catorce

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Los dos corrieron hasta la parte de atrás del instituto para ver cómo se alejaba el furgón de sangre.

—¡Oh, no me fastidies! ¿Hemos corrido para nada? Guay... —dijo Benny, jadeando.

—¡Lily! ¡Benny! —llamó Ethan desde detrás de ellos. Se dieron la vuelta y lo vieron con Sarah.

—¡Ethan! ¡Me colgaste el teléfono! —exclamó Benny, todavía un poco sin aliento.

—¡Después! Ahora tenemos que ocuparnos de unas enfermeras vampiro —informó Sarah.

—¿Enfermeras vampiro? —preguntaron Lily y Benny al unísono.

—Muy bien, vale la pena correr —finalizó el castaño.

—Espera, ¿dónde están Rory y Érica?

—Suponemos que querían atracar el furgón de sangre —respondió Ethan.

Benny revisó su móvil para rastrear a Rory.

—Vale, muy bien. Rory se está moviendo, y rápido. O está volando o...

—¡O está en ese camión! —se dio cuenta Ethan, sus ojos se abrieron de par en par—. Y Érica puede que esté con él.

—Están en peligro. Los vampiros son super territoriales —advirtió Sarah, mordiendo una de las galletas que repartían las enfermeras al terminar la donación.

—¡Hay que coger el equipo e ir tras ellos, rápido!

El grupo volvió corriendo a la casa de Ethan, y Lily observó cómo Benny metía algunas pistolas llenas de agua bendita en una mochila

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El grupo volvió corriendo a la casa de Ethan, y Lily observó cómo Benny metía algunas pistolas llenas de agua bendita en una mochila.

—Mirad esto —dijo de repente Ethan, señalando la pantalla de su ordenador—. Esas enfermeras tienen más de treinta ciudades en su ruta.

Lily se acercó a él y miró por encima de su hombro la pantalla.

—Llevan con este timo años.

—Pero, no durarían mucho si se supiese que no son enfermeras de verdad —dijo él, levantando la vista hacia Lily, que estaba leyendo el artículo del periódico en la pantalla, inclinándose sobre su hombro.

—Podemos usar eso contra ellas —contestó ella, mirando hacia abajo. Se sonrieron el uno al otro, pensando lo mismo.

Benny se aclaró la garganta y ambos se giraron para mirarle.

—Venga chicos, tenemos que irnos, ahora. Rory y Érica tienen problemas, y creo que Sarah está abajo comiéndose tu carne congelada.

 Rory y Érica tienen problemas, y creo que Sarah está abajo comiéndose tu carne congelada

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El grupo se escondió de las enfermeras, escuchando su conversación.

—Además, esos dos no nos causaran muchos problemas —dijo la enfermera más baja.

—Tal vez ellos no —replicó Sarah, el grupo salió de donde estaban escondidos.

—Pero nosotros sí —terminó Ethan por ella.

—¿Vosotros? —preguntó la misma enferma, caminando hacia ellos.

—Sí, exacto. ¡Nosotros! —declaró Ethan.

—Sí, y yo... también —añadió Benny, todo el mundo se volvió para mirarle—. Soy... soy Benny, nos conocimos antes, soy el que no se desmayó —señaló a Ethan con una sonrisa burlona.

—Benny —regañó Ethan después de dejar escapar un suspiro—. Ve a buscar con Lily a Rory y Érica, Sarah y yo las vigilaremos.

Los dos corrieron hacia el furgón y se sentaron en la parte delantera, Benny en el asiento del conductor y Lily en el del copiloto; Benny empezó a toquetear los cables.

—¿Necesitas ayuda con eso? —preguntó la ojiazul.

Negó con la cabeza, sacando dos cables.

—Nah, soy un maestro de la electrónica- ¡ah! —gritó cuando los dos extremos de los cables se tocaron y le dieron una descarga.

—Oh Dios, ¿estás bien? —preguntó Lily, colocando su mano sobre la de él y mirándolo con preocupación.

Benny miró sus manos y luego volvió a mirarla a los ojos.

—Ah, s-sí, estoy bien.

Lily retiró rápido la mano y se aclaró la garganta.

—¿Qué hay de esto? —preguntó, cogiendo lo que parecía un mando a distancia.

—¿El mando? Genial, venga, vamos, nos necesitan.

Corrieron para reunirse con Ethan y Sarah, y Benny subió la antena del mando.

—¡He aquí! ¡El poder... de la tecnología! —dijo él, pulsando el botón. La puerta hizo un ruido pero las puertas permanecieron cerradas, así que lo pulsó de nuevo y lo golpeó sin éxito. Entonces lo agitó, como si de una varita mágica se tratase—. ¡Furgonus abretus! 

Lily se rió mientras las enfermeras suspiraban y abrían las puertas del furgón.

Los cuatro miraron atónitos cómo Érica y Rory estaban a punto de besarse.

—¡Esto no es lo que parece! —protestó Érica, mientras Rory se bajaba con una sonrisa de oreja a oreja—. ¡No se callaba! Besarlo me pareció lo menos vomitivo —gimió del disgusto y se bajó también del camión.

La enferma más alta gruñó después de que su compañera y ella cerraran las puertas del camión.

—¡Estamos rodeadas de candidatos a vampiros! Vámonos de aquí.

—Bueno, ¿os llevamos a casa? —preguntó Sarah a Érica y Rory, señalándolos.

—¡No! No hace falta. Hace buena noche y... podríamos practicar el vuelo —respondió ella, alejándose. Rory sonrió y levantó los pulgares antes de seguirla.

Los cuatro se rieron al oír cómo Erica le daba un bofetón.

—¡Au! ¡¿A qué ha venido eso?!

—Sabéis, algo me dice que Rory no intentó abrir la puerta con muchas ganas —comentó Benny, sonriendo con burla.

Lily levantó las cejas y se rió.

—¿Furgonus abretus?

—¿Estúpidus tonticus? —se burló Sarah.

—Te lo digo tío, ¡Lily me cogió literalmente de la mano! —Benny suspiró soñadoramente—

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—Te lo digo tío, ¡Lily me cogió literalmente de la mano! —Benny suspiró soñadoramente—. Fue increíble.

Ethan puso los ojos en blanco y se giró hacia su amigo.

—Seguramente sólo estaba preocupada-

Benny lo ignoró y continuó.

—Pero después me puse muy nervioso, y ella es como, la única chica que puede ponerme nervioso, ¿sabes? Aparte de Erica; pero ella sólo me pone nervioso porque me da un poco de miedo.

Ethan suspiró y se distrajo mientras su amigo seguía hablando.

Just Like Magic ➳ Benny Weir. . . 🇪🇸Donde viven las historias. Descúbrelo ahora