—Ugh, maldita sea, no lo entiendo, todo conocimiento lo sé, pero respecto a lo que siento es algo confuso y nulo... ¡Qué frustrante es! —Dijo maldiciendo por lo bajo. Era terrible y solo pudo desahogarse con su amigo mientras salían de una clase e iban a otra.
—¿Sabes qué es el amor? —Dijo directamente el de cabellos lilas, viéndolo seriamente.
—Ahh... ¿..Mentira barata para qué los seres vivos follen..? —Contestó con duda.
—Amor, Shaka, amor...
—Pronunció el Aries. Era bastante complicado para ambos hablar de eso.—No, y si vas a decirlo, dilo ya. No estoy para juegos. —Dijo con molestia. Quería las respuestas claras y rápidas.
—Suspiró. —Todo eso que me dices sobre tus sentimientos es aquello que estás sintiendo por Milo... Aunque por una parte, veo que sientes celos, por ese tal Camus, pero sé que eres mejor que ese tonto...
—Espero que no hablen mal de mi o parecido.
—Camus habló quien su daba su paso de lado, cada que podía, llegaba a molestarlo.—¡Ya cállate, maldito francés y vete a joderle a alguien más! —Le dijo con los humos al cien al de Acuario.
—¡Uy, con esa forma de ser, Milo nunca querrá estar contigo!
—¡Y tu con esa fea cara, Milo nunca se fijaría en ti!
Ambos jóvenes empezaron a llorar al darse cuenta que les dolía es que Milo no se quedara con ninguno de los dos, y lo que parecía es que competían por él.
—Es mejor que te quedes de manos cruzadas, porqué no lograras nada y seré yo quien se quede con Milo...
—Profesó Camus.—Es mejor que tenga que irme primero... —Dijo adelantando su paso, quedando enfrente de ambos chicos. —Y por cierto, Milo no es objeto, el tiene su libertad y derecho de quedarse con quien le plazca, pero, estoy seguro que no seria buena opción que se quedara con un hipócrita como tú... Así que sepas que yo también lucharé por él...
Sin más, dejo a ambos jóvenes expectantes, solo que acuario estaba mas que enojado. Aries presenció todo eso, no supo ni donde hacerse.
— Ya valió madres, pero de la buena. —Pensó.
[...]
Llego a su casa, llendo directamente para ir a encerrarse en su cuarto y se tumbó a la cama, aquella cama donde sucedió unos de sus primeros besos con su amigo del alma.
—...Milo... —Susurró de manera decaída, recordando todo aquello que sucedió esa noche, donde probaría él dulce sabor de sus labios. Los besos, sus halagos, sus caricias. Y luego recordó aquello que le dijo a Camus.
¿Porque dijo todo eso? Simplemente lo dijo sin pensar y eso traería consecuencias.
— <<...Yo también lucharé por él...>>
Lo había pensado varias veces en su cabeza, y cada vez no tenía ningún sentido. Solo agitó su cabeza. Estaba mal, demasiado mal y lo único que llegó de sus recuerdos fue:
—<<...Amor, Shaka, amor...>> —Escuchaba a su amigo decirle antes de que viniera ese francés, arruinando todo con su simple presencia. Entonces surgió otra fugaz pregunta.
¿Estaba enamorado de Milo?
Era una idea muy descabellada, nunca imaginó una relación más allá de lo que siempre fueron y eso es ser mejores amigos. Y había una parte que no le dejaba en paz y que le indicaba que todo lo que sentía concluía a lo que temía, que todo fuera verdad.
Que había profundos sentimientos al de Escorpión y eso le dolía intensamente. No quería estar sin él, no soportaría verlo con el idiota de Camus.
Busco su celular y fue a revisar sus fotos con él. Vio su sonrisa, vio su singular ceño, vio sus ojos. Había algo mágico en él, era lindo, tierno y divertido. Soltó un suspiro, eso era muy poco para describirle.
Sentía demasiado por él, que no era entendible; con cada abrazo sentía calor, con cada beso sentía dulzura, con cada mirada sentía un deshielo, con cada palabra sentía un vuelco de estómago.
Era peor como se imaginaba; Dolor, tristeza, desilusión, celos... Y mucho más. ¿Qué tal si era un juego para él? Puede botarlo por ahí o siquiera alejarse de él porque de verdad caía en su red.
Y dolía, le dolía saber que fuera así, que Milo solo lo usaría y no podría culparle. Se sintió indefenso. Después de todo, soltó una finas lágrimas que pasaron a ser gruesas. Eran amargas, todo por creer que era amor, amor no correspondido.
Y cayo dentro de los brazos del sueño, pensando en ser acogido por el escorpión, su escorpión, dándole cariñitos o palabras dulces.
Sin saber que era todo lo contrario a lo que pensaba y que en realidad su bichito le amaba incondicionalmente.
[...]
0h Fack...
Siento que me salió algo triste, pero me llego un poco de inspiración.
Cual comentario ya sea pregunta o sugerencia será totalmente tomado en cuenta. Agradezco en que lean esta historia.
Sin más, que tengan buen día, tarde o noche.
✔#??
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¿Piropos? || Milo x Shaka |Editando|
Fanfiction»Quien fuera hambre, para darte tres veces al día.- »¿Hambre?, ¿darme?, ¿darme qué?- Milo Escorpio, joven de apenas 18 años, se mete a una aventura para conquistar al hombre de su vida pero con una inusual técnica. »Piropos« Pero simplemente su amad...