¿Piropos? || Milo x Shaka |Editando|

#16??

—<<Tu trabajo será interceptarlo y entretenerlo...>>

Aquellas palabras las recordaba con seriedad, puesto que era para ayudar de cierta forma a que Camus se quedará con Milo, eso le dolía el alma. Repaso una y otra vez su plan, si se podía llamar así a la tontería que estaba por cometer.

Saga estaba afuera de los salones, recargado en la pared mientras revisaba la hora por cuarta vez su celular. Según tenía entendido, el rubio se quedaba esperando al griego para irse juntos, y en caso de que pasara la hora, iba por él.

—Qué estupidez... —Dijo para sí mismo, al recordar los días vigilando a ambos chicos.

Reviso por quinta vez, ya era demasiado tarde y quizás, Acuario estaba mal en querer actuar ahora. No fue hasta cuando una cabecilla dorada se asomaba para salir. Parecía buscar a alguien, y sabía quien.

—Bingo... —Susurró para tomar camino hacia el Virgo.

—Maldito seas, Milo... ¿Por que has de tardar tanto? —Maldecía por debajo. Siempre era lo mismo, el griego salía un poco tarde pero esto ya era el colmo. —Cuándo te vea te juro qué te mato... ¿Quizás de abrazos? Si, eso seguro te asfixia.

Shaka solo acomodaba su mochila, listo para irse, pero se topo con cierta cara familiar que le veía. Por el contrario, que solo se acercaba más y más. Llegando a donde estaba parado.

—¡Oye, alacran del demonio! —Paró su regañadera al darse cuenta de quien era. —Pero si eres tú, Kanon... Perdonarme, creí que eras Milo... Ya sabes, por los cabellos azules... —Musitó avergonzado por confundir a Milo con su amigo.

—¿Kanon? —Pensó con nostalgia. —No, no te preocupes, ja... —Dijo forzosamente.

—¿De casualidad no has visto a Milo? Lo he estado esperando y él que no viene. —Pregunta, esperando una respuesta positiva.

—Eh, no... No he podido verlo después de clases, de seguro está ocupado haciendo una tontería, ya sabes como es él... —Se sentía bastante incómodo al tener que fingir ser su hermano.

—Ya veo, de todas formas, gracias Kanon... —Le agradeció con una sonrisa. A su vista, el griego lucía un tanto diferente, tal vez era cosa suya.

—...Claro... —Su sonrisa era linda, era diferente por mucho a los que le daba Camus y eso le hizo sentir un poco de culpabilidad, pero debía hacerlo. —Shaka. —Llamó.