Changed. -Sterek-

.Derek.

Derek había sido el primero en notar la extraña actitud de Stiles, después de los sucesos con Monroe el chico había cambiado mucho. Al principio eran cosas normales, como falta de sueño o apetito, pero con el tiempo aquello fue creciendo, cambiando el aspecto y la mentalidad del chico, lo cual inmediatamente alertó al mayor y preocupó a la manda.

Derek no estaba seguro del porque le interesaba tanto aquel chico, pero de lo que si estaba seguro era de que debía hacer algo para evitar alguna desgracia y que este terminase como él. Definitivamente no quería a alguien más viviendo la vida que el vivía. Así que después de una pequeña charla con la manada, este de ofreció para hablar con Stiles y averiguar al menos algo, cosa que sabía que no sería para nada fácil.

Así que ideó un pequeño plan, que involucraba levantarse temprano para comprar un par de donas y café descafeinado (pues Stiles no podía consumir algún otro tipo) e ir a su casa para platicar tranquilamente, lo cual se había ido al caño cuando descubrió que este le apuntaba con un arma, atando muchos cabos en su cabeza, pues casi podía tener una idea de lo que el chico ocultaba.
..
Derek abrió los ojos completamente confundido, pues no recordaba haberse quedado dormido en algún comento, con el plus de que también sentía algo de dolor en la parte trasera de su cabeza y un ligero ardor en la espalda.

— Qué rayos? -soltó en un gruñido, intentando levantarse, fallando por completo, pues algo le sostenía por las extremidades- — Stiles, Por qué estoy encadenado a tu cama? -soltó con molestia, buscándole con la mirada.
— Por qué viste algo que no deberías haber visto -suspiró, viéndole desde la puerta.
— Piensas matarme o algo así? -preguntó sin emoción, frunciendo el ceño ligeramente.
— No, claro que no -contestó mientras se acercaba- — Quiero hacer un trato contigo -sonrió ligeramente.
— Y para eso tenías que encadenarme? -le observo con una ceja alzada, elevando ligeramente las cadenas en sus muñecas.
— Solo soy precavido -encogió los hombros- — Muy bien -suspiró ligeramente- — Tú no dices nada de esto y yo no cuento tu peor secreto -sonrió de nuevo, falsamente, pues este no estaba para nada feliz.
— Mi peor secreto? -le observo extrañado- — Yo ya no tengo más secretos que revelar, la manada sabe todo de mi -respondió algo confundido.
— Uh...Estas seguro? -inclinó su sonrisa en una mueca- — Mi cumpleaños 18...- se acercó extrañamente, pasando uno de sus dedos por el centro de su pierna- —Te trae algún recuerdo? -le observo curiosamente.
— Yo no....rayos...-parpadeó un par de veces con la vista en el techo, recordando lo que había pasado- — Bien, tú ganas, Stiles -suspiró rendido- — Pero ahora suéltame, antes de que yo mismo lo haga -cerró los ojos con molestia.
— Muy bien -sonrió ligeramente para después desatarle en segundos.

Inmediatamente Derek intento tomarle por el cuello para hacer una de sus típicas estampadas contra la pared, pero este se apartó con agilidad, tomándole por las muñecas y estampándole a él.

— Jo...der -se quejo completamente sorprendido.
— Ya no soy ese chico indefenso Derek -aclaró, llevando una de sus manos a la nuca del mayor para pegarle mucho más a la pared- — Ya no más -recalcó, en un tono que causó escalofríos en el mayor.
— Stiles...-susurró casi en un hilo de voz, sintiendo como el chico comenzaba a presionarle mucho más contra la pared.
— Me he dado cuenta -susurró, acercándose a su oído - — El uso adecuado de una buena técnica es mucho más poderoso que la fuerza, no importa cuanta fuerza tengas, te ganare -soltó, casi escupiendo las palabras con odio.

Derek parpadeo un par de veces completamente confundido, De verdad Stiles había dicho eso?. Jamás en la vida le había imaginado de aquella forma, incluso la loca idea de que ese chico no era Stiles había comenzado a vagar por su cabeza.

— Qué te sucede? -preguntó de nuevo, sintiendo como Stiles le empujaba más- — Hace tiempo que estás muy raro con la manada, Scott esta increíblemente preocupado, él quería venir a verte pero yo me he ofrecido -suspiró- — Tú no eras así...has cambiado...y no me gusta -susurró, recibiendo una risa sarcástica del menor.
— A caso tiene que gustarte? -preguntó burlonamente, finalmente soltándole, pero sin apartarse- — Derek, sigo siendo yo, Stiles, solo que ahora soy alguien mejor, más listo, fuerte...preparado...-bajo la mirada- — Ya nadie morirá -susurró, apartándose por completo, para sentarse sobre su cama.
— Stiles...-lentamente se giro, observando cómo el chico tenía la mirada perdida- — El dolor puede cegarte...y hacer de ti alguien que realmente no quieres ser, pero crees que quieres...y créeme, este no eres tú...estás muy lejos de ser el Stiles al que conocí...-suspiró ligeramente, acercándose a él- — Somos una manada, puedes confiar en nosotros, si hay algo que te aqueja...- se arrodillo frente a él, mirándole atentamente.
— Tengo que contar mis municiones -murmuró, apartándose sin interés.
— Stiles....-lentamente se puso de pie y le siguió con la mirada.
— Ya puedes irte -interrumpió, tomando un par de cajas entre sus manos.

Sin poder hacer algo más, Derek le dirigió una pequeña mirada de preocupación, para después salir de la habitación, negando ligeramente con la cabeza.

Ni siquiera había llegado a la mitad de la sala, cuando escucho a Stiles encender su iPod, colocando una canción de System of a Down a todo volumen, para después ser acompañada de el sonido de fuertes y consistentes golpes, que Derek interpreto como golpes hacia su saco de boxeo.

Stiles estaba peor de lo que pensaba. Realmente no podía creer que aquel chico era el mismo chico que escuchaba rock y baladas clásicas con tonadas tranquilas y lloraba cuando se golpeaba el dedo pequeño del pie.

Una vez que salió de casa del menor, no dudo en tomar su teléfono y llamar a Deaton, pues necesitaba muchas respuestas.

Definitivamente algo debía estar mal con Stiles y las ideas que llegaban a su cabeza solo le llevaban a un lugar.

— Deaton...Es posible...Es posible que el Nogitsune regrese? -preguntó, frunciendo ligeramente su ceño.

Ignorando completamente que Stiles había apagado la música y le miraba desde la ventana de su habitación, con los brazos cruzados sobre su pecho y el ceño fruncido.

— Derek Hale, eres un enorme idiota, vete al infierno - soltó para si mismo, regresando a su tarea anterior.

Qué opinan de Derek?.

Qué opinan de Stiles?.