Diferentes Formas De Amar

Iron Man y Capitán América (Mpreg)

Steve no entendía que le pasaba a Tony.

Hace meses dejó la tarea de ser Iron Man.

Ya no discutía, no peleaba y se la pasaba en el taller.

También, sorprendentemente, empezó a comer sus 3 comidas al día.

Dejó el café, dejó las donas y comenzó a comer vegetales.

Los Vengadores estaban preocupados.

—Steve... —Natasha miraba de mala manera al rubio— ¿Qué fue lo que le hiciste?

El rubio inmediatamente se sintió culpable, aunque no sabía de qué.

Clint alzó una ceja, Thor lo miraba fijamente y Bruce lucia preocupado.

—Yo... No recuerdo a ver peleado con él.

—Amigo Steve... En el matrimonio... Bueno, hay momentos malos, yo los paso con Loki.

—Pero no hemos ni siquiera hablado.

—Steve... —Bruce interfirió en la plática de ambos rubios—, tienen que hablar.

Rogers asintió de acuerdo.

Hace mucho que su esposo y él no tenían un momento para ellos, entre misiones y los escapes de Tony, era imposible verlo.

Suspiro antes de dirigir sus pasos al cuarto de ambos.

Cada escalón que subía, era una tortura mental.

Tal vez se había cansado de él, tal vez ya no lo amaba, tal vez... Había encontrado a alguien más.

Negó ante sus pensamientos y sin más, tomó el pomo de la puerta y la abrió.

Tony se miraba en el espejo de cuerpo completo.

Específicamente a su vientre.

Vio como una pequeña sonrisa se pinto en sus labios, para después mostrar una mueca preocupada.

—Te vez hermoso. —Y no mentía. Había algo especial en él. Algo que lo hacia brillar con luz propia.

—¿Está tratando de coquetear conmigo? —Steve sonrió ante las ocurrencias del castaño—. Le advierto que tengo esposo.

—Entonces, roguemos porque no se entere.

Ambos rieron ante el pequeño juego.

Rogers lo miro por unos segundos, para finalmente soltar la pregunta.

—Tony ¿Estás bien?

El más bajo pareció perderse en sus pensamientos, a un mundo al que Steve no podía entrar.

Pronto, lo vio caminar hacia él.

Seguro, precioso, como todo hombre digno de respeto.

—Steve... ¿Qué visualizas en el futuro?

El rubio fruncio el ceño ante la cuestión.

—Te visualizó a ti, a nosotros... Juntos.

—¿Nada más?

—Claro. —El soldado no entendía a que quería llegar.

Sus manos fueron tomadas por las del genio, para ser posicionadas en la cintura.

—¿Sientes alguna diferencia?

Los dedos tocaron la zona. Recorrió y exploró lo que él ya conocía.

Paró un momento... Había un pequeño bulto que comenzaba.

Sus palmas se centraron en el estómago y viajaron para el sur.

Su vientre estaba abultado.

—Tony...

—¿Algo cambió?

Steve sintió las lágrimas acumularse en sus ojos.

Una gran sonrisa se dibujo en sus labios. Ahora no sólo visualizaba a Tony y a él... Eran ellos y un pequeño bebé.

—Tengo a una "mini personita" aquí dentro.

Tomó el cuerpo de su pareja entre sus brazos. Beso su frente, sus cabellos, lo que estuviera a su alcance.

Tony estaba esperando un hijo suyo.

—Te amo, Tiny.

—Y nosotros a ti, Stiff.