Capítulo 18

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Claro que desde que había tenido a sus retoños, parecía que Yugi no sólo tenía un sexto sentido en cuanto a sus hijos se trataba, si no que, efectivamente, en muchas situaciones de su vida no se había equivocado al confiar en sus instintos. Y en ese preciso instante, con la castaña que hasta hace algún tiempo consideraba su mejor amiga, frente a ellos, con un semblante no tan apacible y un arma apuntando hacia el amor de su vida, agradecía no haberse equivocado en mandar a Mokuba junto a sus hijos a un lugar seguro, con un grupo de guardaespaldas suficiente para que no corrieran peligro de ninguna manera.

—¿Por qué haces esto Tea? Creí que eras mi amiga! —exclamó el antiguo Rey de los duelos, intentando salir de detrás del cuerpo del castaño, que lo cubría para que no se expusiera al peligro—.

—¿Por qué, dices? Esa debería ser mi pregunta Yugi ¿Por qué él? ¡¿Qué tiene él que no tenga yo?! —fue la respuesta que la castaña le dio sin bajar el arma—.

Aquello hizo que su corazón se estrujara, sabía que ella amaba al faraón y cuando había pensado estar enamorado de ella, se lo había dejado muy claro. Había renunciado a que ella lo viera como algo más que un amigo desde ese preciso instante y simplemente empezó a fijarse en Seto por el hecho de que Atem pasaba mucho tiempo con él antes de irse. No había podido evitarlo, compartían un cuerpo al final de cuentas.

Preguntarle que veía en Seto Kaiba era algo a lo que no tenía respuesta, era como si le preguntasen porque amaba a sus hijos, no había una respuesta que pudiera expresar con palabras.

—Estuve para ti Yugi. Te apoyé, ayudé a Atem, estuve para ustedes. Primero Atem. y ahora tú, Yugi ¿Por qué? —el tono de la castaña era lastimero pero no podía hacer nada, no podía divisar sus ojos ya que los tenía cubiertos por su cabello—. Él te lastimó tanto, y tú, tuviste a sus hijos! Debieron ser MIS hijos!

—Tea... —susurró, su mano estaba fuertemente aferrada a la del dueño de la Kaiba Corp. no planeaba soltarlo pero entendía que al menos su amiga necesitaba una explicación de porque Seto y no ella—.

Y aunque estaba manteniendo la calma, Seto odiaba escuchar por boca de otras personas el daño que le había hecho a Yugi, un daño que nunca había sido su intensión causarle y que, realmente la culpable de que hubiera pasado tanto tiempo apartado de su pequeño e hijos era la misma que ahora le apuntaba con un arma de fuego.

Sin embargo, llegados a este punto, Seto no tenía más tiempo que perder, si bien era cierto que para los duelos era muy bueno y sus estrategias las planeaba en el momento, esta vez no era solamente la vida de su hermano la que se encontraba en peligro, sino también la de su familia y el amor de su vida. 
Llevó su mano libre a su bolsillo y activo la señal de alarma que siempre llevaba consigo, aquella K que siempre llevaba en el cuello de sus chaquetas pero que ahora no se encontraba usando por lo cual debía llevarla en su bolsillo, para que sus guardias y seguridad fueran alertados de que algo sucedía en su mansión. Aprovechaba que Yugi seguía distrayendo a la castaña aunque aquello no le gustara demasiado pues se estaba exponiendo a un arranque de locura por parte de la misma.

Por su parte, ella no podía, o más bien, se negaba a entender el hecho de que Yugi siguiese tomando la mano del idiota de Kaiba, en lugar de correr a sus brazos.

—Es tu culpa! —exclamó de pronto, no queriendo soportar más la mirada que le lanzaba el de cabello tricolor, dirigiendo el cañón de su arma en dirección a Seto, el cual le devolvía la mirada frívolamente—. Si no hubiera sido por ti, Yugi no se habría ido, y sabes qué? Yo habría evitado que esos mocosos nacieran —su tono era de burla pero aquella confesión hizo que la pareja frente a ella la mirase con horror—.

—Tea... —sus palabras fueron interrumpidas por el fuerte sonido del arma al ser disparada, lo que ocasionó que Seto lo jalara y lo pusiera detrás de su cuerpo para protegerle—.

Esperaba escuchar el grito de dolor de Seto o al menos escuchar una queja, ya que había cerrado los ojos, sin embargo, no llegó ni lo uno ni lo otro, tampoco lo sintió flaquear ni desvanecerse, por lo cual al abrir un poco los ojos, pudo notar un extraño y fuerte resplandor que iluminó la sala en ese preciso instante.

Tanto Yugi como Seto sabían a quien le pertenecía, el castaño por su parte había abrazado más al menor para cubrirlo con su cuerpo del fuerte viento que venía acompañando a aquella luz cegadora.
Cuando esta menguó, la figura que apareció ahí los dejó helados a todos, no es que Atem hubiera cambiado demasiado, pero su presencia seguía siendo igual de imponente que siempre, aunque lo más sorprendente era que no se encontraba sólo, no, una figura alta, casi del tamaño del mismo Seto estaba parada a su lado. Ambos hombres desprendían fuerza, se viera por donde se viera y aquello no hacía más que tenerlos a todos con la boca abierta.

—Creo que llegamos en el momento justo faraón —la voz monótona del hombre que acompañaba al de cabello tricolor mayor sacó a la pareja de su shock inicial—.

—Seth, cuántas veces te he dicho que no me digas Faraón? —la mueca de molestia de parte de Atem no pasó desapercibida para nadie, sin embargo, sabía que no tenía mucho tiempo para estar en esa época pues sin el rompecabezas del milenio ayudando, aquello era mucho más difícil de manejar, así que iría directo al punto—. Tea, el por qué Seto o Seth y no tú, es muy simple, tanto para mí como para mi compañero, ellos son las personas adecuadas, son nuestras almas gemelas, es solo por eso.

Claro que Atem de faraón era muy distinto a ese Yami tímido que apenas y recordaba quien era, pero que se desenvolvía muy bien en el duelo de monstruos.

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Okay, ahora si me demoré una eternidad xdd porfavor no me odien u.u

Acabo de volver a leer todo el fanfic para poder continuarlo porque no me convencía este cap, pero creo que ya está listo~
Qué opinan de la aparición de Atem y Seth? Planeaba meterlos en algún momento más adelante no como en el sueño de Yugi sino ya siendo presentes, pero creo que ahora era ya el momento pues Atem al ser mayor que Yugi entiende un poco mejor de estas cosas, no se si me hago entender pero espero que el Cap les guste, ya casi terminamos, este es uno de los últimos caps ya, no se cuantos quedan exactamente pero procuraré actualizar pronto.

Por cierto, cuídense mucho, quédense en casa y cuiden a sus seres queridos, ya saben que mientras más colaboremos más pronto volveremos a ser libres~

#QuédateEnCasa

Deshielando tu corazón (Rivalshipping) [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora