Pov Valentina
A penas pasaron dos días después de que hablé con Mag y por fin accedió volver al país para continuar su tratamiento aquí, no entiendo porque tenía que irse tan lejos. Por suerte ya decidió volver, ahora está en una habitación de la clínica privada de mi madre. Estoy segura de que aquí estará mejor atendida, y que se podrá recuperar como debe de ser.
_ ¿Cómo es eso de qué mi sobrina se llamará Alfonsina?_ reí bajito arrastrando un silla para sentarme, me duelen demasiado los pies y la pequeña Alfon se mueve mucho.
_ Estoy en esas, primero tengo que convencer a Juliana_ le dije tomando su mano, está más delgada de lo debido. Las venas le resaltan un chingo, tiene dos grandes bultos bajos sus ojos y se ha raspado por completo la cabeza. Está irreconocible, ya no sonríe como antes y sus ojos han dejado de brillar. Ya no es esa mujer llena de alegría, ahora sólo veo dolor en ella y eso me está partiendo en dos el corazón. Odio verla así, pero sé que pronto saldrá de ésta. Además ya la he revisado un millón de veces desde que llegó y lo continuaré haciendo, tiene que estar monitorizada todo el tiempo.
_ No la vas a llamar así, estás loca_ dijo intentando sonreír, pareció más una mueca que otra cosa.
_ Te dejaré elegir el nombre de nuestra princesa_ ahora si sonrió de verdad, no creo que a la morena le moleste. Todo lo contrario, con tal de que Mag sonría de esa manera soy capaz de cualquier cosa y creo que mi esposa por igual.
_ ¡Eso es increíble!_ casi gritó llena de emoción, fue muy buena idea decirle eso_ Vamos a pensar_
Me hice la pensativa mirándola con una gran sonrisa, con el paso de los años la he llegado a querer tanto. Ya la considero parte de mi familia y creo que ella me considera parte de la suya.
_ Sigo pensando que Alfon es un nombre muy hermoso_ quise molestarla, sé que no les gusta para nada. Sólo soltó mi mano de inmediato, pero aún así no dejó de sonreír...
_ Deja de joder, no la llamarás así y punto. No es sólo tú hija, así que te callas la boca_ hice un zipper en mi boca con mis dedos, dejaré que lo elija. Nadie quiere que mi princesa se llame Alfonsina, nadie quiso que Valentín se llamara Valentino. No tengo ni voz ni voto en mis hijos, no sé que papel juego en esto. Ya no lo entiendo, pero ni modos_ está Francisca, María. Josefa, Mia_Comenzó a decir un montón de nombres y todos horribles, creo que ella tiene peor gusto. ¿Josefa?, por Dios. Pero si me gusta Mía, es corto. Sin diminutivos, además creo que a ella le gusta porque lo ha repetido varias veces_ ¡Mia! ¡Se llamará así y punto!_
_ Margaret_ dije de repente, sin pensarlo. Ella se me quedó mirando raro, como si no estuviera hablando en serio. Pero si lo hago, no estoy bromeando_ imagínate, podríamos llamarla Mar o Mag_ lo sé, tengo un serio problema con los diminutivos. Pero es que me encantan.
_ ¿Estás tratando de matarme? Aún no he muerto, y no. Suficiente tengo con escuchar mi nombre, como para tener por ahí a alguien más_ Suspiré pesadamente, quiero que se llame así. Es hermoso, aunque también me gusta Alfon y Mia.
_ ¿Cómo está la rubia más hermosa?_ miré de inmediato hacia la puerta y sonreí ampliamente, vi a la morena como entraba con dos ramos de rosas. No la he visto desde ayer, no sé porque últimamente está más hermosa y no sé porque la extraño tanto.
_ Somos dos rubias, tienes que especificar_ dijo Mag acomodándose en la cama, tiene razón. Somos dos...
_ Sabes que a ti, tú eres la más hermosa_ se me derritió el corazón al ver como Juls dejaba un beso en su frente y le colocaba las rosas rojas sobre sus manos.
