mantenía agachado, disparado junto con Louis y Logan y Jesse hacia la puerta.
Harry tapó sus oídos y cerró los ojos, se colocó en forma de bolita y pensó en su lugar feliz, escuchando sonidos de armas por doquier, disparos fallidos y lamentos en su alrededor. Hasta que sintió una mano cubrir su hombro, abrió sus verdes ojos y su cara se volvió pálida al ver un rostro no conocido, gritó con todas su fuerzas.
-¡Harry!.
Louis volvió a gritar, disparando un par de veces más antes de voltearse para caminar hasta la salida trasera, en donde Harry estaba tratando de ser sometido por cuatro músculos cuerpos. El rizado lloraba con desesperación, pataleando y tratando de zafarse, Louis apretó la mandíbula y caminó hasta el hombre que le daba la espalda, disparado sin piedad en su espalda. Harry cerró los ojos, sintiendo como un líquido caliente salpicaba su cara, abrió los ojos con miedo, con lágrimas escurriendo por sus mejillas.
Louis inmovilizó el cuerpo de otro hombre, poniendo su arma en su mandíbula, disparado hasta hacer que las balas atravesaran la cabeza. Disparo de manera veloz hacia lo dos cráneos de las personas que intentaban defenderse, Harry no podía mantener los ojos abiertos un segundo más.
-¡Chicos!.
Louis gritó, haciendo que todos lo voltearan a ver, corriendo de inmediato hacia la salida trasera de la casa. Entre los brazos de Louis estaba Harry, quien se aferraba al pecho del ojiazul.
-Necesito que salgan de aquí, sigan las letras en los árboles, vayan a la casa, lleguen con vida, los necesito con vida.
Jesse negó.
-Tu vienes con nosotros, el viene con nosotros.
-¡Es arriesgado Jesse!, ustedes aún son parte del ejército americano, pueden encontrarse con más solados, no pueden llevar a Harry con ustedes, ¡sería sospechoso!.
Louis hablaba rápido.
-Tu estas también arriesgándote, déjanos ir con ustedes.
Louis negó.
-No, necesito que vivan, necesito que vayan allá y esperen a Harry.
Calvin tomó su cabeza en entre sus manos con frustración.
-¡Solo si prometes regresar junto con el!.
Louis trago saliva, sabiendo bien que no podía prometer tal cosa, no podía asegurar su vida.
-Lo prometo.
Louis afirmó, aún sabiendo que era arriesgado. Tyler asintió, tomando el arma firme entre sus manos y corriendo hacia el bosque, seguido por los otros tres hombres.
Louis exhaló, corriendo hacia el otro lado, aferrándose al delgado cuerpo de Harry contra su pecho. Ahora sus caminos se habían separado.