SOLO UNA MÁSCARA. [Editando]

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JiMin se encontraba atado con mucha rudeza sobre la cama con una corbata de tela que le hacía fricción en sus muñecas de manera sumamente dolorosa.

Su cuerpo está siendo explorado a más no poder por un par de manos rasposas y una lengua asquerosa, el hombre de cabellos rubios se encontraba en el abdomen del castaño, subiendo y bajando, mordiendo sus pezones de manera ruda haciendo que la sencible zona escociera, no podía dejar de llorar, las lágrimas eran esparcidas por sus mejillas sonrojadas, sus cabellos lacios de se encontraban pegados a su frente.

―Eres mi niño especial. ―JiMin lloraba desesperadamente con mucho dolor sobre todo su cuerpo. ―Alza la cadera.

JiMin negaba entre sollozos, no iba a dejar el acceso tan sencillo a su cuerpo.

El mayor pudo observar que JiMin no le haría caso, por lo que se paró de manera lenta de la cama para después quitarse su cinturón, del mismo modo, toma entre sus manos la botella que siempre estaba llena de agua sobre la mesa de noche de JiMin y comienza a abrirla con delicadeza sin dejar de mirarlo sollozando en la cama, una vez abierta la deja en su lugar nuevamente y comienza a arrancarle de manera brusca el pantalón al castaño. Una vez que JiMin queda simplemente en ropa interior vuelve a tomar la botella con una sonrisa de lado.

―Ésto te lo buscas tú, si pusieras más de tu parte esto no sería así para ti, todo sería más simple, hasta lo disfrutarías tanto como yo.

Comienza a llenar de agua fría el cuerpo de JiMin, su expresión llena de lujuria y su mirada lasciva asustaba demasiado al castaño.

El mayor toma rápidamente el cinturón y azota con gran fuerza el cuerpo lastimado del castaño, su cuerpo en su totalidad temblaba. No pudo evitar soltar un grito por respuesta, no tenía palabras para describir el dolor e impotencia que tenía... sin embargo tampoco tenía fuerzas para gritar.

―Le... le diré a mamá... ―Una bofetada en su rostro no faltó, el castaño logró identificar que el hombre nunca tenía cuidado en nada, le dejaría una marca bastante notoria.

―No lo harás ¿quieres saber por qué? tú le tienes miedo al rechazo de tu familia, tu madre no te creería, y ni siquiera tienes tiempo de hablar de ello. No puedes hacerlo, tu mente te lo evita por el miedo al rechazo, o peor aún... que te hagan sentir como una persona sucia, tal como lo que eres.

JiMin seguía forsejeando para ser liberado bajo el cuerpo del rubio... sin embargo cuando escuchó lo que dijo su mayor se quedó estático mirando con miedo hacia al frente.

"Persona sucia... eso soy desde que tus sucias manos me tocaron"

Un temor excesivo recorrió su cuerpo cuando vió que el hombre agarró de la mesa de noche el cúter que siempre cargaba con él. Ese hombre era un total loco.