»cameron boyce.

914 24 4
                                    

en memoria de Cameron Boyce. te amo hasta el cielo, o donde quiera que estés. siempre estarás en mi corazón, gracias por sacarme las mejores sonrisas a lo largo de mi vida.

You belong with me
» can't you see that I'm the one who understands you?
been here all along, so why can't you see?
you belong with me

Cam y yo nos conocimos de una manera muy particular, cuando yo tenía 14 y él estaba por cumplir 16. Por Instagram Direct, de hecho.
Acababa de descubrirlo en Jessie, y se me hacía el niño con pecas más hermoso del mundo, así que, en mi «inocencia» le mandé un mensaje que decía más o menos “estás hermoso y te admiro, bye.”, pero yo no contaba con que él fuera a usar el traductor de google para contestarme un “haha, gracias, eres muy linda!”.
Claro que yo me moría de emoción al ver su respuesta, así que empezamos a hablar diario, todo el día, casi todos los días.

Tres meses después de empezar a hablar, mi atracción hacia él aumentaba, y fue cuando le dije "te amo" por primera vez, claro que inmediatamente le dije que era como amigos, para no hacer las cosas incómodas entre nosotros, ya que se había convertido en alguien muy importante en muy poco tiempo, y yo me habia convertido en alguien importante para él también, aunque me tardé más tiempo en descubrirlo, Cameron respondió mi “te amo” (de «amigos», prohibido olvidar) con un “te amo más!”, claro que en inglés.

Dos meses después, en noviembre (cabe señalar que empezamos a hablar el 22 de junio), nos conocimos por primera vez en persona. Fue todo un show, ya que él voló desde L.A. hasta Los Cabos para conocerme. Estábamos seguros que no nos íbamos a secuestrar o algo parecido, ya que para empezar, él tenía el icono de perfil verificado en Instagram, y habíamos tenido videollamadas antes, por lo que estábamos seguros el uno del otro. El caso es que yo no sabía que iba a ir hasta allá, por lo que llegó a Cabos sin saber cómo mierda encontrarme (como dije, todo un show), así que estuvo un buen rato intentando encontrarme, y al mismo tiempo intentando esconder su verdadera identidad, hasta que, por arte de magia, llegó a la tienda de antigüedades de mi abuela, de la cuál ya le había contado antes, sólo pensé que no me estaba poniendo atención. Mi abuelita sabía mucho de Cameron por mi parte, y cuando él preguntó por mí, ella intentó asegurarse de que fuera él, así que dijo:
“— ¿Tú eres 22 de junio?”
Y Cameron dijo:
“—El mismo e inigualable. También soy su futuro nieto.”
Aunque de eso último no me enteré hasta después.
Yo llevaba una relación muy buena con mi abuela, nos contábamos casi todo, y cuando Cam me contaba sobre alguna que otra de sus conquistas, yo iba con el corazón roto hacia mi abue.
Después de que él le contestara otras preguntas (para asegurarse), Nanny, como generalmente llamo a mi abuela, se ofreció a llevarlo hasta mi escuela.
Todo eso es contado más o menos desde la perspectiva de Cameron y Nanny, pero desde mi perspectiva, fue todo un show también.

Era un jueves 15 de noviembre y obviamente yo tenía escuela, fue un día bastante entretenido, ya que tuve un examen de inglés en el que saqué 10 (aprendí más de ese segundo idioma gracias a Cameron, y por tanto mi calificación mejoró considerablemente), después, me enteré que el ex-novio de mi mejor amiga la engañó, así que él se ganó una cachetada y una patada de mi parte, mientras que yo me gané un reporte de conducta. Salimos una hora más temprano de lo esperado y mientras caminaba hacia la salida con mis amigas hablando de a dónde deberíamos ir para perder el tiempo en lo que llegaban por nosotras, vimos un montón de chicas en la puerta de la escuela, nos apresuramos un poco más hacia allí por si había ocurrido un accidente, pero entonces lo vi.
Estaba sonriendo a algunos teléfonos mientras firmaba autógrafos y cosas así, hasta que él me vió a mi.
Dejo todo lo que estaba haciendo y se abrió camino hacia mi, yo también caminaba hacia él, y cuando estábamos un poco más cerca, salté hacia él y lo abracé como tanto tiempo estuvimos esperando. Hundí mi cabeza en su cuello, ya que era más alto que yo, y respiré su aroma, él me tomó de los muslos y me levantó, así que instintivamente enredé mis piernas alrededor de él. Fue un momento mágico, cinco meses de conocernos y hablar diariamente, no lo sé, lo sentía como una gran parte de mi vida, aunque si que lo era.

» one shots ; PEDIDOS CERRADOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora