Un gran poder conlleva... muchos problemas

Capítulo 18. ¿Todos tienen secretos?

Poe estaba gratamente satisfecho con los avances que habían hecho en los últimos seis meses. Pues, en todo el tiempo que Donald y los niños llevaban en la mansión, el pato convertido en cuervo había logrado varios hitos, había logrado encontrar a su hermana, a quien se pasó cinco años buscando. Sí, se había reunido de nuevo con su hermana a pesar de que ella era literalmente ahora una sombra de lo que fue antaño.

Otra proeza, inimaginable varios meses atrás para Poe, era que también había logrado descubrir quién fue el patito que lo hechizó hacía diez años, patito cuya magia estaba obviamente volviéndose cada día más fuerte, a pesar de que el chico parecía ser completamente ajeno a ese suceso.

Ese hecho sin duda parecía indicar que estaba mucho más cerca de lo que lo había estado en años de recuperar su antigua forma y sus poderes, aunque su hermana insistía que primero tenía que recuperar ella su propio cuerpo, ya que Huey podía suponer una amenaza para los planes de ambos, y Magica creía que tendrían más posibilidades de éxito si ella lograba robarle la dichosa moneda a Scrooge, y con ella recuperar su antigua apariencia y su magia al completo.

La verdad, Poe no se oponía a ese pensamiento, verdaderamente sería más fácil derrotar a alguien capaz de hacer magia si quien luchaba contra él era otra persona capaz de hacer magia. Y ya que Lena había decidido traicionarles, la única posibilidad restante era Magica.

En cuanto a Poe... bueno, desde que su hermana le contó que Huey era el trillizo que tenía magia, el cuervo se había asegurado de no perderlo de vista siempre que tuvo la oportunidad. Quería asegurarse cuan rápido era el avance del chico en su crecimiento mágico. Lo siguió por ejemplo al partido de golf que tuvo Scrooge, tarea harto difícil teniendo en cuenta que iba en un carrito junto a Launchpad McQuack, al parecer conocido por su capacidad de estrellar cualquier cosa.

En esa ocasión, recordó que casi al principio de dicha competición, Scrooge lanzó su pelota al bosque y todos inmediatamente fueron hacia allí. Poe también fue, pero antes de que pudiera encontrarlos, una especie de columna de luz se alzó hacia el cielo, y para cuando llegó se encontró con un círculo druida, solo con el círculo, no había nadie más allí, salvo... medio vehículo en el que McQuack y Huey habían ido hasta ese momento.

¿Qué había pasado? Poe no lo sabía, solo supo que estuvo buscando por los alrededores y no vio a nadie hasta que pasado un buen rato nuevamente la columna de luz volvió a verse y todos reaparecieron... junto a dos criaturas mágicas que Poe asumió que eran Kelpies, criaturas que tientan a los incautos para llevárselos al mar y... el resto es imaginable, en fin, esas criaturas le entregaron un trofeo a Dewey, al parecer había ganado lo que fuera que era eso. Y después estaba el extraño suceso de que Glomgold tenía la parte inferior de su cuerpo convertida en piedra ¿cómo había sucedido eso? ¿Qué les había pasado?

En fin, Poe prefirió no insistir en ese asunto, no cuando lo que importaba era tener vigilado a su objetivo, tarea que no siempre era fácil, especialmente cuando el chico se iba de aventuras con Scrooge y sus hermanos.

Algo que sorprendió al cuervo, fue que en uno de sus viajes diarios a la mansión McDuck, vio que de repente, allí entre todos los demás habitantes, estaba Duckworth... con un aspecto... muy fantasmal. ¿cómo era posible? ¿cómo podía él estar allí?

La oportunidad de saber la respuesta le vino cuando Donald fue llamado al despacho de Scrooge y allí le contaron que fue Huey quien logró que el mayordomo volviera del más allá. Otro signo del inmenso poder que poseía el chico, pues solo aquellos con enormes poderes mágicos podían lograr hitos como esos.

Y así, una tras otra, las pruebas del inmenso poder del trillizo mayor iban apareciendo constantemente. Que fuera capaz de traer al mayordomo de Scrooge de nuevo a la tierra de los mortales, que sintiera el poder de la joya cebo que su hermana había obligado a Lena a poner entre los tesoros que McDuck había encontrado en su última expedición, que también lograra establecer una conexión con el tiburón de monedas... sí, Poe había escuchado la conversación entre Scrooge y el trillizo mayor y sabía que eso había sido una realidad.