Como En Las Vegas

5

El sábado por la mañana Yuzu se había levantado temprano (a las 7) para poder alistarse e ir a la estación de trenes; una vez duchada, se fue a prepararse el desayuno y el de Harumin; Harumin no la dejaría salir de su casa sin que antes comiera algo.

-Buenos días yuzuchi

-Buenos días Harumin, ven siéntate, el desayuno está servido.

-Gracias, irás a algún lado?

-Sí, ayer un chico que corría chocó conmigo y Andrew casualmente pasaba por ahí, y fue  a ayudarme, comimos juntos y quedamos en vernos hoy en la terminal de trenes para poder ir al parque de diversiones.

-Parece que te llevas bien con ese chico.

-Sí, algo así, es muy amable y me cae bien, pero ese chico no tiene llenadera (sorprendida al recordar que ayer comieron mucho) pidió dos órdenes de comidas diferentes solo para él, pero luego se quejó porque había ordenado mucho, así que compartimos el platillo que le estaba sobrando, luego de que acabamos de comer estábamos muy llenos que nos costaba respirar, platicamos de cosas tribales mientras la comida bajaba, y después pidió el postre, yo había pedido algo ligero, pero él nuevamente pidió dos diferentes, dijo que era porque no se podía decidir por cual comer y entonces jajaja volví a comer con él el postre que sobraba, estaba haciendo unos pucheros tan lindos que no pude negarme , volvimos a esperar un rato para que nos retirásemos, jajaja parecíamos cachorros que recién terminaban de comer en exceso; de esos que les crece la pancita notablemente y caminan abiertos, íbamos tan lento que dolía caminar, para cuando pudimos llegar al centro ya caminábamos bien, pero se empecimó a invitarme a un helado jajajaja

-Y sus pucheros eran demasiado lindos y no podías negarte cierto? (interrumpió Harumin con una sonrisa divertida mientras escuchaba la historia)

-(asintió varias veces emocionada y un poco avergonzada)… cierto; fue muy agradable pasar el tiempo con él y quedamos en vernos hoy para ir al parque de diversiones, hacía mucho que no voy a un parque de diversiones Haru… la última vez que fui fue cuando tú me invitaste mientras aun estábamos en el instituto (lo dijo con un poco de nostalgia una que claramente Harumin había notado).

-Lo recuerdo (trató de no profundizar) no sabes cuánto me alegra de que te estés divirtiendo en compañía de ese chico y que te hubiese hecho comer más que cualquier otro día (sonrisa) así que hoy iras, te pondrás cómoda y guapa e irás, posiblemente te haga  comer mucho  nuevamente pero te divertirás, de acuerdo?.

-jajajajaja (risa divertida) de acuerdo.
(Rió Harumin divertida)

-Quizás y ese chico me guste para ti (dijo Harumin con una ceja levantada en complicidad junto con una curvatura en sus labios que reflejaban picardía queriendo molestar a Yuzu con ello).

-Quizás y a mí también me guste (confesó un poco avergonzada y sonrojada mientras evitaba la mirada de su amiga).

A Harumin se les descompuso la picardía y se sorprendió por la confesión de la rubia y en cuestión de segundos su sonrisa regresó pero ahora era más cálida y dejó que el silencio gobernara, no sabía que responder, la habían agarrado en curva y no sabía cómo salir de ello, así que solo se dedicó a terminar su desayuno.

Una vez que acabaron el desayuno Harumin se ofreció a lavar los platos y mandó a Yuzu a que se alistara para su salida y mientras lo hacía no dejaba de pensar en lo que dijo Yuzu “quizás y a mí también me guste” cómo es que su pequeña broma había resultado en algo tan serio como eso, no es que no le alegrara que al fin esté pasando página, simplemente que este caso era realmente importante  y se sentía aliviada de que su rostro no haya reflejado su preocupación; cuando acabó con los platos se fue a su cuarto tomó su teléfono y volvió a la sala a sentarse mientras esperaba a Yuzu a que saliera de su cuarto para poder despedirse de ella le escribía un mensaje a Matsuri.