CAPÍTULO 7:¡MANTÉN LA DISTANCIA POR FAVOR!

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Hinata se sentó frente al lago donde años atrás ella y Sasuke habían compartido su primer beso. Tocó sus labios, estaban rojos y algo hinchados a causa del fogoso beso que el morocho antes le había dado, tan diferente al que había ocurrido cuando eran niños.

No entendía qué era lo que le ocurría, ella siempre creído que sus sentimientos por Naruto eran inalterables, incluso la indiferencia del rubio a su persona y que no contestase a su confesión no habían hecho mella en ellos, pero de alguna manera Sasuke se comenzaba a hacer un hueco en su corazón y estaba tambaleando, creando nuevos sentimientos y no de la misma manera que Kiba o Shino, sino algo totalmente diferente.

Lo sentía como algo peligroso, algo que nunca había sentido, ni siquiera por Naruto, un deseo incontrolable que no sabía identificar.

Su cuerpo había ardido con ganas de más, y una pasión había explotado dentro de ella, había querido acariciar los cabellos de Sasuke, dejar que explorase aún más su boca, deseaba que la hubiera acercado aún más a su cuerpo, incluso no le molestaba la escasez de aire que había sentido, solo quería seguir probando más de él. Se sonrojó tremendamente, ella nunca había tenido esa clase de pensamientos.

Lo había decidido, necesitaba mantener la distancia del Uchiha, no podía dejar que aquello fuera a más, además todo aquello no tenía lógica.

Miró cómo los últimos rayos del sol se reflejaban en aquel lago, miró a su alrededor, no había nadie, pero por si acaso activó su línea sucesoria para comprobar si había alguien por allí, pero aliviada al no percibir ninguna presencia se comenzó a despojar de casi toda su indumentaria, solo quedando en ropa interior.

Tal vez con un poco de entrenamiento conseguiría despejar su mente. Comenzó a caminar por el agua, mientras con sus manos atraía pequeñas gotas de agua, esparciéndolas y dando vueltas, casi pareciendo que danzara con el agua.

Ella estaba con Sasuke porque él sabía sobre su secreto, que se había robado el primer beso de Naruto, no entendía en qué momento la incomodidad que sentía cuando estaba con el moreno había cambiado y algo se estremecía en su pecho cuando se acercaba de más. No era la vergüenza a la que estaba acostumbrada cuando algún espécimen masculino se le acercaba, era algo distinto.

Recordó la primera vez que él le había ordenado hacerle la cena, allí descubrió una cosa en él que le parecía bastante graciosa, su amor por los tomates. La verdad es que le había sorprendido bastante, no esperaba que, por cómo se veía, le gustarían tanto. Además, la ligera sonrisa que se formaba en sus labios mientras los comía hacía que se viera tierno.

"Estuvo delicioso." Había sido feliz cuando le había dicho aquello.

Así, poco a poco ella comenzó a hacerle todas las comidas y al poco tiempo él le pidió comer con ella, y aunque al principio se sentía nerviosa y creía que sería realmente incómodo se dio cuenta de que, a pesar del silencio que se encontraban, en realidad estaba muy cómoda.

Tal vez el pelinegro no era de hablar como Kiba o Naruto, él no necesitaba eso para que el ambiente se sintiera bien, de alguna manera el silencio de Sasuke lo era. El chico no le preguntaba nada incómodo o la atosigaba a preguntas, solo se sentaba y compartían la comida. O al menos fue así al principio, pero tampoco se quejaba, se había dado cuenta de que a pesar de su hosco carácter era amable, aunque muy a su manera.

Como cuando le pidió disculpas por lo que había pasado con Sakura el día que dijo que salían. Él le había comprado una orquídea y aunque no le había pedido perdón, ni habían hablado directamente del tema. Sabía que esa era su forma de disculparse.

"Por las molestias", habían sido sus palabras, le resultaba un poco tierno lo deshonesto que era.

La verdad era que no quería ser tajante con el ojinegro, no quería poner límites a su relación. Pero temía que Naruto se hiciera una idea equivocada, conociendo lo atolondrado que era el rubio seguro que pensaba que salían juntos. Y si ya estando soltera le costaba que el ojiazul le hiciera caso, no se imaginaba lo difícil que se volvería todo si ahora "salía con su mejor amigo", sería imposible que la viera como algo más. De verdad que no sabía como todo había acabado de aquella manera. Ella solo había querido mantener en secreto su beso con Naruto.

Después de un rato notó como el cansancio comenzaba a apoderarse de su cuerpo, no sabía cuánto tiempo había estado así, pero se había quedado mucho más relajada, pero cuando estaba dispuesta a salir del lago la figura del moreno apareció.

—Hinata...—susurró al verla allí, semi desnuda.

La ojiperla de la sorpresa no pudo contener su concentración haciendo que cayera al agua, y Sasuke rápidamente corrió a ayudar.

Cuando notó como él la tenía entre sus brazos sintió como sus ideas de mantenerse alejada de él comenzaban a tambalearse, tenía que hacer algo, porque sentía que el muro que los separaba cada vez se hacía más y más fino.

Notas de la autora: Bueno, aquí esta el siguiente cap. Espero que les guste. Pobre Hina, ella solo quiere mantener la distancia, pero no creo que Sasuke le deje hacerlo. Gracias a todos por siempre leer y más a los que me dejan un comentario.

Primer beso [✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora