Play Dirty

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Una semana.
Había estado trabajando una semana y se sentía realmente bien.
Ya conseguía ser eficiente en muchas tareas y a pesar de todo lo que estaba en su mente y que a veces era muy torpe había conseguido ser útil en la cafetería y seguirle el paso a su padre, cosa que para ella era una hazaña.
Token entró lentamente por la puerta junto a Jimmy, Tweek sonrió ampliamente y se acercó a recibirlos.
Se permitió sentarse a conversar con ellos un momento ya que el lugar estaba solo, era apenas de tarde y siendo la mitad de la semana no muchas personas frecuentaban en ese lapso la cafetería.

–Vas a seguir con eso ¿He?– pregunto Token cruzandose de brazos mientras Jimmy bebía de un vaso un poco de café.

–No voy a retroceder, ya llegue demasiado lejos–

–¿Cuanto esta pagandote tu padre a la semana?–

La rubia miró avergonzada la mesa mientras jugaba con sus dedos, Jimmy estaba expectante.

–$100... p-pero...–

Jimmy escupió su café y miró a la rubia totalmente sorprendido, se rio y festejo aquello.

–B-Bueno, Tucker se v-va a llevar una buena sorpresa cuando se lo des ¿he?¿Q-Qué le pedirías a cambio?–

La rubia negó con la cabeza.

–Tienes que hacer algo para que tus padres no sospechen sobre en que gastas tu dinero, no puedes dárselo todo– dijo Token con disgusto, aquel plan era algo que no le gustaba para nada... aunque se tratara de apoyar a Craig la verdad era que no le agradaba en absoluto mentirle a los padres de su amiga ni que Tweek tuviera que trabajar para que el pelinegro obtuviera algún beneficio, pero también sabía que no se podía negociar con su amiga y que siendo tan terca como era, seria imposible que cambiara de opinión.

–No se lo daré todo... si l-le doy la mitad será suficiente, creo que estara bien y creo que él podrá mejorar su situación...–

–¿Te das cuenta de que estás manteniendo a un tipo que ni siquiera sabe de tu existencia?– Hablo su amigo con la intención de herir, Tweek infló sus mofletes en un puchero y solo volteo hacia otro lado.

–O-O-Ojala Tweek estuviera enamorada de mi– se rio Jimmy, Tweek lo abrazo cariñosamente.

–No creo, eres demasiado bueno para mi Jim–

–L-Lo se nena, p-pero es divertido que puedas s-soñar con algo así–

Ambos rieron divertidos, Token no pudo evitar sonreír ante sus bromas incluso con el mal humor que tenía en ese momento... aun con todo, era bastante agradable pasar tiempo con sus amigos.

-

Clyde y Craig caminaban tranquilamente por los pasillos, eran las primeras horas de las clases y debían recoger algunos libros, la sorpresa llegó cuando, al abrir los casilleros, Craig se dio cuenta de la presencia de algo que él no recordaba haber escondido ahí.

Guardó silencio y lo miró expectante... un sobre amarillo de papel, estaba sorprendido de aquello pero ciertamente tenía curiosidad.

Sacó el sobre discretamente y fue al sanitario disculpándose un momento, pensando en que no quería que Clyde se inmiscuyera en el asunto y necesitaba saber qué era aquello.

Una vez dentro de un cubiculo, al abrir el sobre se encontró con tres billetes de veinte dólares cada uno... sus ojos se abrieron con sorpresa y algo de temor.

Era la cantidad de dinero que daba más problemas que soluciones... pero estando como estaba...

Suspiró con frustración y colocó el dinero en su cartera, pensando que era exactamente lo que había pasado... decidió que no los gastaria, esperaría unos días por si alguien iba a reclamar el dinero, si así era podría devolverlo fácilmente, de no ser así... tenía una cantidad considerable de dinero para comprar algo de comida... incluso fruta quizás...

Sonrió levemente, con la vaga esperanza de que nadie fuese a decirle algo.

Y espero... los dias pasaron con tranquilidad y nadie dijo nada.

Con el tiempo las cosas comenzaron a complicarse, no porque no sucediera lo que él quería... de hecho, nadie había ido a reclamar el dinero ni nada parecido, pero ahora había algo más que lo tenía preocupado y bastante receloso de la situación.

Había aparecido otro sobre la semana siguiente... 

Misma cantidad, con el mismo sobre conteniendo los tres billetes de veinte dólares...

La situación ya se aproximaba a lo ridiculo, no entendia nada y estaba sintiendo que aquello no estaba bien... Ahora se sentía culpable...

Se había gastado la primera cantidad en comida y cosas que necesitaban en el departamento unos días después de que nadie le dijera nada sobre el dinero, pensando en que era una oportunidad única y no volvería a repetirse.

Pero ahora...

Se sentía como un estúpido ya que incluso se había confiado un poco, de hecho, había rechazado algunos trabajos que podía hacer porque ahora contaba con suficiente efectivo.

Trabajaba en un pequeño bar unas cuantas horas hasta que oscurecía y regresaba con Kenny a casa.

Había dejado lo de las chicas esa semana, le resultaba agradable no estar haciendo aquello, después de todo, aunque podía elegir con quien hacerlo y recibir dinero a cambio, la experiencia era algo vacío y sin sentido, por lo menos asi lo veia... no era algo que disfrutara y  además estaba el montón de cosas en su mente...el detalle de los sobres seguía inquietando...

Cuando el tercer sobre llego, las cosas fueron más serias... ya era una cantidad de dinero bastante considerable y se sentía mal de aceptarlo.

Se reunió ese fin de semana con Marjorine y Kenny para hablarles sobre el tema.

Termino contando todas y cada una de las cosas que habia pensando al respecto, diciendoles que habia comprado cosas para la casa, de hecho nada que lo beneficiara a él solamente.

Kenny se sintió realmente curioso por aquello, era algo inusual, así que decidió interrogar un poco a Craig mientras Marjorine prestaba mucha atención.

–¿Cuando suele aparecer el dinero en tu casillero?–

–Los lunes, siempre que reviso después de la primera clase, está ahí– dijo serenamente, Kenny pensó en ello.

–¿Tienes sospechas de alguien que pueda estarlo haciendo?– dijo con seriedad, Craig negó con la cabeza.

–Tiene que ser alguien que gane muy bien... además probablemente no te este dando todo, también debe ser alguien que no asista a la primera clase los lunes... y probablemente sea alguien te conoce, no creo que un desconocido le generara tanta simpatía como para darle su sueldo– hablo Marjorine con seguridad, Kenny se rió feliz ante su actitud de investigación.

–Bien detective Marjorine ¿Nos ayudarás a descubrir quien es?–

La rubia de cabellos lacios asintió con amabilidad y una sonrisa dulce, Craig solo le agradeció con una leve reverencia mientras Kenny la abrazaba efusivamente por acceder a cooperar con aquello.

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HOLA

Ya vengo con otra parte por que me gusta escribir esto x3

espero que les guste y espero que comenten que opinan

Gracias por leer y votar x3