EVELYN
Me dirijo a sentarme en frente de Hank, se que no sera la ultima vez que esté en esta silla de madera.
– Que traes para mí Evelyn? - Me hace un gesto para que me ponga cómoda y empiece q contar cómo siempre que nos reunimos.
– Sinceramente le traigo muchas cosas valiosas, la más importante la he conseguido gracias a la madre de Ander, su hijo y Claudia están en el chalet de su familia, Ander le ha contado una mentira como era de esperar, le ha dicho que necesitan una semana de vacaciones aún que todo sabemos que eso es mentira. - Le digo con aires de suficiencia.
– Bien, tendrás que presentarte en ese chalet. - Me dice con su expresión de siempre y tirándose para atras.
– No creo que sea buena idea señor Bloosom... - Le digo para su asombro.
Y es verdad, para nada es buena idea que me presenté allí, Ander alomejor se creeria cualquiera historia que le contara, pero sé que Claudia no. Además ha tenido tiempo suficiente para convencer a Ander para que no confíe en mí y eso no me lo puedo permitir.
– No te he preguntado tu opinion Evelyn, recuerda nuestro trato, si me sirves perfecto, si no, ya puedes marcharte. - Dice colocándose bien las gafas.
Aún que me fastidiaba, sabía que tenía razón, teníamos un trato y tenía que cumplirlo, el ya había echo algo de su parte, ahora me toca a a mí.
– Esta bien, iré. Pero no estaré allí más de dos días, ya que Claudia podría empezar a sospechar, me inventaré una buena historia, te llamaré cuando vuelva. – Le digo levantandome de la incómoda silla.
– Es un placer hacer tratos contigo, espero que te vaya bien, pero ya te enviaré un mensaje yo, no podemos correr riesgos. - Dice mientras se levanta y me ofrece la mano.
Se la acepto y salgo por la puerta donde minutos antes he entrado. Col me mira y me hace un gesto para que le siga, se cuales son sus intenciones y ahora mismo no me puedo entretener, por lo que pasó de largo y cogo un taxi que con mucha suerte pasaba por ahí .
Una vez llegó donde estoy alojada tengo que empezar a preparar mi plan, apunto todas las ideas básicas en una libreta que tenía escondida, creo que es lo más práctico para que no se me olvide nada y poder repasar y estudiar el plan mil veces o las que hagan falta para saberlo de memoria y no cometer ningún fallo.
Me desperté después de una hora y media, como era de esperar me quedé dormida en la mesa donde estaba estudiando, como tarde o temprano tenía que ir a donde se encontraban Ander y Claudia, y por desgracia, más pronto que tarde, decidí darme unos minutos para mí y meterme a la bañera para relajarme y pensar cómo llevar a cabo este plan .
Veinte minutos después ya estaba secandome el cuerpo con una toalla blanca de algodón. Elegí lo básico. Unos jeans oscuros con una camiseta rosa palo exclusivamente de Londres, me reí mentalmente pensando que solo una prenda mía era más cara que todo el armario que tenía Claudia. Me puse mis zapatillas favoritas mientras marcaba el número de la madre de Ander para que me diera la úbicacion exacta de dónde se encontraba la casa.
Me contestó al segundo replique con su voz calmada y dulce, como siempre, tras saludarla cordialmente no me ande mucho con rodeos en pedirle la información por la cual la estaba llamando, cuando tuve lo que quería colgué casi de inmediato, no sin antes despedirme de ella con voz inocente, la que todo el mundo conocía, me puse en marcha al instante, no podía perder más tiempo...
ANDER
Me desperté muy alterado tras el sueño que acababa de tener, tenía a Claudia tumabada al lado mío, con su mano en mi pecho, acurrucada de una forma muy tierna, yo notando el calor que desprendia su maravilloso cuerpo. Pero no lo entendía, la última conversación con ella había sido desastrosa, donde claramente me había dejado claro que no me quería .
Esos recuerdos, esa tristeza se acumula otra vez en mi rostro, pero no dura mucho más de dos segundos al notar que su pequeña mano está acariciando mi abdomen de una forma cariñosa.
Me quedo observando su rostro.
Sus largas pestañas negras descansan sobre sus pómulos, su boca para un poco hinchada, más de lo habitual, con un color rojizo que me vuelve loco, sus pequeñas pecas, que aún que ella me haya dejado claro que las detesta, a mí me encantan.Abre sus grandes ojos azules, dejándome sin aliento, lo único que puedo decir son dos palabras que salen de mi boca mucho antes de pensarlas.
– Te quiero. - Dije sin poder evitarlo, al instante noté como Claudia se ponía tensa, rígida quizás. Me sentía un estupido por haber dicho esas dos palabras en ese maldito instante, pero no podía volver atrás, era la pura verdad.
- No lo hagas, Ander. - Dijo sin más, acariciándome esta vez la mejilla con mucho cuidado.
– No puedo evitarlo, Claudia. - Digo con efusividad la última palabra, tal como lo había echo ella hace segundos.
– Solo, inténtalo. - Dijo con expresión seria pero continúando su recorrido por mi rostro.
– Ya lo he echo, muchas veces, he intentado apartarme de ti, alejarme de lo que me haces sentir con tan solo una mirada Claudia, se que tú solo piensas que soy un niñato consentido, pero no es así. Claudia, si tan solo me dejaras intentarlo, te lo prometo, no te arrepentirás. - Y dije la verdad.
Claudia no contestó, se fue acercando poco a poco a mis labios, a los mismos labios que soñaban con besarla todos los dias, a todas horas, como si realmente fuéramos dos locos apasionados, estábamos tan cerca que ya podía notar su electricidad sobre los labios, cuando el timbre sonó repetidas veces.
Mierda.
Claudia y yo nos miramos y al instante bajamos de la cama casi de un salto, nadie, salvo mi madre y Laura sabía que estabamos aquí, pero sabíamos que ninguna de las dos era, bajamos y miramos antes de abrir por la mirilla de la puerta con precaución, sin hacer ningún ruido.
Cuando abrí dos frases me quedé impactado, era Evelyn, pero no la misma de siempre.
NOTA DE LA AUTORA:
Y por fin!!!!!👏🏻👏🏻👏🏻
Sé que ha pasado mucho tiempo y lo siento por ello.
Ya somos más de 14,4 K, es increíble!! ❤️❤️
Muchísimas gracias...
Hasta la semana que viene.....❤️
Ig: @pmiree15
🔥🔥🔥
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QUÍMICA
Teen FictionSi juegas con fuego te quemas Ander, oh y tanto que te quemas. -Dijo mientras me dedicaba una sonrisa triunfante