_ ¿Para mi no hay un beso?_ me quejé levantándome de la silla, ella se giró casi lanzándose a mis brazos. Pero la detuve, no quiero que arruine las rosas.
_ No sabes cuanto te hecho de menos_ susurró en mi oído, sólo suspiré. También la extraño, casi no nos vemos.
_ Extraño dormir contigo amor_ le dije besando sus labios por un corto tiempo, sé que a Mag no le gustan las muestras de afecto frente a ella.
_ Y yo contigo cielo, extraño abrazarte_
_ Voy a vomitar ahora mismo si no se separan, estoy al borde de vomitarlas a las dos_ escuché que dijo Mag haciendo arcadas, creo que duró mucho para hacer un comentario así.
_ Cállate, déjame amar a mi esposa_ le devolvió la morena sacándole la lengua_ ¿Te sientes bien amor? ¿Ya comiste? ¿Y nuestra bebé?_ agarré su mano libre llevándola por debajo de mi camiseta holgada, justamente la princesa se está moviendo y siento que se me incrusta debajo de las costillas. Se mueve demasiado, joder_ se está moviendo, oh cielos. Es como un remolino, no sé como la aguantas_
Reí entre dientes, tampoco sé como aguanto ese pequeño remolino dentro de mí, a veces quiero hacerme una cesárea yo misma y sacarla de ahí_ ¿Te gusta Margaret?_ le pregunté cerrando los ojos para no ver su reacción, a ella tampoco le gustan los nombres que elijo.
_ ¿La quieres llamar así?_ asentí de inmediato, mirando de reojo a Mag quien se había tapado la cara con la sábana para ignorarnos_ Es un hermoso nombre para nuestra bebé_ murmuró acariciando mi vientre, está más que claro que así se llamará...
***
Agarré a Valentín por la cintura lanzándolo a la piscina de golpe.
_ ¡Te dije que no le hagas eso!_ me reprimió Juls pegándome en la cabeza, no entiendo porque no quiere. Al él le gusta, además de que tiene el salvavidas puesto.
_ ¡Otra vez!_ gritó el enano, tiene suerte de que la morena lo deje entrar. Son casi las diez de la noche, y acabamos de llegar de la clínica. Nos pasamos todo el día haciéndole compañía a la rubia, nos atacó el calor en cuanto llegamos a la casa.
Quise despertar a Julián, pero mi querida esposa no me dejó hacerlo. No sé porque se duerme tan temprano, mientras que éste enano se duerme super tarde y después es un problema para levantarlo para ir al colegio.
_ Pero le gusta mi amor_ le dije pasando mis manos por detrás de su cuello_ te amo_ pegué mi frente a la suya, en verdad la amo. Es lo mejor que me ha pasado, ella a estado a mi lado a pesar de todo. Se a mantenido conmigo en las buenas y en las malas, no sé como me a aguantado todos estos años.
_ ¿Estás llorando cielo?_ negué abrazándola más a mí, tal vez si se me escaparon un par de lágrimas. Seguro son las hormonas_ también te amo cielo_
_ ¿Mucho, mucho o mucho?_ le pregunté haciendo un puchero, ella sólo se rió limpiando mis lágrimas. Ni sé porque estoy llorando.
_ Te amo con mi vida, eso no lo dudes cielo. Te amo más de lo que te puedas imaginar, amo todo lo que hemos construido poco a poco e incluso amo los nombres raros que se te ocurren para nuestros hijos. Lo único que no amo es el color verde caca con el cual pintaste la habitación de la bebé, no te voy a perdonar eso_
_ Pero la habitación quedó hermosa_ sé que sólo me está molestando, estoy segura que le ha gustado el color.
_ ¡Mami mira! ¡Se me a caído el diente! ¡Lo he despegado!_ me di la vuelta en cuanto Valentín gritó eso, vi como extendía su pequeña manita mostrándome dos dientes. No sólo fue uno como dijo, me va a dar algo. Siento que muero, se lo a despegado...
___
Puerkas...
