CAPÍTULO 2: LA MEJOR NOCHE DE BODAS
Sebastian estaba bebiendo sentado en una silla mientras contemplaba el primer baile del matrimonio Hummel-Crawford. Estaba perfectamente trajeado aunque había aflojado el nudo de la corbata azul. El salón era precioso y estaba elegantemente decorado con flores blancas y azules y telas en tonos grises, azules, plateados y negros.
Para poder ver esa escena se había llenado la copa de vino y había dejado el resto de la botella a su lado. No le gustaba ese matrimonio, no cuando había comprobado que Adam no era el mejor compañero para su amigo.
– ¿Qué piensas? – Rachel se sentó a su lado con otra copa de vino en una mano y otra botella en la otra. Llevaba un delicado vestido azul a juego con la decoración, que por algo había sido la dama de honor.
– ¿Está mal que prefiera que mi mejor amigo se hubiera casado con el gigoló de su despedida de soltero en vez de con el que ahora es su marido? – El ojiverde susurró.
– No, al menos sabemos que tendría asegurados buenos orgasmos. – La joven comentó divertida.
– Hablo en serio. – El más alto volvió a llenarse la copa de vino.
– Te entiendo. Adam es... Adam. Es aburrido, nada caballeroso, hace con Kurt lo que quiere, le ha impedido realizar sus sueños y además ahora sabemos que es incapaz de darle orgasmos... – La joven terminó de beber el rojo líquido que tenía en su copa y la volvió a llenar.
– Rachel, cariño. Estás muy necesitada. Tendremos que buscar a alguien que te haga divertirte un poco. Si quieres, puedo darte el teléfono de la agencia de chicos de compañía. Si no quieres el mismo que el que estuvo con Kurt había un rubio que estaba para morirse. Iba a contratar a ese pero sólo trabaja por las mañanas. – Smythe puso cara de desagrado.
– Ese te lo dejo a ti, tú también estás muy necesitado. Cuando llegue a Nueva York encontraré a alguien que me satisfaga sin necesidad de pagarlo. – Berry comentó presuntuosa.
Miraron como Burt abrazaba a Kurt. Sabían que al padre del novio tampoco estaba muy feliz. Nadie que apreciara al castaño lo estaba. Adam significaba la renuncia a los sueños del ojiazul, su renuncia a ser actor de Broadway, a vivir en Nueva York, a dedicarse al teatro o en su defecto a la moda. Sin embargo, todo quedó en nada cuando lo rechazaron en NYADA y Crawford fue aceptado en la Universidad de Ohio. Ese día los deseos de Kurt quedaron en un segundo plano para ser el chico que apoya a su pareja. Fueron días difíciles, donde todos los amigos y familiares de Hummel intentaban hacerlo entrar en razón pero no lo conseguían, él siempre había sido muy terco y era difícil hacer que cambiara de opinión.
***
Kurt y Adam llegaron al hotel donde pasarían la noche de bodas. Una amable recepcionista les atendió y registró su entrada antes de darles la llave de la habitación. Un botones les acompañó hasta allí, cargando la maleta que llevaban.
La pareja entró para ver una suite muy elegante. Los tonos beige, ocre y blanco se entremezclaban en la sala. Había una mesa con un jarrón con flores y cuatro sillas alrededor, unos sillones frente a una televisión y una gran cama para dos.
El rubio se quitó el abrigo y la chaqueta de su traje mientras su marido caminaba hasta el baño con su neceser para arreglarse. Quería estar sexy para su noche de bodas. Cuando Kurt salió del aseo en ropa interior, se encontró a su pareja tumbado en la cama. Se acercó y empezó a besarlo con amor.
– No, Kurt. No me apetece, estoy cansado. – Protestó Crawford.
– Vamos... Es nuestra noche de bodas... – Pidió el castaño.
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Amor o Pasión (Glee Fanfic boyxboy)
CasualeKurt está a punto de casarse con Adam y sus amigos, Rachel y Sebastian le preparan una despedida de soltero con un "chico de compañía" que cambiará la manera en la que Kurt percibe el mundo...