¿Crees en la reencarnación? pues en esta historia de los ocho pecados capitales y aquí encontrarás la trágica historia de dos amantes que vieron morir al amor de su vida pero con el paso de los años se reencontraron junto con las respuestas a las in...
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Los ahora seis pecados capitales estaban en Liones, trabajando en la taberna o viviendo los días como si fueran los últimos debido a la gran guerra que se avecinaba, todos hacían algo a excepción de Ban pues en su mente muchas cosas estaban rondando, la primera es el cómo pudo tan siquiera pensar en matar a su mejor amigo, la segunda era si en verdad podría revivir a Elaine y la tercera era si en verdad valía la pena pues desde que Lena llegó todo su mundo estaba más que complicado. Por eso, Ban decidió cambiar sus ropas y empacar para dirigirse al bosque de las hadas pues pensó que este viaje podría ser de ayuda.
-¿Qué haces, Jericho?- cuestionó al ver como la chica lo seguía.
-Voy contigo, te debo mi vida- respondió.
-Solo no estorbes- dijo serio Ban.
Por otro lado, King también estaba demasiado preocupado por lo que podría suceder y justo cuando sus pensamientos se anudaban cada vez más escuchó la conversación de Ban y decidió ir con él pues quería ver a su bosque una vez más.
Los tres chicos cuando estaban a punto de bajarse de la mamá de Hawk para emprender el viaje sintieron una pequeña brisa que en ella cargaba un delicioso aroma a claveles y luego una dulce voz resonó en los oídos de los tres.
-Así que se van sin despedirse- apareció Lena con la parte superior de un corsé, su capa y la parte baja que se parecía mucho a la de Merlín a excepción del estilo de sus botas -Eso sí que dolió- quitó su capucha y dejó ver su rostro.
-¿Quién es ella?- le preguntó a Ban la de coleta pero esta fue ignorada -Ban- llamó nuevamente y este parecía en trance.
-Soy Lena- se acercó a la chica y extendió la mano para saludarla - un placer- sonrió.
-Espere, usted es la capitana de las fuerzas especiales de los caballeros sacros- se sorprendió y soltó su mano para así arrodillarse.
-También es la reina de las hadas y el primer pecado capital- dijo entre dientes King.
-¡Eh!- dejó salir un chillido de sorpresa la caballero sacro.
-Oso, no digas esas cosas- pegó en su frente con el dedo corazón e índice - Soy solo Lena- alguien la tomo de la muñeca y la alejó de los demás sin hacer caso a las palabras que las chicas lanzaba.
-Suéltame- era jaloneada hasta el punto de casi caer- Maldición, Zorro, suéltame- fue ignorada nuevamente- Dije que me sueltes- cortó la mano de Ban para que este la soltara al fin.
-¿En dónde estabas?- miraba el lugar en donde se supone debía estar su mano pero en cambio solo salía humo y sangre.
-Eso no es de tu incumbencia- se dio la vuelta y empezó a caminar de regreso a la taberna pero Ban le atacó con sus nunchakus y esta quedó partida a la mitad. Cuando su cuerpo volvió a unirse reclamó -¿Qué demonios sucede contigo?- sacó su lanza y se puso en posición de combate.
