Es viernes, por la noche es la fiesta a la que todo el mundo iría. Hoy tenía que entregar un trabajo de verano, pero se me había olvidado y Violeta estaba en clase. Estaba en la parada de autobús rezando para que llegase a tiempo, cuando pasó Axel con la moto. Pasó de largo unos cuantos metros cuando frenó en seco y retrocedió.-¿Qué haces aquí?- dijo con el casco puesto.
-Me gustan los autobuses, déjame en paz- dije. Hoy no estaba para sus tonterías.
-¿Por que estas de mala leche?- dijo bajándose de la moto.
Me senté en la acera. Estaba demasiado nerviosa. Axel se sentó a mi lado. ¿Porque a veces era tan comprensible y otras un capullo?
-¿Y bien?-
-Se me ha olvidado un trabajo que tengo que presentar hoy- dije.
-¿Y eso es todo?- dijo levantándose.
-Vamos- me levantó del suelo.
-¿Qué haces?- dije.
-Yo te llevo- dijo poniéndome el casco.
No pude contestarle, estaba impresionada por esta faceta nueva. Me subí y me agarré fuerte a su cintura ya que no quería caerme.
Al llegar le dije que esperara y el se rió como si fuera obvio. Subí corriendo las escaleras, cogí el trabajo de mi escritorio y volví a bajar corriendo.
Al llegar me subí directamente.
-¿Qué pasa?- dije al ver que no arrancaba.
-No te has puesto el casco- me metió un mechón de pelo detrás de la oreja, me sonroje involuntariamente. Me puso el casco con cuidado al hacerlo me regaló una media sonrisa. Al segundo aceleró.
Al llegar a la universidad le di las gracias y me fui corriendo. Al entrar en clase todos me miraron y algunos se rieron.
-¿Qué pasa?- le pregunté a Nick, mi compañero de mesa.
-Tienes puesto un caso de moto en la cabeza- dijo. Me fui sin devolverle el casco a Axel. Me lo quité enseguida, estuve lo que quedaba de clase completamente avergonzada.
Al acabar las clases fui directa a la cafetería esperando encontrar a Axel para darle el casco.
-¿Buscas a alguien?- dijo Axel detrás mio.
-Perdona, iba muy estresada y se me olvidó devolverte el casco- dije entregándoselo.
-Ven conmigo a la fiesta de esta noche- dijo de repente.
-¿Qué?-
-Me lo debes, he estado muy preocupado por lo que le pasaría a mi casco- dijo poniendo cara de cachorrito.
-No, es decir, tu casco esta sano y salvo, no le ha pasado nada. Ni si quiera voy a ir a esa estúpida fiesta- dije.
-No te pongas nerviosa- dijo agarrándome de la cintura y pegándome a su cuerpo.
-No me pongo nerviosa- dije, ni siquiera yo me lo había creído. Soltó una risa.
-Vale, a las ocho en tu casa- dijo alejándose.
-No voy a ir- dije más alto de lo que esperaba.
-Te sacaré en pijama si hace falta- dijo y desapareció entre la gente.
-¿Qué acaba de pasar, estas con ese bombón?- dijo Nick agarrándome del brazo.
-Jajajajaj- los dos nos empezamos a reír. Le conté todo, y acordamos que hoy en la fiesta Nick no me dejaría a solas con él.
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Mitades imperfectas
RomanceAmalia es una chica que disfruta de la soledad. Su mayor hobby es representar por sus dibujos como ve ella la vida. Axel, un motero el cual tiene demasiados problemas sin resolver. Muchas cosas del pasado salen a la luz y se destruyen demasiadas co...